Los ¡°reyes del hach¨ªs¡± abren la veda de los juicios a los grandes narcos del Estrecho

Isco Tej¨®n, el Casta?a, considerado por la polic¨ªa el mayor narco del Estrecho junto a su hermano Antonio, no estaba este lunes predispuesto de hablar. Ni ante la magistrada que les juzga por, supuestamente, organizar tres alijos de hach¨ªs en 2016; ni ante la prensa que le esperaba en el primer juicio contra uno de los grandes capos del hach¨ªs. ¡°No me toqu¨¦is, no voy a decir nada. Hablad con los abogados¡±, acert¨® a decir a la salida de la secci¨®n en Algeciras de la Audiencia Provincial de C¨¢diz. Se acababa de fundir en un abrazo con su hermano, antes de que este, el menor de los Tej¨®n, tuviese que volver a la prisi¨®n desde la que fue trasladado a la primera sesi¨®n de un juicio que se alargar¨¢ hasta junio.

Los hermanos Tej¨®n, conocidos entre los suyos como ¡°los reyes del hach¨ªs¡±, se enfrentan a una pena de 20 a?os de prisi¨®n y una multa de cuatro millones de euros, acusados de organizaci¨®n criminal, narcotr¨¢fico y tenencia de armas, tal y como recoge el escrito de calificaci¨®n de la Fiscal¨ªa Antidroga. Para la mayor¨ªa del resto de acusados ¡ªentre los que se encuentra un cu?ado de ambos y el hijo de Isco¡ª, la fiscal Macarena Arroyo solicita 11 a?os de privaci¨®n de libertad y la misma multa econ¨®mica. A todos se les considera integrantes de una mafia dirigida por los Casta?a que, entre marzo y agosto de 2016, organiz¨® hasta tres alijos de droga ¡ªuno no intervenido y dos, s¨ª¡ª, desmantelados por la polic¨ªa en la llamada Operaci¨®n Ronal, tan solo una muestra de las decenas de macrocausas de investigaci¨®n que han venido despu¨¦s y a¨²n contin¨²an.

Aunque muchos de los ahora encausados acabaron detenidos ese mismo a?o, los dos hermanos permanecieron huidos casi dos a?os, justo en los momentos en los que la impunidad del narcotr¨¢fico del Campo de Gibraltar alcanz¨® sus cotas m¨¢s preocupantes con persecuciones mortales, fugas a punta de pistola y alijos a plena luz del d¨ªa. Todos esos sucesos se sumaron a excentricidades, como el videoclip que el propio Isco Tej¨®n protagoniz¨® mientras estaba fugado, hasta crear un clima social de preocupaci¨®n que se extendi¨® m¨¢s all¨¢ de la provincia de C¨¢diz. Como respuesta, el Gobierno ide¨® un plan especial de seguridad que ya suma cuatro a?os de acci¨®n y que suma miles de detenidos, m¨¢s all¨¢ de la zona cero en la que el narco se hizo fuerte.

Aunque el abogado que dirige su defensa, Gonzalo Boye, ya dej¨® en claro en las v¨ªsperas que su intenci¨®n era que su cliente no declarase, lo cierto es que ni siquiera ha tenido a¨²n la opci¨®n a no contestar. Para esta primera jornada del juicio presidido por la magistrada Nieves Marina estaba prevista la declaraci¨®n de las 17 personas ¡ªincluidos los dos hermanos Tej¨®n¡ª, pero la falta de uno de los acusados ha provocado un par¨®n de m¨¢s de tres horas que ha llevado a aplazar la comparecencia de todos los investigados hasta el pr¨®ximo viernes 22 de abril. La clave estaba en cotejar si la ausencia David M.G., acusado de ser uno de los encargados de vigilar una guarder¨ªa ¡ªlugar donde se vigila la droga tras alijarla¡ª de los Casta?a, estaba realmente motivada por un problema de salud, sobrevenido en la comunidad terap¨¦utica de desintoxicaci¨®n en la que est¨¢ interno en Ja¨¦n.

La magistrada tuvo que esperar al informe forense de un m¨¦dico del hospital Reina Sof¨ªa de Ja¨¦n ¡ªque ha certificado que su afectaci¨®n precisar¨¢ un tratamiento ¡°en los pr¨®ximos meses¡±¡ª para tomar la decisi¨®n de que el juicio continuar¨¢ sin ¨¦l, tal y como ped¨ªa la fiscal antidroga Macarena Arroyo. Pese a que los letrados de los 17 acusados se han opuesto a esta opci¨®n ¡ªincluso han elevado la protesta formal ante posibles recursos¡ª, Marina ha optado por continuar, ya que lo contrario ¡°ser¨ªa suspender el juicio, pero sin fecha¡±. El debate sobre si la vista deb¨ªa aplazarse se ha convertido en el nudo central sobrevenido de la causa, m¨¢xime cuando el juicio a otro de los grandes narcos de la zona, Jes¨²s Heredia, Pantoja, ya suma hasta dos cambios de fecha, por distintas trabas burocr¨¢ticas que, en esta ocasi¨®n, la presidenta del tribunal ha conseguido sortear.

Mientras la magistrada esperaba el referido informe, los 15 acusados han aguantado la parada agrupados en corrillos en los pasillos de la Audiencia, mientras que Antonio Tej¨®n, el ¨²nico que sigue en prisi¨®n fue conducido a los calabozos. En los pasillos se han dado reveladoras estampas, como la distendida conversaci¨®n que Isco Tej¨®n ha mantenido con algunos de los tres polic¨ªas ¡ªdos nacionales y uno local¡ª que est¨¢n investigados en esta causa por, supuestamente, ¡°marcar la v¨ªa libre¡± a los narcos para cometer sus alijos, seg¨²n apunta la Fiscal¨ªa. Tras el receso forzado y despu¨¦s de constatar que la causa no se aplazar¨¢, todos ellos tendr¨¢n que declarar el pr¨®ximo viernes, aunque en la sala ya se ha avanzado la posibilidad de que muchos de ellos se acoger¨¢n a su derecho de no declarar.

M¨¢s all¨¢ de este juicio, la Operaci¨®n Ronal tambi¨¦n dio para atestiguar la potente red de blanqueo que supuestamente fueron capaces de crear los Casta?a, que se juzgar¨¢ m¨¢s adelante y que salpica a diversos familiares y testaferros. De ello dan buena cuenta los 110.000 euros que la madre de la pareja sentimental de Francisco Tej¨®n intent¨® tirar por la ventana, en uno de los registros, tal y como relata la fiscal en su escrito de calificaci¨®n. Adem¨¢s, al mayor de los Tej¨®n se le investiga por las hasta 12 empresas que aparecen vinculadas a ¨¦l, entre las que se encuentra el local de intercambio de parejas ¡ªdonde grab¨® el videoclip¡ª, dos taxis, un punto limpio, una sala de fiestas, un centro de cirug¨ªa est¨¦tica o varios negocios de hosteler¨ªa.

Durante las pr¨®ximas sesiones, una de las claves del juicio ser¨¢ intentar demostrar que tras los alijos estaban los hermanos Casta?a, considerados grandes narcos de la zona por su capacidad para alcanzar potentes acuerdos con los productores de la droga en Marruecos. Como pruebas, la Fiscal¨ªa tiene acreditados viajes de Isco a este pa¨ªs, su presencia en momentos y lugares cercanos a que se produjesen los alijos y escuchas telef¨®nicas en las que habla en clave. Pero Boye discrepa de estas pruebas ¡ªdetalladas en un procedimiento de miles de p¨¢ginas y 30 tomos¡ª y considera que se ha investigado ¡°a una persona, m¨¢s que a unos hechos¡±, seg¨²n el escrito de defensa al que tuvo acceso EL PA?S. A eso suma una estrategia ¡ªhabitual en este tipo de juicios¡ª que intentar¨¢ dinamitar pruebas claves, aduciendo la posible ¡°irregularidad¡± en la forma de la que se obtuvo.