El riesgo de volver a delinquir por la pandemia
Prisiones da apoyo psicol¨®gico telef¨®nico a los 8.900 penados por delitos violentos leves que asist¨ªan a programas de rehabilitaci¨®n ahora suspendidos
La justicia les dio una segunda oportunidad que el coronavirus ha puesto ahora en riesgo. Los condenados a menos de dos a?os de c¨¢rcel por delitos leves a los que la sentencia les permiti¨® evitar el ingreso en prisi¨®n a condici¨®n de que siguieran uno de los programas de rehabilitaci¨®n de Instituciones Penitenciarias han visto como el decreto de estado de alarma del 14 de marzo cortaba bruscamente la terapia que recib¨ªan. En estos programas -que inclu¨ªan reuniones grupales ahora imposibles de realizar por el confinamiento- participaban en aquel momento 8.884 penados, buena parte condenados por amenazas o maltrato psicol¨®gico a sus parejas, seg¨²n las estad¨ªsticas del Ministerio del Interior. El pasado 30 de marzo, los Servicios de Gesti¨®n de Penas y Medidas Alternativas (SGPMA) de Prisiones ya pusieron en marcha un servicio de seguimiento telef¨®nico para ¡°identificar las variables de riesgo de reincidencia derivadas de la situaci¨®n de confinamiento¡± en estos condenados. Ahora, con la experiencia de estas dos ¨²ltimas semanas, los expertos han elaborado un documento de trabajo en el que se detalla a los psic¨®logos penitenciarios y de las asociaciones colaboradoras c¨®mo atender a distancia su evoluci¨®n para evitar que vuelvan a delinquir.
El documento, al que ha tenido acceso EL PA?S, se?ala que este seguimiento telef¨®nico prestar¨¢ ¡°especial atenci¨®n¡± a aquellos penados que, cuando estall¨® la crisis sanitaria, segu¨ªan cinco terapias de rehabilitaci¨®n concretas de los cerca de una docena que Prisiones tiene en marcha. Se trata de los programas Puente Extendido (destinados a los que sufren un trastorno mental grave) PRIA-MA (para condenados por violencia de g¨¦nero), Encuentro (para implicados en agresiones familiares), PCAS (para el control de la violencia sexual) y Fuera de Red (dirigido a consumidores de pornograf¨ªa infantil en internet). Todos los participantes en ellos recibir¨¢n a partir de ahora, al menos, una llamada semanal, salvo aquellos casos catalogados de ¡°prioridad alta¡± por haber manifestado problemas de ¡°salud mental, drogodependencias, confinamiento en soledad sin redes de apoyo social, detecci¨®n de situaciones de conflicto en la unidad de convivencia o detecci¨®n de factores de riesgo de violencia inminente¡±. En ese caso, los contactos telef¨®nicos ser¨¢n dos cada siete d¨ªas. Guadalupe Rivera, subdirectora general de Medio Abierto y Penas y Medidas Alternativas, asegura que ¡°los propios penados tambi¨¦n pueden llamar a los terapeutas que les atienden si son conscientes de que el confinamiento est¨¢ teniendo un efecto negativo en su comportamiento¡±. Rivera insiste en que el objetivo final es ¡°evitar que vuelven a delinquir¡±.
Para lograrlo, el documento fija las pautas y preguntas que deben conducir estas conversaciones telef¨®nicas. As¨ª, se pide a los psic¨®logos que, en primer lugar, transmitan ¡°tranquilidad ante las preocupaciones o miedos¡± que los penados puedan presentar ante la enfermedad, el contagio en familiares o allegados, o la p¨¦rdida del puesto de trabajo y los ingresos por la crisis econ¨®mica provocada por la pandemia. En las llamadas, los profesionales debe intentar detectar si el penado se encuentra solo durante el confinamiento, tiene cubiertas las necesidades b¨¢sicas, c¨®mo le est¨¢ afectando a ¨¦l y su entorno la covid-19, qu¨¦ gesti¨®n hace del tiempo de encierro, su situaci¨®n laboral y econ¨®mica, el estado emocional y la posibilidad de que est¨¦ consumiendo alg¨²n tipo de droga. En funci¨®n de las respuestas, el profesional deber¨¢ proponer al condenado que adopte diferentes actuaciones, entre ellas, poner en pr¨¢ctica las medidas de autocontrol aprendidas en las sesiones del programa hasta que la pandemia oblig¨® a suspenderlo.
Instituciones Penitenciarias presta especial atenci¨®n a dos tipos de penados: los condenados por violencia de g¨¦nero y familiar, y a aquellos por delitos de ¨ªndole sexual. En los primeros, los psic¨®logos deber¨¢n detectar las respuestas que revelen ¡°un incremento de la hostilidad y una posible planificaci¨®n del da?o, as¨ª como la presencia de emociones de ira, rabia y resentimiento¡±. En caso de que el penado ¡°verbaliza una situaci¨®n inminente de riesgo para terceras personas¡±, el profesional deber¨¢ avisar a Instituciones Penitenciarias para que se alerte a las Fuerzas de Seguridad y estas act¨²en. No obstante, Rivera asegura que, ¡°hasta ahora, no se ha dado ninguna situaci¨®n de este tipo y no ha sido necesario llamar a la Polic¨ªa¡±. Los terapeutas tambi¨¦n intentar¨¢n detectar posibles tendencias suicidas o de autolesi¨®n, as¨ª como un incremento en el consumo de alcohol o drogas, sobre todo en aquellos casos ¡°donde se detecte caracter¨ªsticas de personalidad psicop¨¢tica o trastorno l¨ªmite de la personalidad¡±.
El documento se?ala que los terapeutas deben explicar a los penados que ¡°en esta situaci¨®n extraordinaria¡±, el temor a enfermar o perder el trabajo, sentirse aprisionado en casa por el confinamiento, el des¨¢nimo y la inseguridad son ¡°sensaciones y emociones perfectamente normales¡±. ¡°Es importante hacerle ver que, si se siente as¨ª, las personas de su entorno pueden tener emociones similares y que, adem¨¢s, pueden temer nuevos episodios de violencia¡±, se?ala la gu¨ªa. Por ello recomienda que se les plantee que ¡°es un buen momento para demostrar que es capaz de estar en casa de manera tranquila y respetuosa [¡]. Es importante recordarle que esta dif¨ªcil situaci¨®n no puede ser nunca excusa para actuar de manera violenta y hacer da?o a nadie¡±, recalca el documento.
Si durante la entrevista telef¨®nica se detectan se?ales de alarma, el psic¨®logo recomendar¨¢ al condenado alejarse de la persona en peligro para evitar agredirla: ¡°Sal como m¨ªnimo de la habitaci¨®n y, si es necesario, al rellano o a la calle. No bebas alcohol ni tomes otras drogas. C¨¢lmate, por ejemplo, haciendo ejercicios de respiraci¨®n lenta. Tambi¨¦n puedes llamar a una amistad que te ayude a calmarte y no actuar de manera violenta¡±, propone plantear la gu¨ªa al penado.
En el caso de los condenados por alg¨²n delito leve de ¨ªndole sexual, en su mayor¨ªa por el consumo de pornograf¨ªa infantil en internet, Prisiones alerta que este tipo de delincuentes suelen recurrir ¡°en situaciones de malestar emocional¡± al consumo continuado de todo tipo de pornograf¨ªa y a la masturbaci¨®n compulsiva. Adem¨¢s, alerta que muchos de ellos formaron parte de comunidades virtuales de orientaci¨®n ped¨®fila a las que pueden intentar recurrir ahora en busca de contacto social. Tambi¨¦n contempla el riesgo de que intenten navegar en las redes sociales utilizando identidades falsas para contactar con menores y reanudar la actividad delictiva por la que fueron condenados. En caso de detectar cualquier factor de riesgo, los terapeutas propondr¨¢n a estos penados, entre otras medidas, que se pongan en contacto con amigos y familiares que puedan ayudarles. Tambi¨¦n que hagan deporte en casa ¡°como forma de ventilar emociones¡± y que si recurren a la pornograf¨ªa, que hagan ¡°un uso controlado¡± de la misma.
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