El juez da la semilibertad a Francisco Correa en contra del criterio de Interior

El juez de Vigilancia Penitenciaria de la Audiencia Nacional, Jos¨¦ Luis Castro, ha concedido el tercer grado o semilibertad al que fuera n¨²mero uno de la trama G¨¹rtel, el empresario Francisco Correa, seg¨²n ha adelantado Efe y ha confirmado EL PA?S. La resoluci¨®n del magistrado, a la que ha tenido acceso este diario, enmienda la decisi¨®n de Instituciones Penitenciarias, dependiente del Ministerio del Interior, que, en primera instancia, hab¨ªa decidido mantener a Correa en prisi¨®n, lo que provoc¨® el recurso del preso que ahora ha estimado el juez. Prisiones consideraba que el empresario a¨²n no deb¨ªa acceder a la semilibertad por la gravedad de los delitos cometidos ¨Dha sido condenado a 105 a?os y siete meses en siete juicios por corrupci¨®n¨D, la existencia de tres causas por las que a¨²n tiene que ser juzgado, su ¡°desestructuraci¨®n familiar¡± y el pron¨®stico de reincidencia ¡°medio alto¡± que le atribuyen los expertos penitenciarios. Sin embargo, para el juez Castro, Correa cumple ¡°todos los requisitos¡± para acceder a la semilibertad, entre ellos ¡°la existencia de oferta laboral comprobada en un medio de comunicaci¨®n¡±.

El empresario es el tercero de los principales condenados por la trama de corrupci¨®n que accede a la semilibertad, despu¨¦s de que en los ¨²ltimos seis meses la hayan alcanzado tambi¨¦n el que fuera su lugarteniente, Pablo Crespo, exsecretario de Organizaci¨®n del PP Gallego; y el extesorero de los populares Luis B¨¢rcenas. Como ocurri¨® en el caso de ambos, la decisi¨®n del juez, que puede ser recurrida, supondr¨¢ que Correa abandone la c¨¢rcel en la que est¨¢ recluido, en su caso el Centro Penitenciario de Madrid III, en la localidad de Valdemoro, para pasar a cumplir el resto de la pena en un Centro de Inserci¨®n Social (CIS, donde las cumplen presos en r¨¦gimen abierto). Previsiblemente, en el CIS Victoria Kent, situado en el centro de Madrid, el mismo en el que est¨¢n, precisamente B¨¢rcenas y Crespo. Una vez all¨ª, los profesionales penitenciarios dise?ar¨¢n un plan de ejecuci¨®n de lo que le resta de la pena que incluir¨¢n salidas diarias para ir a trabajar. Ese plan detallar¨¢ tambi¨¦n si debe acudir al establecimiento penitenciario a dormir y cu¨¢ntos d¨ªas. Lo habitual es que solo tenga que pernoctar en el centro de lunes a jueves, se?alan fuentes penitenciarias.

En su auto, el juez Castro desmonta los argumentos que Instituciones Penitenciaras esgrimi¨® para oponerse a la semilibertad de Correa. As¨ª, sobre la ¡°gravedad delictiva¡± de los hechos por los que el empresario fue condenado, recalca que este factor ¡°no puede mantenerse de forma constante, pues impedir¨ªa valorar la evoluci¨®n del penado¡±. En este sentido, destaca que, adem¨¢s, en el caso del cabecilla de la G¨¹rtel esta evoluci¨®n en la c¨¢rcel ha sido ¡°muy positiva¡±.

Respecto a los procesos pendientes ¨Dse le est¨¢ juzgando en la pieza de Francisco Camps y a¨²n debe serlo por una espec¨ªfica de blanqueo y la de las irregularidades de la trama en Arganda¨D, el juez recuerda que la Audiencia Nacional fijo en su d¨ªa un m¨¢ximo de 18 a?os de cumplimiento y que, previsiblemente, las condenas que pudiera recibir por estos casos no supondr¨ªan una aumento de esta cifra, de la que ya ha cumplido m¨¢s de la mitad. Y recalca que ello aleja la posibilidad de ¡°un posible quebrantamiento [de condena]¡± en caso de ser de nuevo condenado.

Sobre la supuesta ¡°desestructuraci¨®n familiar¡±, el magistrado se?ala que no puede ser tenida ¡°como circunstancia desfavorable para obtener el tercer grado¡± al considerarlo un elemento subjetivo. Adem¨¢s, recuerda que Correa ha venido disfrutando en los ¨²ltimos a?os de ¡°permisos [de salida de prisi¨®n] sin incidencias negativas alguna con el apoyo de su pareja y de su hijo¡±. Y a?ade que los informes psicol¨®gicos que sobre ¨¦l han elaborado en el centro penitenciario lo presentan como ¡°una persona madura, equilibrada y estable¡±.

Finalmente, sobre el ¡°pron¨®stico de reincidencia medio-alto¡± que le adjudica Instituciones Penitenciarias, el juez muestra su discrepancia y recuerda que Correa ¡°ha asumido su responsabilidad penal y civil [contribuy¨® a repatriar los 24 millones de euros que ten¨ªa en cuentas en Suiza], ha colaborado con la administraci¨®n de justicia y ha disfrutado de permisos de salida sin incidentes¡±. Y se?ala que a todo ello se a?ade ¡°la antig¨¹edad de los hechos delictivos y que dif¨ªcilmente se dar¨¢n en el futuro las circunstancias en las que se produjo la actividad delictiva por la que ha resultado condenado¡±.

Por todo ello, y a la vista de que los informes de la Junta de Tratamiento ¨Del ¨®rgano de las c¨¢rceles formado por profesionales penitenciarios que propone la clasificaci¨®n de los internos¨D recogen tanto ¡°factores positivos y negativos¡±, pero no se constatan ¡°variables cualitativas desfavorables¡±, concluye que Correa ¡°cumple todos los requisitos para ser clasificado en tercer grado¡± y, en concreto en la modalidad fijada por el art¨ªculo 83 del Reglamento Penitenciario, la m¨¢s com¨²n, ante la existencia de una oferta de trabajo.

La decisi¨®n del juez culmina un r¨¢pido cambio en la situaci¨®n penitenciaria de Correa, que en marzo de 2021 a¨²n ve¨ªa como Instituciones Penitenciarias le negaba los permisos de salida pese al haber cumplido tres a?os antes, en abril de 2018, el primer cuarto de la condena, el requisito temporal fijado por el Reglamento Penitenciario para pedir estas salidas. Entonces, el empresario escribi¨® una carta al juez Castro ¨Dque hasta ese momento hab¨ªa avalado las decisiones de Interior¨D en la que le recordaba que hab¨ªa comenzado a colaborar con la justicia y ped¨ªa perd¨®n por sus delitos. ¡°En un momento dado de mi vida tuve acceso a formas de ganar dinero il¨ªcita y f¨¢cilmente, cuando deb¨ªa abstenerme de tales pr¨¢cticas¡±, se?alaba. Y para despejar cualquier sombra de duda sobre su sinceridad, el empresario a?ad¨ªa que ¡°no se trata de un arrepentimiento formal sino de una profunda reflexi¨®n¡±. Cuatro meses despu¨¦s, el magistrado le concedi¨® el primer permiso, entonces con importantes restricciones, incluido el control telem¨¢tico.