La nueva Barbie es feminista y lucha contra el racismo
La activista afroamericana Ida B. Wells inspira el ¨²ltimo modelo de la mu?eca, que forma parte de una serie que homenajea a grandes mujeres
La casa Mattel ha seguido el lema ¡°renovarse o morir¡± y se ha adaptado a los nuevos reclamos de la sociedad. El resurgir de sus cenizas ha venido a trav¨¦s de un cambio radical en su producto estrella, necesario para sobrevivir en un mercado que rechaza todo lo que significaba aquella Barbie que apareci¨® en 1959. Ahora, su estrategia radica en reflejar la vida de mujeres sobresalientes. Una de las que se han inmortalizado ha sido Sarah Gilbert, la investigadora brit¨¢nica que colabor¨® en la creaci¨®n de la vacuna Oxford-AstraZeneca contra la covid-19. Aunque la propia Gilbert reconoci¨® al peri¨®dico The Guardian que encontraba al principio la iniciativa como ¡°extra?a¡±, m¨¢s tarde se mostr¨® ilusionada ante la idea de poder inspirar a las nuevas generaciones de ni?as. ¡°Ojal¨¢ mi mu?eca les descubra otras carreras cuya existencia no conoc¨ªan, como la de los vacun¨®logos¡±. Esta mu?eca es parte de una colecci¨®n que homenajea a seis sanitarias cuyo trabajo ha destacado en el combate contra la pandemia.
Suma y sigue. La primera Barbie de 2022 ha supuesto un homenaje a la activista y periodista afroamericana Ida B. Wells, que creci¨® siendo esclava y acab¨® convirti¨¦ndose en una periodista sobresaliente cuyo trabajo sobre los linchamientos raciales le vali¨® el Premio Pulitzer en 2020 (a t¨ªtulo bastante p¨®stumo, ya que muri¨® en 1931). Esta nueva Barbie forma parte de la colecci¨®n Mujeres que Inspiran, que re¨²ne a f¨¦minas de todos los tiempos que destacaron en diferentes disciplinas, como Frida Kahlo, Rosa Parks, Ella Fitzgerald, Naomi Osaka o Maya Angelou.
La colecci¨®n sigue creciendo y haci¨¦ndose cada vez m¨¢s contempor¨¢nea. Muchas de estas nuevas mu?ecas son protagonistas tambi¨¦n de la campa?a con motivo del Black History Month (mes de la historia negra).
Cada una de ellas viene acompa?ada de una hoja educativa con informaci¨®n de c¨®mo la mujer en la que est¨¢ inspirada cambi¨® la sociedad. Adem¨¢s, incluye referencias a f¨¦minas menos conocidas mundialmente, pero que marcaron un hito, como Patty Jenkins, la directora de Wonder Woman, que hizo historia al ser la primera mujer en dirigir una pel¨ªcula con un presupuesto superior a los 100 millones de d¨®lares; Amelia Earhart, la primera piloto que cruz¨® el oc¨¦ano Atl¨¢ntico volando en solitario (lo consigui¨® en 1932), o Nicola Adams Obe, la primera boxeadora abiertamente LGTB en ganar una medalla de oro en los Juegos Ol¨ªmpicos.
Para muchos, resultar¨¢ dif¨ªcil asociar una Barbie con una iniciativa feminista y social de este tipo. Durante d¨¦cadas ha sido una mu?eca criticada y acusada de ser simplemente un instrumento para la opresi¨®n femenina; un elemento de sometimiento de las mujeres a la perfecci¨®n constante, a su sexualizaci¨®n desde ni?as y a la generaci¨®n de estereotipos nocivos. Una de sus lacras m¨¢s criticadas han sido sus medidas, tan fuera de la realidad que podr¨ªan incentivar la anorexia. En 2016 la casa Mattel trat¨® de subsanar el error sacando al mercado la Barbie curvy, con medidas normales, lo que le vali¨® una portada en la revista Time con el titular ¡®?Y ahora podemos dejar de hablar de mi cuerpo?¡¯. Sin embargo, la mu?eca que se sigue vendiendo m¨¢s es la ¡°cl¨¢sica¡±, entendiendo por tal la que est¨¢ extremadamente delgada. Lo bueno es que ahora, al menos, ese juguete ic¨®nico se preocupa por los prejuicios raciales.
Aunque la marca lo est¨¢ intentando, no siempre acierta. El pasado verano fue muy criticada por lanzar una colecci¨®n de los Juegos Ol¨ªmpicos de Tokio, aparentemente inclusiva, pero donde no hab¨ªa representaci¨®n asi¨¢tica. La responsabilidad tambi¨¦n recae en los padres: ?qu¨¦ mu?ecas compran? y ?qu¨¦ modelos inculcan?
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