La Audiencia Nacional condena a Interior por no proteger a una mujer que fue asesinada por su marido

Todos los indicios estaban ah¨ª: el ¡°atroz¡± relato de la v¨ªctima, un parte de las lesiones que a¨²n eran visibles en su cara, una testigo, los antecedentes del asesino, el miedo a perder a sus hijos. La madrugada que Stefany Mar¨ªa Gonz¨¢lez acudi¨® a denunciar a su esposo, el sistema le fall¨®. Sali¨® de la comandancia de la Guardia Civil con una valoraci¨®n de ¡°riesgo bajo¡±. Un mes despu¨¦s, su marido la mat¨® con un arma blanca en la casa donde hab¨ªa empezado a trabajar. Ocurri¨® en el pueblo sevillano de Olivares, el 16 de octubre de 2016. La Audiencia Nacional acaba de condenar al Ministerio de Interior porque no la protegi¨®. Interior debe indemnizar con 180.000 euros a la familia de la v¨ªctima ¡ªa los padres y a sus dos hijos, que ten¨ªan tres y cinco a?os cuando fue asesinada¡ª por no haberla protegido pese a que pidi¨® auxilio.

La mujer acudi¨® a la comandancia un mes antes de que la mataran y los agentes no apreciaron ning¨²n riesgo en su relato. No consideraron el parte de lesiones que alud¨ªa a ¡°erosiones en el cuello y regi¨®n superior cara anterior del t¨®rax¡±, entre otras. Tampoco la juez, que al d¨ªa siguiente le deneg¨® la orden de alejamiento. Los magistrados solo entran a valorar la actuaci¨®n del instituto armado, que es contra quien se dirige la causa, con un duro e inusual pronunciamiento que pone en tela de juicio su intervenci¨®n y que queda apuntalado por el voto particular del Consejo de Estado, que el tribunal hace suyo.

La Audiencia subraya el mal uso que hicieron los agentes del sistema VioGen, un cuestionario tipo test que funciona en todas las comisar¨ªas como herramienta para proteger a las v¨ªctimas y que ha sido modificado en cinco ocasiones, la ¨²ltima en 2019 para incluir el riesgo de ¡°letalidad¡± y para los hijos de las v¨ªctimas. Pero, y esto es lo importante de este fallo, no deber¨ªa ser la ¨²nica herramienta.

La sentencia considera que la actuaci¨®n de los agentes no fue m¨¢s all¨¢ de cumplir con los ¡°aspectos formales¡± y que la ¡°m¨ªnima protecci¨®n policial¡± que se asign¨® a la mujer result¨® ¡°inadecuada¡±. Y subraya que el resultado que arroja el VioGen (ese ¡°riesgo bajo¡± que sali¨® tras completar el test) se puede revisar al alza ¡°para una mejor protecci¨®n de la v¨ªctima¡± y se debi¨® hacer en ese caso, por los indicios de aquella madrugada y los que los agentes podr¨ªan haber encontrado despu¨¦s si hubieran seguido buscando. ¡°La predicci¨®n y la prevenci¨®n son la finalidad primordial del sistema de evaluaci¨®n que exige agentes especializados en su tratamiento y sensibilizaci¨®n en su seguimiento¡±, destaca la sentencia.

La Audiencia Nacional insiste en que la labor policial en materia de violencia contra la mujer no se puede limitar a ¡°la recogida de datos automatizados¡±, sino que ¡°exige una atenci¨®n preferente de asistencia y protecci¨®n de las mujeres¡±.

Tanto la v¨ªctima como su asesino, que se suicid¨® despu¨¦s en la c¨¢rcel, eran de Rep¨²blica Dominicana. All¨ª, el marido ten¨ªa antecedentes por violencia machista por haber intentado matar a su primera esposa. Tambi¨¦n constaba que Stefany Mar¨ªa Gonz¨¢lez le hab¨ªa puesto una denuncia previa por amenazarla con una navaja, que acab¨® retirando. Pero esos datos no fueron solicitados ni revisados por los agentes.

La mujer declar¨® adem¨¢s que su c¨®nyuge la hab¨ªa ¡°obligado a mantener relaciones sexuales¡±. El tribunal subraya que eso puede ser constitutivo de un delito de violaci¨®n, lo que deber¨ªa haber elevado la gravedad del caso. Y a?adi¨® que le hab¨ªa lanzado varios objetos, de los que uno impact¨® en su hijo menor, de tres a?os, que estaba presente durante la agresi¨®n.

El tribunal a?ade que la actuaci¨®n de la Guardia Civil deber¨ªa haber ido encaminada a corroborar los extremos apuntados por la denunciante, entre otros aspectos, mediante la b¨²squeda de posibles testigos. Tanto el atestado como el parte judicial dejaron constancia de la existencia de al menos uno: la madre del asesino. ¡°Es imprescindible que la autoridad policial realice un seguimiento, serio y riguroso, de las distintas circunstancias generadas en cada caso y su evoluci¨®n¡±, a?ade el contundente fallo.

No consideraron tampoco, prosigue la sentencia, que ella carec¨ªa de familiares directos en Espa?a y que ten¨ªa dos hijos peque?os ¡°a los que tem¨ªa perder ante las insistentes amenazas de su agresor de llevarse a los ni?os y no volverlos a ver nunca m¨¢s¡±. El agresor la denunci¨® a ella y aludi¨® a lesiones que no se pudieron probar, seg¨²n el tribunal. ¡°No se constataron lesiones de tipo alguno en el marido, quien sostiene no haber agredido a su mujer y ser en realidad ¨¦l quien hab¨ªa sufrido las agresiones de la v¨ªctima. Dicho parte de lesiones deber¨ªa haber bastado para poner en cuesti¨®n la credibilidad del marido y, en consecuencia, haber afianzado la de la v¨ªctima¡±. Contra la sentencia cabe recurso de casaci¨®n.

Una vida nueva y lejos para los hijos

Stefany Mar¨ªa Gonz¨¢lez ten¨ªa dos hijos, dos ni?os que quedaron hu¨¦rfanos tras la agresi¨®n. Ten¨ªan cinco y tres a?os cuando ella fue asesinada por el padre de las criaturas. Los servicios sociales decidieron mandar a ambos menores a Italia, donde viven con una prima de la asesinada y con su marido. As¨ª lo explica al tel¨¦fono Max Adam, portavoz y abogado de la familia. ¡°Ellas se quer¨ªan como hermanas, as¨ª que la Junta de Andaluc¨ªa consider¨® que era m¨¢s adecuado mandarlos all¨ª, a un entorno distinto y en otro ambiente, con una relaci¨®n m¨¢s directa y m¨¢s cari?osa¡±, explica Adam. Son una familia ¡°muy humilde¡±, con tres hijos mayores, que asumieron la custodia de los dos hu¨¦rfanos ¡°con gran esfuerzo¡±. La mujer, nacida en Rep¨²blica Dominicana, no ten¨ªa familia en Sevilla. El abogado ha comunicado ya el fallo a sus allegados: ¡°Les he dado una alegr¨ªa porque entienden que se ha hecho justicia¡±, explica el letrado, que destaca que lo mejor de la sentencia es que admite que el sistema ha fallado.