?Vivimos en un mundo cada vez m¨¢s gris?
Paredes blancas, mesas de madera, electrodom¨¦sticos y ordenadores grises¡ ?Est¨¢ el color desapareciendo de nuestro mundo? Los expertos concluyen que la tecnolog¨ªa nos conduce a la neutralidad crom¨¢tica, pero la vida y sus circunstancias nos siguen pidiendo colorido.

?Estamos en un mundo cada vez m¨¢s gris? Eso se pregunta un hilo de Twitter en el que un usuario parte de un art¨ªcu?lo en Medium que analiza m¨¢s de 7.000 fotograf¨ªas de objetos cotidianos o familiares ¡ªdesde la tecnolog¨ªa fotogr¨¢fica hasta la medici¨®n del tiempo, la iluminaci¨®n, la impresi¨®n y la escritura, los electrodom¨¦sticos o la navegaci¨®n¡ª recogidas de una colecci¨®n del Science Museum Group (Reino Unido). La tendencia m¨¢s notable, concluye, es un aumento del gris a lo largo del tiempo. El hilo prosigue: las cocinas brit¨¢nicas se han vuelto cada vez m¨¢s neutras en totalidad; hay una tendencia a emblanquecerlo todo ¡ªest¨¦ hecho de madera, ladrillo o yeso¡ª, e incluso los locales de McDonald¡¯s han perdido su rojo emblem¨¢tico al intentar modernizar sus establecimientos con madera. ?Hemos convertido el universo decorativo occidental en una especie de oficina as¨¦ptica y sobria?
Desde luego que no, se?alan los expertos. Mar¨ªa Pascual, especialista en tendencias de la empresa l¨ªder en pron¨®sticos de cambios WGSN, es clara: ¡°Actualmente estamos viendo un aumento en el gris en algunos aspectos de la tecnolog¨ªa, por eso puede parecer que nuestro mundo se est¨¢ volviendo m¨¢s gris, pero, aparte de los productos tecnol¨®gicos, hay un aumento en el color liderado por el interiorismo y el dise?o industrial¡±.
No hay una evoluci¨®n lineal del color en la historia del interiorismo. El racionalismo y la irrupci¨®n del Movimiento Moderno marcaron el dise?o de interiores durante el siglo XX. Espacios di¨¢fanos, de estilo funcional, con formas sobrias, de tonalidades blancas y grises, donde el color de algunos objetos ha actuado como contrapunto, pero nunca como norma. Aunque este ha sido el movimiento latente, ha habido vanguardias que han roto con ese esquema. Ana Torres, miembro del Grupo de Investigaci¨®n del Color en Arquitectura de la Universitat Polit¨¨cnica de Val¨¨ncia, se?ala que la evoluci¨®n del color tanto en interiores como en exteriores est¨¢ muy conectada con el arte, la artesan¨ªa y las vanguardias art¨ªsticas del siglo XX. El color, que siempre ha estado presente en la historia y ha actuado como proceso de cambio en ciertos momentos, resurgi¨® para animar los cielos grises tras la I y la II Guerra Mundial de la mano de la Escuela de la Bauhaus en Alemania. ¡°Posteriormente alcanzar¨ªa un extraordinario protagonismo como medio de expresi¨®n funcional y art¨ªstica¡±, explica Torres.
Para Marian Rubio, profesora de Interiorismo en el IED de Madrid, aunque en la actualidad el estilo racional se mantiene de fondo, ¡°se ha vuelto a recuperar el color¡±. La explosi¨®n de color ya sucedi¨®, por ejemplo, en los a?os sesenta y setenta como reacci¨®n contra el racionalismo, con la eclosi¨®n del pop y de movimientos sociales como el Mayo del 68. ¡°Aquella reivindicaci¨®n de libertades acaba reflej¨¢ndose en la est¨¦tica general del momento. Aunque despu¨¦s de unos a?os enloquecidos se vuelve a esa sobriedad que implica un concepto de modernidad, como ejemplifica la oficina de una alta empresa internacional con mesas de cristal¡±.
Seg¨²n esta interiorista, ¡°en los a?os noventa hay un minimalismo claro, pero en los dos mil llega una recuperaci¨®n del color¡±. Un ejemplo estridente es el dise?o que crearon en 2014 India Mahdavi y David ?Shrigley para el restaurante londinense Sketch, pintado por entero de rosa. Un art¨ªculo de The Wall Street Journal sobre el ¡°rosa milenial¡± ?se?ala que aquello supuso en 2014 ¡°el disparo en la proa de los tonos tradicionales como el azul marino y el tostado¡±.
En la actualidad, ¡°mientras en algunas categor¨ªas tecnol¨®gicas, incluyendo el interior de los veh¨ªculos, est¨¢ aumentando la cantidad de grises, nuestros hogares se est¨¢n volviendo cada vez m¨¢s coloridos¡±, en parte por ¡°la dopamina y la b¨²squeda de la felicidad por medio del color¡±, explica la analista de tendencias Mar¨ªa Pascual.
El color influye en nuestra psicolog¨ªa y viceversa. Susana Zald¨ªvar, especialista en color, arguye que ahora mismo estamos en una situaci¨®n en la que ¡°no acabamos de salir a flote, y la gente tiene necesidad de ponerse plumas, brillantes y adornos¡±, al igual que ocurri¨® en aquellos locos a?os veinte. Pero, como dice el dicho: para gustos, colores. A nivel personal, la elecci¨®n difiere entre si una persona es m¨¢s arriesgada o fr¨ªvola: cuando uno no quiere arriesgar, se decanta por colores tostados. Tambi¨¦n influye la econom¨ªa de cada cual: si el sof¨¢ ha de durar a?os, m¨¢s vale que su color no canse. Aunque Ikea lo ha puesto f¨¢cil: muebles pigmentados a precios razonables.
Al final, o al principio de todo, est¨¢n las tendencias que orquesta el mundo marketiniano. Para Rubio es natural el continuo cambio de gamas crom¨¢ticas por ¡°el cansancio tanto del p¨²blico consumidor como de los propios creadores. Mientras la moda antes pod¨ªa durar 50 o 100 a?os, ahora todas las etapas se queman en un tiempo mucho m¨¢s corto¡±, se?ala Rubio. Y los colores se sobreponen y acumulan.
¡°Cada vez hay m¨¢s inter¨¦s en las fachadas y en la recuperaci¨®n crom¨¢tica¡±, se?ala Torres, quien trabaja en restauraci¨®n y ha pilotado un proyecto a nivel nacional en residencias que resalta los beneficios de llenar de color los espacios habitados por las personas mayores. Estas virtudes no son nuevas. El color existe desde que el mundo es mundo. Aunque ahora yacen blancas, las estatuas griegas vibraban con pigmentos que el paso de los siglos ha sepultado, como recoge la actual exposici¨®n Chroma: Escultura antigua en color del Museo Metropolitano de Nueva York. Son, al fin, tiempos de reivindicar la sensatez del color en nuestras vidas.
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