Francia relaja las medidas de control sobre Josu Ternera
El exjefe de ETA se desplaza a vivir al Pa¨ªs Vasco franc¨¦s despu¨¦s de que la justicia gala le haya retirado la pulsera de control telem¨¢tico que le coloc¨® hace dos a?os
El exjefe de ETA Jos¨¦ Antonio Urrutikoetxea, alias Josu Ternera, se ha trasladado a vivir a la localidad vascofrancesa de Anglet despu¨¦s de que la justicia gala haya decidido aceptar su petici¨®n de que se le relajen las medidas de control que le impuso, en julio de 2020, al dejarle en libertad vigilada, seg¨²n ha adelantado La Raz¨®n y ha confirmado EL PA?S en fuentes jur¨ªdicas. La medida, conocida este viernes, se adopt¨® hace un mes y ha incluido tanto la retirada de la pulsera de control telem¨¢tico que se le coloc¨® como la obligaci¨®n de residir en Par¨ªs. La ¨²nica medida cautelar que se le mantiene es la de presentarse tres veces por semana en la comisar¨ªa m¨¢s cercana a su nuevo domicilio. Los tribunales espa?oles ha reclamado la extradici¨®n del exdirigente etarra por cuatro causas. Hasta ahora, la justicia gala ya ha autorizado a hacerlo por dos de ellas, pero la entrega no se producir¨¢ hasta que se resuelvan las dos causas que Urrutikoetxea tiene a¨²n abiertas en Francia y, si es condenado, cumpla las penas.
Ternera fue detenido el 16 de mayo de 2019 en el aparcamiento del hospital de la localidad de Sallanches, en los Alpes franceses, cuando acud¨ªa a una consulta m¨¦dica para tratar la patolog¨ªa que sufr¨ªa. El que fuera jefe pol¨ªtico de ETA llevaba fugado 17 a?os. Durante un a?o estuvo recluido en la prisi¨®n parisina de La Sant¨¦, hasta que en julio del a?o pasado un tribunal franc¨¦s le concedi¨® la libertad vigilada, situaci¨®n que mantiene ahora con menos medidas cautelares de control.
La ¨²ltima comparecencia p¨²blica del hist¨®rico dirigente etarra fue a mediados de junio, durante los dos d¨ªas de vista del primero de los dos juicios que tiene pendientes en Francia despu¨¦s de que solicitara la repetici¨®n de los procesos a los que fue condenado en rebeld¨ªa a sendas penas de c¨¢rcel. En ella, Urrutikoetxea asegur¨® que su ¡°gran proyecto de vida¡± era pasar el m¨¢ximo tiempo posible, ¡°de ser posible en el Pa¨ªs Vasco¡±, con sus hijos, sobre todo con la m¨¢s peque?a, de ocho a?os, que naci¨® durante su etapa en la clandestinidad y a la que, asegura, apenas conoce.
Las preguntas sobre su vida privada siempre han incomodado a Urrutikoetxea, a quien molest¨® profundamente que la prensa revelara, el a?o pasado, la direcci¨®n de su primera residencia en Par¨ªs, un c¨¦ntrico piso cedido por sus simpatizantes despu¨¦s de lograr la libertad vigilada sometido a un estricto control judicial. El mismo malestar lo expres¨® cuando tuvo que revelar, durante la apertura de su primer juicio en Francia, en junio, su nueva direcci¨®n, como parte del protocolo al comienzo de las audiencias.
Comunidad religiosa
Seg¨²n se supo entonces, se hab¨ªa trasladado a una comunidad religiosa en el centro de Par¨ªs, la Congregaci¨®n del Santo Esp¨ªritu. All¨ª, relat¨® a la juez, viv¨ªa austeramente en una ¡°celda¡± bajo ¡°reglas muy estrictas¡± que, entre otros, le obligaban a ¡°compartir las comidas¡± con los otros residentes, ¡°siempre a la misma hora al mediod¨ªa y en la tarde¡±, lo que a veces le complicaba su rutina, marcada tambi¨¦n por los horarios restringidos para salir a la calle que se le hab¨ªan impuesto en el marco de las condiciones para recuperar la libertad provisional, explic¨®.
En cualquier caso, Ternera, de 70 a?os, tendr¨¢ que volver en las pr¨®ximas semanas a Par¨ªs. La juez fij¨® para el 1 de septiembre la lectura de la sentencia por su primer juicio. Acusado de ¡°asociaci¨®n de malhechores con fines terroristas¡± ¡ªequivalente al delito de integraci¨®n en organizaci¨®n terrorista del C¨®digo Penal espa?ol¡ª por su papel en ETA entre 2011 y 2013, la Fiscal¨ªa ha solicitado cinco a?os de c¨¢rcel y su expulsi¨®n definitiva de territorio franc¨¦s.
Adem¨¢s, a mediados de septiembre debe comenzar su segundo y ¨²ltimo juicio pendiente ante la justicia gala. Ternera deber¨¢ purgar sus penas ¡ªsi es condenado a la c¨¢rcel¡ª antes de ser extraditado para que la justicia espa?ola le juzgue por el atentado con coche bomba en 1987 contra la casa cuartel de la Guardia Civil en Zaragoza, que caus¨® 11 muertos, entre ellos cinco ni?os, y por la financiaci¨®n de ETA mediante las herriko tabernas.
La Audiencia Nacional tambi¨¦n ha reclamado su entrega para juzgarlo por otras dos causas. Una, por el sumario abierto por un delito de cr¨ªmenes de lesa humanidad en el que tambi¨¦n est¨¢n encausados otros exjefes de ETA como Garikoitz Aspiazu, Txeroki; Mikel Carrera, Ata, y ?ngel Iriondo, Gurbitz. La justicia francesa rechaz¨® esta petici¨®n al estimar que ese delito no existe en el c¨®digo penal galo. La cuarta causa es por el atentado de 1980 en Vitoria que cost¨® la vida a Luis Mar¨ªa Hergueta, directivo de la empresa Michelin. La justicia gala acept¨® en primera instancia concederla, pero Ternera recurri¨® la decisi¨®n y los jueces franceses a¨²n debe pronunciarse.
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