Justicias polaca y espa?ola: una comparaci¨®n imposible

Desde que el Ejecutivo de PSOE y Unidas Podemos presentara la proposici¨®n de ley para la reforma de la Ley Org¨¢nica del Poder Judicial ¨Dque permite la renovaci¨®n de los 12 jueces del CGPJ por la v¨ªa r¨¢pida, es decir, con la mayor¨ªa absoluta del Congreso dando un portazo as¨ª al consenso de tres quintos que se necesitaban hasta ahora¨D, se ha generado un...

Desde que el Ejecutivo de PSOE y Unidas Podemos presentara la proposici¨®n de ley para la reforma de la Ley Org¨¢nica del Poder Judicial ¨Dque permite la renovaci¨®n de los 12 jueces del CGPJ por la v¨ªa r¨¢pida, es decir, con la mayor¨ªa absoluta del Congreso dando un portazo as¨ª al consenso de tres quintos que se necesitaban hasta ahora¨D, se ha generado un intenso debate sobre hasta qu¨¦ punto esta propuesta se parece a las diferentes reformas judiciales emprendidas por el Gobierno polaco. Varsovia lleva a?os desbaratando su sistema judicial para legitimar las leyes con las que est¨¢ moldeando el pa¨ªs siguiendo el ejemplo de la vecina Hungr¨ªa en su deriva autoritaria. Ambos pa¨ªses se alejan cada vez m¨¢s de la UE. La justicia europea ha reprobado algunas de las reformas judiciales del Ejecutivo polaco en un intento de frenar la degradaci¨®n democr¨¢tica de la sexta econom¨ªa de la UE.

¡°Lo de Espa?a es una modificaci¨®n puntual. La divisi¨®n de poderes est¨¢ garantizada con el buen funcionamiento del Tribunal Constitucional y otros ¨®rganos judiciales. Lo de Polonia es un asalto continuo a la independencia de los jueces¡±, asegura por tel¨¦fono Adam Krzywon, profesor de derecho constitucional de la universidad de Varsovia. ¡°Creo que la reforma del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) es una mala decisi¨®n, pero no se puede comparar con el desmontaje integral que ha sufrido la justicia polaca y que ya no garantiza la divisi¨®n de poderes¡±. Las reformas que ha llevado a cabo Polonia en los ¨²ltimos a?os no solo afectan al ¨®rgano de gobierno de los jueces, sino tambi¨¦n al Tribunal Constitucional, al r¨¦gimen disciplinario de los magistrados y a su edad de jubilaci¨®n.

La propuesta del Gobierno de Pedro S¨¢nchez, que tambi¨¦n ha recibido la reprimenda de Bruselas ¨Dy que seg¨²n el Ejecutivo comunitario puede poner en peligro la independencia judicial¨D, ha sido la excusa perfecta para que el partido ultraderechista polaco Ley y Justicia (PiS), que gobierna desde 2015, meta en el mismo saco su larga lista de reformas judiciales con el nuevo cambio puntual en la justicia espa?ola. Y de paso pide a la UE que d¨¦ el mismo tratamiento a Espa?a que a Polonia.

¡°Perm¨ªtanme recordarles que el Consejo Nacional de Judicatura de Polonia [el equivalente al Consejo General del Poder Judicial espa?ol] es la principal fuente de ataques contra Polonia. [...] La Comisi¨®n Europea y Alemania crean mecanismos para forzar obediencia mientras que el actual modelo espa?ol no les molesta en absoluto¡±, escribi¨® el jueves en Twitter el secretario de Estado del Ministerio de Justicia en Varsovia, Sebastian Kalet.

El cambio que propone la nueva reforma del Gobierno de PSOE y Unidas Podemos para la renovaci¨®n de 12 de los 20 jueces del CGPJ, pendiente desde hace casi dos a?os, es que no se necesite la aprobaci¨®n de tres quintos del Congreso y del Senado. Basta con tener la mayor¨ªa absoluta en una segunda vuelta. Se acabar¨ªa as¨ª con los grandes consensos entre diferentes partidos que hasta ahora eran necesarios para nombrar a los magistrados. Es lo mismo que sucede en Polonia con su Consejo Nacional de Judicatura. En el pa¨ªs eslavo, los 15 magistrados que forman parte del ¨®rgano judicial son elegidos por mayor¨ªa absoluta en el Parlamento (Sejm) en la segunda ronda de votaci¨®n. ¡°Esta es la similitud en ambos pa¨ªses. Que con estas reformas el Parlamento finalmente domina el poder judicial¡±, explica el jurista polaco Adam Krzywon. El profesor de derecho romano de la universidad de Varsovia, Jakub Urbanik, reconoce que aplicar esta reforma supone un ¡°paso peligroso¡± para Espa?a.

El desmontaje de la justicia polaca

Antes de la llegada al poder del partido ultraconservador Ley y Justicia (PiS), eran los propios jueces polacos los que nombraban a los 15 magistrados del Consejo Nacional de Judicatura. Pero en el a?o 2017, el Gobierno del PiS, acogi¨¦ndose al principio de soberan¨ªa popular, y como parte de su plan de desmantelamiento de la independencia judicial, cambi¨® la norma para poder controlar este ¨®rgano m¨¢ximo del poder judicial. Dos a?os antes, tambi¨¦n renov¨® a cinco de los 15 miembros del Tribunal Constitucional y elev¨® a una mayor¨ªa de dos tercios el respaldo que deben tener los fallos del Constitucional. As¨ª se aseguraba poder legislar acorde a sus ideales y que sus normas no fueran declaradas inconstitucionales tan f¨¢cilmente. ¡°El Tribunal Constitucional ha quedado como un mu?eco gobernado por los pol¨ªticos¡±, critica Krywon.

En 2018, el Ejecutivo aprob¨® una ley para reducir la edad de jubilaci¨®n de los jueces del Tribunal Supremo (de 70 a 65 a?os) con el objetivo de nombrar a magistrados m¨¢s afines al Gobierno. Esta norma fue finalmente reprobada por el Tribunal de Justicia Europeo. La m¨¢xima instancia judicial de la UE tambi¨¦n suspendi¨® en abril de este a?o de manera cautelar la norma para cambiar el r¨¦gimen disciplinario de los jueces. ¡°Otra ley que ha servido como instrumento represor y sancionador para los jueces, vulnerando y cuestionando su independencia cuando las sentencias no eran favorables al Gobierno¡±, explica Jakub Urbanik.

Esta paulatina erosi¨®n de la justicia en Polonia, que ha seguido el ejemplo de la Hungr¨ªa autoritaria de Orb¨¢n, ha sentado un precedente en el seno de la UE. ¡°El Tribunal de Luxemburgo est¨¢ sentando jurisprudencia sobre la erosi¨®n del Estado de Derecho en un pa¨ªs miembro de la UE. Esto era algo impensable hace unos a?os, pero sirve de aviso a otros Estados que se atrevan a alterar la divisi¨®n de poderes¡±, zanja Adam Krzywon.

Seg¨²n explica el magistrado Joaquim Bosch, de la organizaci¨®n Jueces para la Democracia, la reforma judicial del Gobierno espa?ol ¡°dista bastante¡± de la situaci¨®n que se da en estos pa¨ªses. ¡°En Espa?a no hemos llegado a esos niveles, pero s¨ª es notorio el tir¨®n de orejas de Bruselas a la propuesta de S¨¢nchez y al anterior bloqueo del PP para la renovaci¨®n del CGPJ¡±, se?ala. El Consejo de Europa lleva a?os haciendo recomendaciones a Espa?a por su sistema judicial, que tiende a politizarse cada vez m¨¢s.

Espa?a es uno de los pocos pa¨ªses de la UE donde el nombramiento de los 12 jueces del CGPJ queda en manos de las Cortes, sin ninguna participaci¨®n directa de los jueces ¡ªaunque las asociaciones judiciales remiten a las Cortes un listado de donde salen los elegidos¡ª. En los primeros a?os de la transici¨®n, s¨ª que eran los propios magistrados los que eleg¨ªan a sus vocales en el CGPJ, pero esto cambi¨® con una ley de 1985 aprobada por el Gobierno socialista de Felipe Gonz¨¢lez con el fin de renovar a unos jueces que proced¨ªan de la dictadura franquista. ¡°Desde entonces, el sistema para el nombramiento de los magistrados se ha ido desvirtuando¡±, zanja Bosch.

El fondo de reconstrucci¨®n, ?en riesgo como dice el PP?

El Partido Popular, que ha estado durante dos a?os bloqueando la renovaci¨®n del Consejo General del Poder Judicial en Espa?a, ataca ahora al Ejecutivo de Pedro S¨¢nchez calificando de ¡°atropello legal¡± la reforma judicial del Gobierno. En cambio, en enero de este a?o, el PP vot¨® en contra de una resoluci¨®n del Parlamento Europeo para exigir a Polonia que respetara la independencia de sus jueces desmarc¨¢ndose incluso de su propio grupo, el Partido Popular Europeo.

Pero no se queda ah¨ª. El jueves, Pablo Casado aseguraba que con esta medida S¨¢nchez est¨¢ poniendo en riesgo el fondo de reconstrucci¨®n europeo para la pandemia que se debe aprobar en Bruselas. Todav¨ªa no se sabe de qu¨¦ forma la UE vincular¨¢ los fondos con el cumplimiento del Estado de Derecho.

El Consejo europeo, bajo el liderazgo de Alemania, ha rebajado dr¨¢sticamente el alcance de ese proyecto, de manera que lo que propone Berl¨ªn es suspender los pagos a pa¨ªses con casos de fraude que est¨¦n vinculados a los fondos europeos. Holanda, Dinamarca o Finlandia, junto con parte del Parlamento Europeo, quieren ir mucho m¨¢s all¨¢ y castigar a Estados como Hungr¨ªa y Polonia por su vulneraci¨®n continua al Estado de derecho. Consideran que la mejor v¨ªa es la econ¨®mica para sancionar a estos pa¨ªses, que son de los que m¨¢s ayudas reciben de Bruselas salt¨¢ndose luego a la torera las normas comunitarias. Hungr¨ªa y Varsovia rechazan de pleno esta idea. La falta de acuerdo de los Veintisiete amenaza con retrasar los fondos hasta finales de 2021. El problema es mucho m¨¢s complejo y no depende de Espa?a, como plantea el principal grupo de la oposici¨®n.