El mayor fracaso
¡°Si no podemos facilitar todo el material escolar a absolutamente todos los ni?os, ?qu¨¦ asco de pa¨ªs estamos creando?¡± | Columna de Rosa Montero
Hace un par de semanas se public¨® un desolador estudio de los profesores Montalb¨¢n y Ruiz-Valenzuela. Conclu¨ªa que en Espa?a un ni?o de nueve a?os de nivel econ¨®mico alto le saca casi dos cursos a otro de nivel bajo. Por razones que no vienen al caso, llevo unos 10 a?os en contacto con un pu?ado de familias que se encuentran en las fronteras de la supervivencia, en una zona social de extremo desamparo, en los flecos rotos de la realidad. Al principio pens¨¦ que eran v¨ªctimas de la crisis de 2008 y que al superarse ¨¦sta se repondr¨ªan, y, en efecto, algunas de las familias salieron del hoyo. Pero muy pocas. La mayor¨ªa han seguido y me temo que probablemente seguir¨¢n en ese filo atroz de la casi indigencia. Todos se esfuerzan en buscar trabajo, todos se contratan de cuando en cuando en empleos miserables, temporales, a menudo irregulares, cuyos sueldos m¨ªnimos no les permiten pagar las facturas b¨¢sicas: casa, comida, luz, transporte, agua.
Es un mundo sumergido que ni siquiera podemos imaginar. Estas familias me han hecho el invaluable regalo de informarme de algo que no queremos saber, y es que hay gente que entra en la vida con tal nivel de desamparo que le es extremadamente dif¨ªcil salir de ah¨ª. Algunos, pocos, gracias a sus propios m¨¦ritos, a un esfuerzo ¨ªmprobo y a la buena suerte, logran cambiar su destino, pero la mayor¨ªa no es que no quieran hacerlo o no lo intenten, es que no pueden. Por lo general no tienen muchos estudios ni conocen oficios; suelen venir de familias desestructuradas con graves carencias afectivas, lo que hace que tengan muy poca autoestima; se han alimentado y cuidado siempre mal y abundan las enfermedades cr¨®nicas y las dolencias inhabilitantes; y, para empeorarlo todo, estas familias (la mayor¨ªa monoparentales a cargo de la madre) tienden a tener un mont¨®n de hijos. Ni?os que se enfrentan a un futuro tan negro como el suyo. Recordemos lo de los dos cursos de diferencia a los nueve a?os.
Y es que lo terrible de esta situaci¨®n se ve m¨¢s claro que nunca cuando llega la hora de comenzar el curso en los colegios. Todos los septiembres son brutales, por los costes de los libros y el material escolar. Este a?o la media de gasto por ni?o, seg¨²n un estudio del comparador bancario iAhorro, ha sido de 405 euros, una cantidad abultada para muchos hogares, que se convierte en tremenda si se multiplica por varias criaturas y que hace que muchas familias de econom¨ªa estable pero ajustada tengan que dejar de permitirse caprichos (ese cine, esa cena) durante cierto tiempo. Una situaci¨®n de apurada estrechez que se convierte en angustiosa cuando nos acercamos a los hogares m¨¢s desamparados.
Dependiendo de las comunidades, hay diversas ayudas para el material escolar. En Andaluc¨ªa, Madrid, Valencia, La Rioja y Murcia, los libros, de segunda mano, se dan gratis y han de devolverse a fin de curso. En el resto del pa¨ªs var¨ªa mucho. En Navarra solo dan los libros de infantil y primaria; en otras zonas se pueden pedir becas o apoyos econ¨®micos dependiendo de los ingresos que tengas. A veces es dif¨ªcil hacer el tr¨¢mite. A veces lo que obtienes no es suficiente. Y siempre queda el limbo de los que no pueden acogerse.
Un ejemplo: una de mis familias es XX, una mujer con tres hijos repartidos entre la ESO y el bachillerato. Viven en un pueblo de Arag¨®n, comunidad en la que puedes conseguir ayuda para libros si cobras menos de 13.896 euros al a?o. Pero resulta que el a?o pasado XX hizo un curso de formaci¨®n con pr¨¢cticas pagadas que pasaron justo por encima de esa cifra. Ahora est¨¢ de nuevo sin trabajo y sin un euro (me manda la foto de su cuenta bancaria: 0,11 c¨¦ntimos), pero las becas para libros de este curso se piden de acuerdo a los ingresos del a?o anterior.
XX estuvo recorriendo todo el pueblo para intentar encontrar los libros m¨¢s baratos, y la suma total para los tres hijos no bajaba de 861 euros. Una cantidad por completo fuera de su alcance. Simplemente no puede conseguirlos. Y estoy segura de que XX no es la ¨²nica que se encuentra en semejante trance, cosa que me parece inadmisible. Si no podemos facilitar todo el material escolar a absolutamente todos los ni?os que hay en Espa?a, ?qu¨¦ asco y qu¨¦ fracaso de pa¨ªs estamos creando?
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