Espa?a retira su petici¨®n de ayuda a la OTAN contra el coronavirus

El pasado mi¨¦rcoles, Espa?a comunic¨® a la OTAN que retira la petici¨®n de ayuda contra el coronavirus que present¨® el 23 de marzo. Aunque no ha recibido ni la d¨¦cima parte del material sanitario que reclamaba (m¨¢s de 1,5 millones de mascarillas, medio mill¨®n de test r¨¢pidos y 500 respiradores), el Gobierno espa?ol argumenta que ha conseguido superar el momento cr¨ªtico de la pandemia y que muchas de las capacidades que requiri¨® hace un mes ya est¨¢n cubiertas.

¡°Espa?a, en este momento, no requiere ninguna ayuda adicional de los pa¨ªses de la OTAN¡±, concluye la misiva, que agradece la ¡°inestimable ayuda recibida de los aliados¡± y no descarta volver a pedirla en el futuro, dada la ¡°impredecible¡± evoluci¨®n de esta crisis sanitaria.

Espa?a fue el segundo pa¨ªs que se dirigi¨® al Centro Euro-Atl¨¢ntico de Coordinaci¨®n de Respuesta a los Desastres (EADRCC) en petici¨®n de ayuda (tras Ucrania, que no es miembro de la organizaci¨®n, pero s¨ª asociado). Se trat¨®, seg¨²n fuentes gubernamentales, de un gesto pol¨ªtico para demostrar que Espa?a llamaba a la puerta de todos los organismos internacionales. La OTAN carece de material sanitario propio, por lo que la EADRCC no es m¨¢s que un buz¨®n al que los pa¨ªses golpeados por una cat¨¢strofe env¨ªan su carta a los Reyes Magos, con la esperanza de que alguno de sus socios la conteste. Creado en 1998, este centro se hab¨ªa enfrentado hasta ahora a incendios forestales, nevadas e incluso terremotos, pero nunca a una pandemia global.

Siete pa¨ªses respondieron a la llamada de auxilio de Espa?a: Lituania, Estonia, Turqu¨ªa, Polonia, Rep¨²blica Checa, Luxemburgo y Alemania. Los tres primeros se benefician de la protecci¨®n de las tropas espa?olas (aviones de combate en las rep¨²blicas b¨¢lticas y una bater¨ªa de misiles junto a la frontera siria), por lo que, hasta cierto punto, se puede considerar solidaridad de ida y vuelta. Con Ankara, no obstante, el Gobierno espa?ol tuvo que emplearse a fondo para que, adem¨¢s de donar mascarillas, dejase salir 150 respiradores que ya hab¨ªan sido comprados por Castilla-La Mancha y Navarra.

Probablemente, las donaciones m¨¢s desinteresadas fueran las de Rep¨²blica Checa, Polonia y Luxemburgo; y la m¨¢s valiosa, la de Alemania: 50 respiradores. Dada la escasez de estos equipos, era una cifra importante, aunque seis veces menor que la donada por Berl¨ªn a Italia (300).

Angela Merkel, que ha vuelto a ejercer el liderazgo europeo en esta crisis, abri¨® las puertas de los hospitales alemanes a sus socios: 70 enfermos franceses de la covid-19 y 20 italianos fueron trasladados para recibir tratamiento intensivo. Berl¨ªn tambi¨¦n ofreci¨® acoger pacientes espa?oles, aunque no se hizo p¨²blico, pero Madrid declin¨® la oferta ya que implicaba someterlos a varias horas de viaje en avi¨®n.

Aunque el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, asegur¨® que enviar¨ªa material que no necesitase a Italia y Espa?a, solo el primer pa¨ªs ha recibido ayuda estadounidense; en concreto, camas, colchones, camillas y equipos m¨¦dicos. No se puede decir que el inquilino de la Casa Blanca no conociera la dureza con que la covid-19 ha golpeado a un aliado donde tiene desplegados miles de soldados. Tras poner al Gobierno espa?ol como ejemplo de mala gesti¨®n por haber tenido que devolver test defectuosos, Trump volvi¨® a referirse el 20 de abril a Espa?a en t¨¦rminos lapidarios: ¡°Mirad lo que ha pasado all¨ª. Es incre¨ªble, ha sido destrozada¡±.

Una vez m¨¢s, el vac¨ªo dejado por Estados Unidos ha sido aprovechado por sus competidores estrat¨¦gicos. Todas las alarmas se encendieron en la OTAN cuando, el pasado 25 de marzo, un convoy militar ruso atraves¨® la frontera de Italia rumbo a B¨¦rgamo (Lombard¨ªa). Un total de 14 vuelos militares transportaron material sanitario al norte de Italia, mientras que 50 m¨¦dicos y enfermeros cubanos montaban un hospital de campa?a.

Ante esta situaci¨®n, el Consejo Atl¨¢ntico decidi¨® el pasado d¨ªa 2 poner al propio Comandante Supremo Aliado para Europa (Saceur), el general estadounidense de cuatro estrellas Tod Walters, al frente del operativo contra el coronavirus. La decisi¨®n llega tarde para hacer frente a esta pandemia, pero puede ser ¨²til si, como se teme, el contagio repunta en oto?o.

De momento, la OTAN ha puesto a disposici¨®n de los pa¨ªses sus capacidades de planeamiento, transporte y apoyo log¨ªstico, con instrumentos como la Agencia de Adquisiciones y Sostenimiento de la OTAN (NSPA), a la que Espa?a ha recurrido para adquirir 1.200 kilos de mascarillas, equipos de protecci¨®n y term¨®metros en China.

Tras la retirada espa?ola, cinco pa¨ªses aliados y seis asociados (Ucrania, Montenegro, Italia, Albania, Macedonia, Moldavia, Bosnia-Herzegovina, Georgia, Colombia, Eslovenia y Afganist¨¢n) mantienen en vigor su petici¨®n de ayuda a la OTAN.

M¨¢s all¨¢ de la generosidad generalizada con Macedonia del Norte, el ¨²ltimo en incorporarse en plena crisis sanitaria a un club que cuenta ya con 30 socios, Turqu¨ªa, Austria y Hungr¨ªa se han volcado en los Balcanes, como si un siglo despu¨¦s a¨²n se disputaran la zona de influencia de los extintos imperios otomano y austro-h¨²ngaro. A falta de una pol¨ªtica com¨²n, la solidaridad aliada va por barrios.

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