El Tribunal Supremo mantiene a Rafael Mozo al frente del Poder Judicial
El tribunal ha rechazado suspender cautelarmente al vocal como presidente suplente, como pedían un consejero propuesto por el PP y el secretario del CGPJ
Rafael Mozo seguirá siendo el presidente suplente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). El Tribunal Supremo ha desestimado este miércoles la medida cautelar reclamada por el vocal Wenceslao Olea y el secretario general del Consejo, José Luis de Benito, que han recurrido la elección de Mozo como sustituto del dimitido Carlos Lesmes. La Sección Sexta de la Sala de lo Contencioso-Administrativo considera que no p...
Rafael Mozo seguirá siendo el presidente suplente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). El Tribunal Supremo ha desestimado este miércoles la medida cautelar reclamada por el vocal Wenceslao Olea y el secretario general del Consejo, José Luis de Benito, que han recurrido la elección de Mozo como sustituto del dimitido Carlos Lesmes. La Sección Sexta de la Sala de lo Contencioso-Administrativo considera que no procede suspender temporalmente la presidencia de Mozo y que debe seguir al frente del Consejo mientras el tribunal resuelve sobre el fondo del asunto: si su designación fue o no fue legal.
La decisión del Supremo implica que se mantenga vigente, de momento, el pacto suscrito por la mayoría de vocales del CGPJ el 13 de octubre, cuando el pleno del órgano aprobó (por 16 votos a 1) que el progresista Mozo fuera el presidente “suplente” tras la dimisión de Lesmes, en contra del criterio del gabinete jurídico del Consejo, que había se?alado que el vicepresidente en funciones del alto tribunal, Francisco Marín Castán, debía ponerse al frente del Supremo y del CGPJ. Tras conocer la resolución del alto tribunal, Olea ha presentado un escrito desistiendo de su recurso.
Wenceslao Olea es magistrado de la Sala de lo Contencioso, por lo que son sus compa?eros los que han descartado aceptar su petición. En su recurso, el magistrado sostenía que los cargos de presidente del Supremo y del CGPJ no pueden disociarse y deben ser asumidos por quien esté al frente del alto tribunal (en este caso, Marín Castán, como sustituto de Lesmes). Además, Mozo, según Olea, no cumple los requisitos para ser presidente del Consejo: ser magistrado del Supremo o un jurista de reconocido prestigio con más de 25 a?os de antigüedad. La mayoría del pleno del CGPJ, sin embargo, decidió designar a Mozo, magistrado de la Audiencia Nacional de 71 a?os, alegando que, como el órgano tiene prohibido hacer nombramientos, se debía activar el mecanismo de sustitución previsto para ausencias puntuales del presidente, que establece que lo suple el consejero de más edad.
El aval a la presidencia de Mozo despeja teóricamente el camino para que el CGPJ acelere el nombramiento de los dos magistrados del Tribunal Constitucional que le corresponde designar, ya que los conservadores pidieron la semana pasada a los progresistas que no se avanzara en esas designaciones hasta conocer la decisión del Supremo para evitar que una hipotética revocación de la presidencia pudiera poner luego en cuestión las decisiones tomadas por un pleno con Mozo al frente.
Ambos bloques se han reunido este miércoles y programaron su encuentro a última hora de la ma?ana para dar así tiempo al alto tribunal a resolver, pero el encuentro ha terminado sin avances. Los vocales propuestos por el PP han pedido a los progresistas un “cambio de metodología” en la negociación consistente en que cada bloque evalúe y valore al candidato del otro grupo. Los progresistas ya tienen un aspirante oficial, el magistrado de la Sala Tercera del Supremo José Manuel Bandrés, y están a la espera de que los conservadores comuniquen el suyo, pero a estos no les gusta Bandrés y quieren forzar un cambio de candidato, algo que rechazan los progresistas. Fuentes conservadoras se?alan que si los progresistas no aceptan su petición, los nombramientos del Constitucional pueden verse abocados al fracaso.