Han hecho da?o a una ni?a
Esta ni?a le ha costado a su due?o, un joven de 25 a?os, 2.300 euros. Es posible que haya sido un regalo de cumplea?os de los padres, quiz¨¢ para que se case y siente la cabeza. Preguntada sobre la operaci¨®n comercial, la cr¨ªa ha confesado que al menos podr¨¢ comer dos veces al d¨ªa. Quiere decir que se conforma. En cada parte del mundo hay atrocidades con las que nos conformamos para comer dos veces al d¨ªa (signifique lo que signifique comer en cada sitio). Lee uno la noticia y se dice en tono consolador: ¡°Aqu¨ª no¡±.
Aqu¨ª no. Aqu¨ª, una ni?a de ocho a?os como Afasana costar¨ªa m¨¢s y habr¨ªa que ir a buscarla al mercado negro, mientras que en Afganist¨¢n est¨¢n a la vista del cliente, como cualquier otro producto de consumo.
Por los d¨ªas en los que tropec¨¦ con esta foto, andaba yo leyendo la Trilog¨ªa de Copenhague, una emocionante novela autobiogr¨¢fica de la danesa Tove Ditlevsen, esencial para las letras europeas, aunque poco conocida en Espa?a. He aqu¨ª uno de sus pasajes: ¡°Me siento frente a la m¨¢quina y empiezo a teclear para que crean que trabajo mientras pienso con pena e inquietud en la oscuridad que se cierne sobre el mundo¡±.
?A cu¨¢ntos nos ocurre esto de pensar con ¡°pena e inquietud en la oscuridad que se cierne sobre el mundo¡±? Creo que a muchos. No hay m¨¢s que ver el gesto de preocupaci¨®n que lleva la gente en el metro o en la soledad de sus propios autom¨®viles. Ditlevsen estaba escribiendo precisamente una novela titulada Han hecho da?o a una ni?a. Ese t¨ªtulo podr¨ªa ser el pie de esta foto.
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