Ayuso y el nacionalismo madrile?o
La candidata del PP vuelve a su campa?a, que busca una desconocida identidad local. La izquierda cree que hay partido y est¨¢ a 50.000 votos de lograr el vuelco. La presidenta asegura que los ni?os pobres pueden estudiar en La Moraleja
En pol¨ªtica est¨¢ casi todo inventado. Pero la clave es saber elegir el momento de recuperar a alguno de los cl¨¢sicos. Silvio Berlusconi, un empresario metido a pol¨ªtico que le dio la vuelta al concepto de populismo, ya jug¨® hace 25 a?os con los elementos clave del ayusismo: la libertad ¡ªlleg¨® a bautizar a su grupo el Pueblo de la Libertad¡ª, la supuesta lucha contra el comunismo ¡ªtan inviable en la Italia de 1994 como en el Madrid de 2021¡ª y sobre todo una especie de identidad castiza, burlona, provocadora, capaz de ocupar todo el espacio medi¨¢tico alrededor de sus chanzas, entre los que las aplauden y los que se indignan. Despu¨¦s de Berlusconi muchos siguieron e incluso mejoraron esa escuela populista, y Donald Trump la llev¨® a sus m¨¢ximas cotas de poder.
Isabel D¨ªaz Ayuso intenta en estos ¨²ltimos d¨ªas que la campa?a vuelva a ese eje que gira alrededor de ella, del que se sali¨® por el choque entre Pablo Iglesias y Roc¨ªo Monasterio por las amenazas de muerte sobre el candidato de Podemos que la de Vox puso en duda. El marco ayusista de ¡°comunismo o libertad¡± qued¨® aparcado por la pugna, promovida desde la izquierda, entre ¡°la democracia y el fascismo¡± y sobre todo de la posibilidad, bastante alta si gana el bloque de derecha, de que Vox llegue al Gobierno de una de las grandes regiones europeas.
Ayuso y sus estrategas llevan varios d¨ªas intentando salir de ese eje democracia/fascismo que ha promovido la izquierda, opuesto al de libertad/comunismo que ella hab¨ªa planteado. Ambos tienen desconcertada incluso a la prensa internacional, que no entiende que el Madrid de 2021 ande en esas. ¡°La campa?a de los a?os 30 que divide a los madrile?os¡±, titulaba el mi¨¦rcoles en primera p¨¢gina el Corriere della Sera, uno de los grandes diarios italianos.
Nacionalismo madrile?o
La presidenta madrile?a, un aut¨¦ntico fen¨®meno inesperado que no se acaban de explicar ni siquiera en el PP, donde la mayor¨ªa de los barones recelan de ella y tienen un estilo completamente diferente, est¨¢ inventando una especie de nacionalismo madrile?o, algo totalmente inesperado en una comunidad donde, como ella misma se encarga de repetir, el 41% de los habitantes ni siquiera ha nacido en Madrid. Pero los datos dicen que funciona. As¨ª que ella y sus asesores insisten en buscar una especificidad madrile?a basada en cosas tan extendidas en toda Espa?a como tomar ca?as, salir a terrazas, ir al teatro hasta tarde, ir al cine, o incluso los atascos nocturnos.
Ayuso niega ese nacionalismo, claro, pero sus respuestas recuerdan mucho a los de los nacionalistas de otras comunidades, que siempre dicen que ellos solo quieren lo mejor para los suyos. Si los nacionalistas catalanes hablan de la catalanofobia, ella habla de la madrile?ofobia. Pero obviamente ella no se reconoce en esa categor¨ªa.
¡°?Est¨¢ inventando un nuevo nacionalismo madrile?o?¡±, le preguntaron este jueves en TVE. ¡°No, el nacionalismo lo que quiere es lo peor para el contrario y yo lo que quiero es lo mejor para Espa?a, que los madrile?os sean ciudadanos universales¡±. ¡°La madrile?ofobia la han estado utilizando desde muchas regiones, diciendo que somos una regi¨®n de ricos, que hacemos dumping fiscal¡±, se?al¨® poco despu¨¦s.
En esa b¨²squeda de elementos diferenciadores, tan dif¨ªcil en una comunidad que siempre se ha caracterizado por no tenerlos o al menos por no destacarlos, Ayuso va improvisando sobre la marcha y a veces le salen postulados que chocan con la realidad. Este jueves incluso lleg¨® a decir que ¡°vivir a la madrile?a te permite elegir el colegio independiente de donde vivas, permite que que el padre de la zona m¨¢s humilde, m¨¢s deprimida, pueda llevar a sus hijos a estudiar en La Moraleja¡±, la zona donde est¨¢n las mansiones de los millonarios de la capital.
No hay ning¨²n dato que haga pensar que haya familias pobres entrando en los colegios de este exclusivo distrito. De hecho un informe que public¨® el mi¨¦rcoles Save The Children y ESADE dice lo contrario, que Espa?a ¡ªy Madrid especialmente¡ª tiene un grav¨ªsimo problema con los colegios gueto en las zonas m¨¢s pobres. Pero eso da igual. ¡°Es que esto de que un informe dice... tambi¨¦n dicen cosas sobre la pobreza de Madrid que no son¡±, remat¨®.
Mientras ella trata de centrar toda la atenci¨®n, a favor o en contra, el bloque de izquierda intenta desesperadamente movilizar a sus votantes. Aunque las encuestas han sido muy negativas para este bloque en los ¨²ltimos d¨ªas, todos creen que algo gir¨® en la segunda parte de la campa?a y a¨²n es posible el vuelco. ?ngel Gabilondo cuantific¨® los mensajes que se est¨¢n lanzando desde la campa?a socialista con sus ¨²ltimos sondeos internos: ¡°Estamos a 50.000 votos del bloque de la derecha. En Madrid todo se dirime por uno o dos esca?os¡±. Dirigentes de este bloque se?alan que sus datos les sit¨²an por debajo pero por muy poco, 69 esca?os para la derecha frente a 67 de la izquierda. La mayor¨ªa de las encuestas publicadas hablan de una brecha m¨¢s grande. ¡°El viento de cola es bueno pero no sabemos si ser¨¢ suficiente de aqu¨ª al martes¡±, se?alan en el PSOE.
La gran esperanza es la movilizaci¨®n contra la presencia de Vox en el Gobierno. Para minimizar ese efecto, el partido de Santiago Abascal traslada ahora que no tiene inter¨¦s en entrar. El PP tambi¨¦n dice que preferir¨¢n condicionar desde fuera. Pero lo cierto es que Vox ha lanzado mensajes contradictorios y hay s¨ªntomas de que est¨¢ preparado para dar el asalto al poder. Ayuso, siempre provocadora, no reniega de ellos, en un discurso muy diferente al de Pablo Casado. ¡±Ahora se le hace ascos, pero tuvimos un Gobierno gracias a Vox¡±, dijo el mi¨¦rcoles. ¡°Podemos es m¨¢s extremista que Vox¡±, remat¨® este jueves. Esa es la ¨²ltima esperanza de la izquierda, el voto para frenar a la extrema derecha que ya funcion¨® en 2019.
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