Michel: ¡°?Tenemos acuerdo, Pedro?¡± S¨¢nchez: ¡°No. As¨ª es inaceptable¡±. As¨ª fue la tensa cumbre de la UE

Ya llevaban demasiadas horas dando vueltas sin acuerdo. As¨ª que Charles Michel, presidente del Consejo Europeo, hizo un receso con su equipo para buscar un punto de encuentro en medio de la cumbre europea del pasado jueves para hacer frente a la crisis del coronavirus. Cuando Michel volvi¨®, cre¨ªa tenerlo. El italiano Giuseppe Conte, aliado con Pedro S¨¢nchez ¡ªuna escena que record¨® a la cumbre de junio de 2012, en pleno debate sobre la austeridad, cuando Mario Monti y Mariano Rajoy se plantaron ante Angela Merkel¡ª ya hab¨ªa amenazado varias veces con bloquear la cumbre ante las resistencias del holand¨¦s Mark Rutte y la canciller alemana. Ella es la ¨²nica que sigue all¨ª, ocho a?os despu¨¦s, de nuevo frente a una alianza de Italia y Espa?a, esta vez respaldados por siete pa¨ªses, Francia incluida. La reconstrucci¨®n que ha hecho EL PA?S con fuentes de varias delegaciones muestra la intensidad de la discusi¨®n.

Michel vio a S¨¢nchez con dudas.

¡ª?Tenemos un acuerdo, Pedro?

¡ªNo, Charles. As¨ª es inaceptable. No puedo aceptar un lenguaje vago y hablar de varias semanas cuando mi pa¨ªs tiene la emergencia sanitaria que tiene. Hemos pedido seguro de desempleo com¨²n y no me lo est¨¢is dando. El mandato al Eurogrupo tiene que ser claro.

S¨¢nchez se plant¨® y amenaz¨® con no firmar la declaraci¨®n. La discusi¨®n, que ya llevaba horas, se complic¨® a¨²n m¨¢s. El holand¨¦s Rutte, el m¨¢s duro, ya hab¨ªa tenido un intenso cruce con Conte, que rechazaba cualquier referencia al mecanismo europeo de rescate en la resoluci¨®n final. Para Italia, con la situaci¨®n econ¨®mica m¨¢s delicada, eso supondr¨ªa el estigma de un rescate con condiciones, como el de Grecia en 2010. Algo inaceptable por una crisis de la que nadie es culpable y afecta a todos por igual, insist¨ªa Conte apoyado por S¨¢nchez y otros.

¡ªSi Italia quita la menci¨®n al Mede [el mecanismo de rescate] nosotros eliminamos todo el resto del p¨¢rrafo¡ª, se faj¨® Rutte. Merkel sali¨® en su apoyo y aconsej¨® al italiano no despreciar el Mede.

¡ªEs un instrumento muy bueno. Al final es el que te va a ayudar. No seas tan cr¨ªtico. Si lo que est¨¢s esperando son los coronabonos, no van a llegar nunca. Mi Parlamento no lo aceptar¨ªa. Est¨¢is generando expectativas que no se van a cumplir y lanzando mensajes de divisi¨®n¡ª, protest¨® Merkel, molesta por la carta de nueve pa¨ªses para pedir los coronabonos.

Al final, S¨¢nchez y Merkel tambi¨¦n discutieron abiertamente:

¡ªEsto es claramente insuficiente. No puedo ir a mis ciudadanos con esto en este momento. Necesito un lenguaje claro¡ª, insisti¨® S¨¢nchez.

¡ªPedro, te equivocas. Dices que el p¨¢rrafo no es nada, pero hay gente trabajando, hay que dejarles¡ª, sugiri¨® la canciller, que pretend¨ªa dejar el asunto para el Eurogrupo, que re¨²ne a los ministros de Finanzas.

¡ªAngela, te escucho, pero es claramente insuficiente. Ya hemos estado aqu¨ª. Si no les damos un mandato claro, ya sabemos qu¨¦ va a pasar. ?No entend¨¦is la emergencia que estamos viviendo?

¡ª?Pedro, como puedes decir que no la entiendo?¡ª, se molest¨® la alemana.

¡ªNecesito que entend¨¢is la urgencia del momento.

¡ªPedro, nosotros estamos ya al l¨ªmite. Ya hemos hecho muchos compromisos.

¡ªYo tambi¨¦n he hecho muchos compromisos en una situaci¨®n muy dif¨ªcil.

¡ªPedro tiene raz¨®n¡ª, terci¨® el franc¨¦s Emmanuel Macron. ¡ªEstoy con ¨¦l en que no podemos pasar nuestra responsabilidad pol¨ªtica al Eurogrupo. Esto es un tema pol¨ªtico, no podemos dejarlo en manos de los ministros de Finanzas, que reproducen las posiciones de cada uno,

Macron, con todo, tuvo mucho menos protagonismo que otras veces, seg¨²n fuentes de varias delegaciones. ¡°Fue como un partido de f¨²tbol. Despu¨¦s de las intervenciones de algunos primeros ministros, salt¨¢bamos como si hubieran metido gol¡±, se entusiasma una de las delegaciones participantes. Las normas de distanciamiento impusieron que la cita se celebrase por videoconferencia, lo que auguraba una breve reuni¨®n para dar el visto bueno a una declaraci¨®n conjunta llena de intenciones tan buenas como vagas. Pero la rebeli¨®n de Espa?a e Italia cambi¨® el escenario. Y los participantes consultados describen las seis horas de tel¨¦fono como una de las cumbres m¨¢s apasionantes de los ¨²ltimos tiempos, llena de esgrima fina y con alguna pu?alada dial¨¦ctica trapera, con Merkel, S¨¢nchez, Conte y Rutte como los grandes protagonistas de un duelo a cuatro que acab¨® en tablas y dej¨® el desenlace para el partido de vuelta, dentro de dos semanas.

La cita arranc¨® a las cuatro de la tarde con la intervenci¨®n de Michel, que intent¨® poner en valor las medidas que se han adoptado desde el comienzo de la crisis, como la compra de material o la inversi¨®n de 170 millones de euros en investigaci¨®n sobre la posible vacuna. El turno pas¨® a la presidenta de la Comisi¨®n Europea, Ursula von der Leyen, que, tras su intervenci¨®n inicial, mantuvo silencio. Fue la gran ausente de la cita junto al discreto protagonismo de Macron.

Los presidentes del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, y del Eurogrupo, el ministro portugu¨¦s M¨¢rio Centeno, fueron los encargados de describir el dram¨¢tico escenario econ¨®mico que se avecina. ¡°Afrontamos una recesi¨®n que puede oscilar entre el 2% y el 10% de ca¨ªda del PIB¡±, avis¨® Lagarde, seg¨²n fuentes de los asistentes. La francesa record¨® que el gasto fiscal aprobado hasta ahora equivale a dos puntos del PIB. Pero cree que podr¨ªa ser necesario duplicarlo hasta el 4%, una ingente multiplicaci¨®n de recursos que no todos los pa¨ªses pueden permitirse con sus propios medios. Centeno, seg¨²n las fuentes, tambi¨¦n se sum¨® a la descripci¨®n de un panorama bastante apocal¨ªptico.

La primera ronda de intervenci¨®n desde las respectivas capitales no anticipaba sorpresas, dado que la posici¨®n de cada Gobierno era conocida, con el bando de la ortodoxia fiscal encabezado por Alemania y Holanda, y el grupo partidario de una respuesta fiscal europea agrupado en torno a ¡°la carta de los nueve¡±, suscrita el d¨ªa antes por Francia, Italia y Espa?a, entre otros.

¡°Arranc¨® Merkel, que entraba desde su casa, sin v¨ªdeo, solo con una foto de ella en la pantalla, muy joven por cierto, y, curiosamente, con la voz de una int¨¦rprete, no la suya¡±, apunta uno de los presentes. La ronda sigui¨® sin contratiempos. Michel pod¨ªa confiar en una cumbre tranquila de poco m¨¢s de dos horas.

La sorpresa lleg¨® con la conexi¨®n con Roma y Madrid. S¨¢nchez y Conte ¡°despreciaron el borrador de la declaraci¨®n y ambos dijeron que ese texto no val¨ªa para nada¡±, apunta una fuente diplom¨¢tica.

La cumbre acababa de estallar. Michel intent¨® reconducir la situaci¨®n, tirando de su conocida habilidad para el compromiso y de sentido del humor.

¡ªCreo que tenemos un peque?ito problema con el p¨¢rrafo 14¡ª, ironiz¨® el presidente, en alusi¨®n a la parte de las conclusiones que hab¨ªa desatado la tormenta. Las pantallas estallaron en una carcajada ante la broma de Michel. La primera y ¨²ltima antes de abordar el ¡°peque?ito problema¡± durante varias horas.

S¨¢nchez y Merkel tambi¨¦n chocaron a cuenta de la propuesta espa?ola para que los presidentes de las cinco instituciones europeas (Comisi¨®n, Consejo, Parlamento, BCE y Eurogrupo) elaboren un informe sobre las posibles f¨®rmulas de financiaci¨®n de una respuesta europea a la crisis del coronavirus.

¡ªNein [No], se oy¨® desde la pantalla de Berl¨ªn, ya con la voz de Merkel, pero sin su imagen en directo.

¡ªAngela, ?c¨®mo es posible que no conf¨ªes en un informe elaborado por nuestras instituciones?¡ª, le espet¨® S¨¢nchez.

¡ªPorque propondr¨¢ cosas que no puedo asumir¡ª, respondi¨® Merkel, convencida de que los cinco presidentes (entre los que hay una francesa, un italiano, un portugu¨¦s y un belga) acabar¨ªan proponiendo alg¨²n tipo de mutualizaci¨®n de deuda (coronabonos o eurobonos) inaceptable para Berl¨ªn. Resultado: el presidente del Parlamento, David Sassoli, y Centeno se cayeron de la lista. Y Merkel exigi¨® mantener a la alemana Von der Leyen. A cambio, S¨¢nchez logr¨® que se incorporase el nombre de la francesa Lagarde.

¡°Hubo un momento en que pensamos que era imposible llegar a un acuerdo¡±, reconocen fuentes cercanas a Michel. En realidad no hubo pacto, sino m¨¢s bien un plante de Espa?a e Italia, que ha dejado m¨¢s en evidencia las posiciones duras de los mismos que en 2012 apostaban por la austeridad y ahora siguen rechazando los coronabonos casi como si les fuera la vida en ello. ¡°No generen falsas expectativas¡±, insist¨ªa Merkel. El ¡°nein¡± sigue ah¨ª. En dos semanas, con la crisis del coronavirus avanzando sin freno por toda Europa y destruyendo vidas, empleos y empresas, llega la segunda vuelta.

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