Eusko Alkartasuna se marchita
Una lucha interna de poder y las discrepancias por su encaje en EH Bildu sumen al partido de Carlos Garaikoetxea en la mayor crisis de su historia
Carlos Garaikoetxea, uno de los grandes referentes de la pol¨ªtica vasca, est¨¢ muy apenado por la deriva que ha tomado Eusko Alkartasuna (EA), el partido que ¨¦l mismo cre¨® en 1986 tras la escisi¨®n en el PNV. Esta formaci¨®n nacionalista atraviesa la crisis m¨¢s profunda de su historia. Dos sectores libran una batalla descarnada que dura ya cinco a?os y no tiene visos de acabar amistosamente. Al contrario, el enfrentamiento se ha intensificado a las puertas de un congreso nacional, previsto los d¨ªas 19 y 20 de febrero, donde se escenificar¨¢ una divisi¨®n total que pone en peligro la continuidad del proyecto que puso en marcha su fundador. La guerra interna de poder y las discrepancias por el encaje del partido en EH Bildu han llevado a EA a una situaci¨®n l¨ªmite.
En ese congreso habr¨¢ un choque de trenes entre la corriente oficial liderada por la secretaria general, Eba Blanco, y la cr¨ªtica, encabezada por el parlamentario navarro Maiorga Ram¨ªrez, este ¨²ltimo respaldado por el exlehendakari Garaikoetxea. Tienen que dirimir sus diferencias en el peor ambiente posible, con un intercambio de acusaciones p¨²blicas, expedientes de expulsi¨®n del partido abiertos contra cuatro dirigentes cr¨ªticos y denuncias judiciales cruzadas que hacen imposible el entendimiento.
El problema de fondo, explica Garaikoetxea en declaraciones a este diario, radica en ¡°la diferente concepci¨®n de EH Bildu, que fue pensada como una coalici¨®n de partidos de diferente ideolog¨ªa y tradici¨®n democr¨¢tica. Una direcci¨®n autoritaria la viene convirtiendo en un partido ¨²nico, integrado con los caracteres de Sortu¡±. ¡°Por la incuria, la inercia o los intereses humanos, la direcci¨®n de EA ha confundido las cosas y ha ido a una integraci¨®n de facto que significa borrar la virtud principal de una coalici¨®n¡±, a?ade.
De ser un partido influyente y con amplio respaldo electoral hasta finales de los noventa, en la actualidad EA malvive en la insignificancia pol¨ªtica. Tuvo responsabilidades de gobierno en el Ejecutivo vasco ¨Dsu techo fueron los 13 parlamentarios en las auton¨®micas de 1986¨D y fue muy fuerte en Gipuzkoa, pero su proyecto pol¨ªtico fue desinfl¨¢ndose hasta quedarse con un solo representante en la C¨¢mara vasca en 2009. Su incorporaci¨®n a la coalici¨®n electoral Bildu en 2011, junto a la izquierda abertzale, Aralar y Alternatiba, le permiti¨® recuperar protagonismo pol¨ªtico, pero este result¨® ef¨ªmero. EA ha sido definitivamente devorada por las huestes de Otegi, sostienen los cr¨ªticos con la direcci¨®n de Blanco.
Iker Ruiz de Egino, portavoz nacional del partido y alineado con el sector oficial, discrepa de plano: ¡°Esos temores son infundados. La entrada en EH Bildu fue un acuerdo estrat¨¦gico y en EA siempre ha salido apoyada la l¨ªnea de seguir en EH Bildu como una federaci¨®n de partidos y no como una alianza electoral. Volver a una EH Bildu como coalici¨®n es algo superado y que pertenece al pasado¡±. En los cuadros directivos de la formaci¨®n que dirige Arnaldo Otegi no hay ning¨²n representante de EA. La izquierda abertzale (Sortu) tiene el control absoluto del mando: ¡°Es cierto que se echa en falta a gente de EA, pero tampoco tenemos por qu¨¦ estar en la primera l¨ªnea¡± de Bildu.
Se ha dado un ¡°entreguismo total¡± a EH Bildu, seg¨²n Maiorga Ram¨ªrez, una degluci¨®n progresiva que ha acabado en una ¡°sumisi¨®n absoluta¡± de EA: ¡°La ponencia pol¨ªtica aprobada en el ¨²ltimo congreso de EA (2017) con el respaldo de m¨¢s de un 80% de la afiliaci¨®n habla claramente de apostar por una EH Bildu como una coalici¨®n de partidos, con portavoc¨ªas rotatorias; no contempla la necesidad de afiliarse a EH Bildu para poder participar en sus ¨®rganos, como ocurre ahora¡±. Critica que el aparato dirigido por Blanco ¡°quiere vestir de facto lo que ha hecho a espaldas de la afiliaci¨®n¡± y reclama que ¡°se reviertan todas las irregularidades y cacicadas que ha hecho la direcci¨®n de EA¡±. Y advierte de que ¡°si EA renuncia a su perfil socialdem¨®crata y opta por disolverse en EH Bildu, estar¨¢ dejando libre todo el carril central de la pol¨ªtica vasca y supondr¨¢ el mejor favor para el PNV¡±. Ruiz de Egino niega la mayor: ¡°EA no se va a disolver en EH Bildu¡±.
Rafa Larreina, exsecretario de Organizaci¨®n, parlamentario vasco durante casi dos d¨¦cadas, exdiputado de Amaiur y uno de los cuatro dirigentes que inscribieron a EA en el registro de partidos en 1986, reconoce estar ¡°muy triste¡± por el tono ¡°melodram¨¢tico¡± que ha tomado la crisis interna: ¡°No se han hecho bien las cosas porque EA ha desaparecido de hecho dentro de EH Bildu, una coalici¨®n que apoy¨¦ mucho en su momento porque era un instrumento necesario para lograr el final de ETA¡±. Larreina no pierde la esperanza de que ¡°en el ¨²ltimo minuto se llegue a un consenso¡±.
La divisi¨®n en EA comenz¨® a hacerse visible en el congreso de 2017, del que sali¨® reelegido secretario general Pello Urizar, la persona que en 2011 hab¨ªa liderado la entrada de EA en la coalici¨®n soberanista tras los fracasos electorales que ven¨ªa cosechando su partido. Aventaj¨® en solo 14 votos a Ram¨ªrez, la voz cr¨ªtica que reclamaba una mayor autonom¨ªa, m¨¢s visibilidad y peso dentro de EH Bildu y contaba con el apoyo de Garaikoetxea y otros hist¨®ricos del partido. La dimisi¨®n de Urizar en junio de 2019 dio lugar, por primera vez, a un proceso de primarias muy convulso para nombrar a su sucesor. Ah¨ª arranc¨® el enfrentamiento que hoy mantienen Blanco y Ram¨ªrez, los dos cargos del partido con mayor rango institucional, al ser miembros de la mesa de los Parlamentos vasco y navarro, respectivamente.
Blanco present¨® cerca de 60 avales en las primarias, frente a los 400 de Ram¨ªrez, pero este fue apartado de la carrera electoral por supuestos errores en unas firmas recabadas entre los afiliados del Pa¨ªs Vasco franc¨¦s (solo hab¨ªa 19 afiliados). Este hecho desencaden¨® un proceso judicial que a¨²n sigue abierto y ha llegado hasta el Tribunal Supremo tras el recurso presentado por la direcci¨®n del partido contra la sentencia de la Audiencia Provincial de ?lava que en julio de 2021 orden¨® la repetici¨®n de las primarias. Estando abierto este litigio, la l¨ªnea oficial del partido proclam¨® a Blanco secretaria general en funciones a finales de 2019.
En el frente abierto por el control del partido, el sector de Ram¨ªrez asegura contar con el apoyo mayoritario de las organizaciones de Navarra, Gipuzkoa y ?lava, mientras que la c¨²pula es m¨¢s fuerte en Bizkaia. Esa lucha por el poder ha llevado a Ram¨ªrez y los suyos a denunciar por la v¨ªa penal a varios dirigentes del partido por los delitos de revelaci¨®n de secretos y falsedad documental por presuntamente acceder a los ficheros protegidos de afiliados del partido. El pr¨®ximo 11 de marzo, Ruiz de Egino y el secretario de Organizaci¨®n, Mariano ?lava, declarar¨¢n en el juzgado como investigados por permitir supuestamente que la directora de Organizaci¨®n de EH Bildu, Maider Karrere, entrara en 45 ocasiones a la base de datos de los afiliados camufl¨¢ndola como trabajadora de EA, pese a que hab¨ªa dejado de serlo en junio de 2017.
Karrere tambi¨¦n est¨¢ citada ese d¨ªa como investigada. Se la acusa de acceder a esos ficheros confidenciales desde mediados de 2017 a finales de 2019, cuando estaba en juego el logro de avales entre los afiliados durante la pugna por el liderazgo entre Blanco y Ram¨ªrez. La direcci¨®n del partido, por su parte, ha contratacado con la apertura de un expediente disciplinario de suspensi¨®n de militancia contra Maiorga y los coordinadores territoriales de Navarra, ?lava y Gipuzkoa (Miren Aranoa, Iratxe L¨®pez de Aberasturi y Mikel Goenaga, respectivamente) y la responsable de EA en Pamplona, Esther Korres, por haber denunciado p¨²blicamente irregularidades en las primarias de 2019. El primero se enfrenta a una sanci¨®n que le apartar¨ªa durante 12 a?os del partido y durante 17 a?os los cuatro expedientados restantes.
¡°Se est¨¢ produciendo un aut¨¦ntico ensa?amiento contra todos los que defendemos las tesis de Garaikoetxea. El aparato del partido pretende condicionar y ganar un congreso repleto de irregularidades¡±, lamenta Ram¨ªrez. Ruiz de Egino considera ¡°sorprendente¡± que el sector contrario est¨¦ ¡°tratando de condicionar la voluntad de los afiliados con falsas acusaciones de manipulaci¨®n¡± contra la direcci¨®n. Asegura que en el c¨®nclave ¡°pasar¨¢ lo que la militancia quiera y estar¨¢ garantizada la representaci¨®n de todas las organizaciones locales¡±.
El congreso se celebrar¨¢ en Vitoria, pero no se ha dado a conocer el lugar. Se celebrar¨¢ en un ¡°formato mixto¡±, tanto presencial como telem¨¢tico, asegura el portavoz de EA. Garaikoetxea desea que esa cita nacional se d¨¦ ¡°con todas las garant¨ªas democr¨¢ticas y sea fiel reflejo de la afiliaci¨®n¡±. Y avisa: ¡°Si persiste la l¨ªnea de la actual direcci¨®n, [Eba Blanco] perder¨¢ una parte sustancial de sus apoyos¡±. Eusko Alkartasuna eligi¨® una hoja de roble como distintivo. Esa hoja est¨¢ marchita y partida en dos.
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