C¨®mo la NASA est¨¢ cambiando su investigaci¨®n de los objetos no identificados

En noviembre del 2022 la NASA, siguiendo sus principios de apertura, transparencia e integridad, anunci¨® p¨²blicamente por primera vez en su historia la creaci¨®n de un equipo de investigaci¨®n de objetos no identificados, un tema que hist¨®ricamente hab¨ªa sido objeto de burla por parte de la comunidad cient¨ªfica. Se trata de un grupo multidisciplinar formado por 16 investigadores entre los que se encuentra el ex astronauta Scott Kelly, la ocean¨®grafa Paula Bontempi o el presidente de la Asociaci¨®n de Universidades para la Investigaci¨®n en Astronom¨ªa, Matt Mountain. Para que este nuevo giro estrat¨¦gico se tomara en serio y evitar las previas asociaciones peyorativas a la palabra ovni (UFO), la instituci¨®n cambi¨® el acr¨®nimo y utiliz¨® otro con un significado m¨¢s extenso. Ahora se denominan Fen¨®menos An¨®malos No Identificados (fani), UAP, por sus siglas en ingl¨¦s, y en ellos se incluyen no solo los a¨¦reos sino tambi¨¦n los espaciales y mar¨ªtimos.

Los resultados de esta investigaci¨®n independiente se har¨¢n p¨²blicos a mitad de este a?o, pero ya barajamos algunos datos interesantes. El 13 de enero el Pent¨¢gono public¨® un informe en el que se recogen 510 avistamientos de fen¨®menos an¨®malos no identificados y donde sobresale el hecho de que en diecisiete meses se han advertido 247 UAP, casi la misma cantidad que se hab¨ªa registrado a lo largo de los ¨²ltimos diecisiete a?os (del 2004 al 2021). Las instituciones implicadas en la publicaci¨®n destacan en el informe que este aumento se debe en parte ¡°a la reducci¨®n del estigma¡± que iba asociado a todo lo relativo a este tema. De hecho, en el informe preliminar, publicado en junio del 2021, se menciona que durante mucho tiempo el gran obst¨¢culo de la investigaci¨®n ha sido el miedo de los pilotos a perder su reputaci¨®n si compart¨ªan p¨²blicamente su experiencia como testigos de estos fen¨®menos.

La gran revelaci¨®n del informe es que despu¨¦s de estudiar los 510 casos descartaron la mayor¨ªa atribuy¨¦ndolos a fen¨®menos atmosf¨¦ricos, contaminaci¨®n a¨¦rea, programas de desarrollo de la industria estadounidense o del Gobierno de los Estados Unidos o sistemas extranjeros. Pero determinaron que 177 de ellos s¨ª son UAP que necesitan de un an¨¢lisis m¨¢s exhaustivo. Seg¨²n el informe estos fen¨®menos no resueltos muestran ¡°caracter¨ªsticas de vuelo o capacidad de rendimiento inusual¡±. En algunos casos se observ¨® que los objetos ¡°pod¨ªan permanecer inm¨®viles en condiciones de fuertes vientos, moverse contra el viento, maniobrar bruscamente, o moverse a gran velocidad sin medios discernibles de propulsi¨®n¡±, demostrando una tecnolog¨ªa m¨¢s avanzada de la que disponemos en la actualidad.

Cada vez son m¨¢s los cient¨ªficos de prestigio que no descartan del todo hip¨®tesis relativas a que la vida extraterrestre pueda existir. Uno de los mayores exponentes es Avi Loeb, catedr¨¢tico de astrof¨ªsica de la universidad de Harvard, qui¨¦n defiende que el Oumuamua, el objeto interestelar sin identificar detectado en el 2017, fue una manifestaci¨®n de vida alien¨ªgena porque hay evidencia suficiente para considerar que fue creado artificialmente. Y en el 2020 el Departamento de Defensa de EE UU divulg¨® grabaciones de objetos voladores que se mov¨ªan a gran velocidad y se desvanec¨ªan misteriosamente, para atestiguar que estos videos, que ya circulaban en redes, eran reales. Este fue un momento hist¨®rico en el que por primera vez el Gobierno estadounidense reconoc¨ªa y legitimaba de forma p¨²blica la existencia de estos fen¨®menos an¨®malos y compart¨ªa grabaciones que hasta el momento hab¨ªan sido analizadas en programas secretos de investigaci¨®n.