24 horas en Valladolid, ciudad de museos, de Zorrilla, Delibes y Col¨®n
A su amplia oferta cultural esta localidad de Castilla y Le¨®n suma un potente patrimonio hist¨®rico y el r¨ªo Pisuerga, perfecto para pasear por sus riberas o recorrer en barco
Valladolid es una ciudad castellana a la que no le importar¨ªa ser c¨¢ntabra. De la costa de aquella comunidad se han tra¨ªdo la arena con la que han hecho una playa a orillas del Pisuerga. R¨ªo que atraviesa la localidad de norte a sur y en el que desemboca el Esgueva. Cauces a los que hay que sumar el Canal de Castilla. Estos cursos de agua y las v¨ªas del tren hacen las veces de frontera de un n¨²cleo urbano, muchas ocasiones oculto por la niebla, al que se llega cruzando puentes como el del Poniente y el puente Mayor y atravesando pasos subterr¨¢neos desde los barrios de Las Delicias y Pajarillos.
En esa almendra central y a ambas orillas del Pisuerga se encuentran, entre otros lugares de inter¨¦s, las hist¨®ricas plazas Mayor y de Zorrilla, la catedral, la iglesia de san Pablo, palacios varios, el Museo Patio Herreriano, la Fundaci¨®n Casa de la India, el Museo de la Ciencia y el Centro Cultural Miguel Delibes, autor vallisoletano muy presente en la ciudad. Lo que nunca cambia aqu¨ª es la veneraci¨®n por la tapa, por el pincho que la acompa?a y puebla las barras de los bares y restaurantes de este lugar que ha hecho de la Semana Internacional de Cine (Seminci) una excusa m¨¢s para visitarla.?
9.00 Un caf¨¦ con vistas
Desde Madrid el tren es un medio de transporte muy c¨®modo y pr¨¢ctico para llegar a Valladolid. En la misma estaci¨®n Campo Grande (1) se encuentra el espacio de trabajo compartido VIA LAB. No muy lejos de la misma se puede desayunar en la cafeter¨ªa Amberes (calle del Puente Colgante, 1) mientras se contempla uno de los pocos carteles de ne¨®n que todav¨ªa iluminan la ciudad, el del restaurante Bus Stop, junto a la estaci¨®n de autobuses.?
10.00 De plaza en plaza
Entre la plaza de la Cruz Verde y la de Zorrilla se suceden la comercial y peatonal calle de la Manter¨ªa (2), la plaza de Espa?a (3) y el Museo Casa de Cervantes (4), residencia de dos plantas, precedida por un peque?o jard¨ªn, en la que el escritor vivi¨® un par de a?os junto a su familia. Callejeando en direcci¨®n norte se llega a la plaza Mayor (5), rect¨¢ngulo que se puede recorrer a cubierto bajo sus soportales de granito y en el que se suceden el Ayuntamiento, el Teatro Zorrilla y el caf¨¦ El le¨®n de oro. Desde este punto, despu¨¦s de un paseo por algunas calles del casco hist¨®rico, dejando atr¨¢s la Fuente Dorada y recoletas plazas, se llega a la catedral (6), junto a la plaza de la Universidad ¡ªno son pocos los estudiantes de todo el mundo que vienen a Valladolid a estudiar y hablar el que dicen que es el mejor espa?ol de todos¡ª, la parroquia Santa Mar¨ªa de la Antigua y el Teatro Calder¨®n, una de las sedes de la Seminci?(este a?o se celebra del 22 al 29 de octubre).
Un poco m¨¢s al norte se encuentra el Museo Nacional de Escultura (7). Tiene tres sedes: el colegio de San Gregorio, un edificio del siglo XV; el palacio de Villena, residencia nobiliaria del siglo XVI, y la Casa del Sol y la iglesia de San Benito, construcciones del siglo XVI, residencia y capilla funeraria del conde de Gondomar, respectivamente. Espacio muse¨ªstico muy cerca de la g¨®tica iglesia conventual de San Pablo, el Palacio Real y la Casa Museo Jos¨¦ Zorrilla (Fray Luis de Granada, 1) (8), la misma en la que naci¨® el poeta en 1817.
12.00 Mucha cultura contempor¨¢nea
La oferta cultural contempor¨¢nea corre a cargo de instituciones como la Fundaci¨®n Casa de la India (9). Un chalet de 1915 en la calle del Puente Colgante reconvertido en un espacio en el que se celebran actividades culturales, como exposiciones, talleres o presentaciones de libros. El Museo Patio Herreriano (10), ubicado en uno de los claustros del monasterio de San Benito, exhibe una colecci¨®n de arte contempor¨¢neo del siglo XX y se ha convertido en un centro de referencia en la ciudad. El arte m¨¢s actual se encuentra en Laboratorio de las Artes de Valladolid, LAVA (11), en el antiguo matadero municipal que hay en el paseo de Zorrilla. Una especie de centro de pruebas en el que se apoya a los creadores y artistas por medio de servicios y actividades que se adaptan a su producci¨®n. Un poco m¨¢s al sur est¨¢ La Comercial (12): un estudio, taller y laboratorio de creaci¨®n visual.
En la orilla occidental del r¨ªo Pisuerga toman asiento el Museo de la Ciencia (13), obra de los arquitectos Rafael Moneo y Enrique de Teresa, al que se puede acceder por medio de una pasarela que cruza el Pisuerga, y el Centro Cultural Miguel Delibes (14), de Ricardo Bofill, que da cobijo al auditorio, al conservatorio y a la Escuela Superior de Arte Dram¨¢tico y la Escuela Profesional de Danza.
14.30 Una tapa con premio
Emilio Mart¨ªn, cocinero del restaurante Suite 22 (15), prepara y explica con el mismo ¨¢nimo su tapa Corchifrito, ganadora del Concurso Nacional de tapas de Valladolid en su edici¨®n XVI. Una tapa o un trampantojo, con la que rindi¨® un sabroso y curioso homenaje a la gastronom¨ªa y vinos de Valladolid. Despu¨¦s, el caf¨¦ se puede tomar en un local hist¨®rico de la ciudad: el Bar Suizo (Doctrinos, 4) (16).
16.30 La tarde, a orillas del Pisuerga
Entre el puente del Poniente y Mayor, a la altura de este ¨²ltimo arranca un brazo del Canal de Castilla, en la orilla oriental del r¨ªo Pisuerga se extiende la playa fluvial de las Moreras (17), hecha con arena de la costa c¨¢ntabra. En ella uno se puede ba?ar, navegar a bordo de una piragua o del barco La leyenda del Pisuerga o pasear por la ribera. Sin duda, un buen lugar en el que oxigenarse.
19.00 Una pasi¨®n hecha bar
La Passion Caf¨¦ (Ruiz Hern¨¢ndez, 15) (18), antes caf¨¦ Bar El Aire ¡ªdel que se conserva el antiguo r¨®tulo¡ª, es un sito tan inesperado en una ciudad como Valladolid como abigarrada es su decoraci¨®n. Un horror al vac¨ªo en el que los estampados felinos no chirr¨ªan. Una decoraci¨®n desmesurada que atrapa e hipnotiza. Aqu¨ª uno se puede tomar un gin tonic o un t¨¦ verde.
22.00 De vuelta
Gracias a que hay muchos trenes de ida desde Madrid y vuelta desde Valladolid, son muchos quienes aprovechar¨¢n al m¨¢ximo el d¨ªa sin necesidad de pernoctar en la ciudad. Antes de marchar, de camino a la estaci¨®n se puede atravesar el parque Campo Grande y la plaza Col¨®n, del que no hemos dicho todav¨ªa que tiene una Casa Museo (18). El navegante ap¨¢trida muri¨® el 20 de mayo de 1506 en Valladolid.
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