S¨¢nchez defender¨¢ la amnist¨ªa y garantizar¨¢ la estabilidad pol¨ªtica ante la investidura m¨¢s tensa

Hace cuatro a?os, en una investidura tambi¨¦n complicada, aunque mucho menos que esta, y con movimientos de jueces decisivos en el ¨²ltimo momento (un d¨ªa antes, un viernes, 3 de enero, en pleno descanso navide?o, la Junta Electoral Central se reuni¨® de urgencia para inhabilitar a Quim Torra, entonces president), Pedro S¨¢nchez arranc¨® de manera muy significativa su discurso: ¡°Se?ora presidenta, se?or¨ªas, se?oras y se?ores diputados, buenos d¨ªas. No se va a romper Espa?a. No se va a romper la Constituci¨®n. Aqu¨ª lo que se va a romper es el bloqueo al Gobierno progresista democr¨¢ticamente elegido por los espa?oles¡±.

Casi cuatro a?os despu¨¦s, la oposici¨®n a una investidura de S¨¢nchez que llega tras la presentaci¨®n de la ley de amnist¨ªa a m¨¢s de 300 implicados en el proc¨¦s se ha recrudecido. El presidente y los diputados llegar¨¢n al pleno del Congreso protegidos por 1.600 polic¨ªas, desplegados para garantizar la seguridad en las calles que rodean el edificio ante la amenaza que suponen los llamamientos ultras a la protesta. El l¨ªder de Vox, Santiago Abascal, ha presentado una querella contra S¨¢nchez en el Tribunal Supremo para paralizar la investidura, algo pr¨¢cticamente imposible. El l¨ªder de la oposici¨®n, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, ha tratado de convencer a los corresponsales extranjeros en Espa?a de que la amnist¨ªa bloquear¨¢ las inversiones en el pa¨ªs. Y grupos de jueces han llegado a manifestarse contra la medida de gracia en la puerta de sus juzgados.

Frente a ese ambiente de tensi¨®n creciente, al que se suman las protestas diarias ante las sedes del PSOE, Pedro S¨¢nchez, que no ha hablado demasiado en estos meses de negociaci¨®n, con la excepci¨®n de su discurso rotundo de defensa de la amnist¨ªa en el comit¨¦ federal del partido, ha preparado con sus asesores un debate pol¨ªtico de fondo con varios ejes, que van desde el desarrollo de las medidas acordadas en la coalici¨®n, con una explicaci¨®n detallada del proyecto econ¨®mico progresista que se propone desplegar en los pr¨®ximos cuatro a?os, hasta un balance del cumplimiento de su programa.

Pero sobre todo, seg¨²n fuentes del Gobierno, S¨¢nchez est¨¢ preparando un discurso de respuesta a este ambiente de excepcionalidad que trata de instalar la oposici¨®n con dos ideas fuertes: una, la explicaci¨®n de los pactos y por tanto, la defensa de la amnist¨ªa, en la l¨ªnea ya apuntada en el comit¨¦ federal. Pero sobre todo, el presidente reivindicar¨¢ la normalidad democr¨¢tica que supone la investidura siguiendo estrictamente el art¨ªculo 99 de la Constituci¨®n, frente a las acusaciones de ¡°dictadura¡± de algunos sectores del PP, y ofrecer¨¢ algo completamente contradictorio con el ambiente que quiere generar la oposici¨®n: estabilidad pol¨ªtica. S¨¢nchez y su equipo est¨¢n convencidos de que la legislatura ser¨¢ larga, como lo fue la anterior.

En 2020, nadie hubiera apostado por la resistencia de una in¨¦dita coalici¨®n y de un presidente que sali¨® elegido por solo dos votos con el diputado de Teruel Existe protegido por la polic¨ªa para enfrentarse al acoso que sufr¨ªa por apoyar a S¨¢nchez. Ahora, de nuevo, hay muchas apuestas a la inestabilidad de un Gobierno que necesita cada semana casi todos los votos de los ocho grupos que lo apoyar¨¢n: PSOE, Sumar, ERC, Junts, PNV, Bildu, BNG y CC. Pero S¨¢nchez explicar¨¢ en su discurso que ¨¦l ha logrado, despu¨¦s de a?os de inestabilidad, casi terminar su legislatura anterior ¡ªadelant¨® unos meses las elecciones¡ª y lograr¨¢ hacerlo con esta, porque el acuerdo que se ha fraguado es s¨®lido e implicar¨¢ la aprobaci¨®n de Presupuestos en cuanto empiece a rodar el Gobierno. Esa idea, la de la estabilidad pol¨ªtica, es precisamente una de las que m¨¢s se valora de S¨¢nchez en el mundo econ¨®mico y pol¨ªtico internacional, como se puede comprobar f¨¢cilmente en sus viajes, especialmente al Foro de Davos (Suiza), el coraz¨®n del capitalismo internacional. Y frente a un ambiente de enorme tensi¨®n pol¨ªtica y social, S¨¢nchez quiere reivindicar esa estabilidad, que cree que se valora poco, y est¨¢ convencido de que puede estirarla cuatro a?os m¨¢s. En La Moncloa reivindican esa estabilidad y la paz social que se ha vivido estos a?os, frente a las tensiones vividas por ejemplo en Francia con la reforma de las pensiones.

Desde el punto de vista democr¨¢tico, frente a las cr¨ªticas de ¡°fraude electoral¡± del PP o ¡°Gobierno ileg¨ªtimo¡± de Vox, S¨¢nchez reivindicar¨¢ el respaldo a su investidura de 12,6 millones de votantes pertenecientes a ocho partidos. Ser¨¢ la investidura con mayor n¨²mero de votos en las urnas desde la de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero en 2004 (13,5 millones). El grupo que apoya a S¨¢nchez tiene 1,3 millones de votos m¨¢s que el bloque del PP, Vox y UPN, mientras Coalici¨®n Canaria, que apoy¨® a Feij¨®o, ahora respaldar¨¢ al l¨ªder socialista. S¨¢nchez cuidar¨¢ a sus socios y, a diferencia del presidente del PP, que en su intento frustrado a la jefatura del Gobierno lleg¨® a replicar en un mismo turno, sin hacer distinciones, al PNV y EH Bildu, y lo mismo hizo con ERC y Junts, el candidato socialista dar¨¢ un trato individualizado a cada grupo parlamentario como muestra de reconocimiento, seg¨²n fuentes del Ejecutivo. Y explicar¨¢ adem¨¢s con detalle los pactos alcanzados con cada uno de ellos como modo de comprometerse y de buscar su voto.

Pero el momento m¨¢s delicado llegar¨¢ al hablar de amnist¨ªa. Lo har¨¢ en el primer discurso, el que se usa en un debate as¨ª para explicar el proyecto pol¨ªtico, pero sobre todo tendr¨¢ que hacerlo por la tarde, cuando la oposici¨®n se lance en tromba contra ¨¦l por este asunto. S¨¢nchez tiene preparado un discurso para tratar de convencer a millones de ciudadanos que tienen muchas dudas con la medida de gracia. Ser¨¢ muy dif¨ªcil que lo logre en sectores conservadores que se han opuesto siempre incluso sin ver la ley, pero en La Moncloa conf¨ªan en que algunos sectores templados y progresistas que rechazan la idea puedan escuchar del presidente una explicaci¨®n de la utilidad pol¨ªtica de una medida as¨ª para reconstruir la convivencia en Catalu?a y cerrar la herida del proc¨¦s. Ahora, con la ley encima de la mesa, este discurso ser¨¢ m¨¢s claro. Sin embargo, S¨¢nchez no negar¨¢ que ha dado este paso para tener un Gobierno, como admiti¨® en el comit¨¦ federal, con la idea de ¡°hacer de la necesidad virtud¡±. El l¨ªder socialista sigue pendiente de los votos de sus aliados independentistas, por lo que tendr¨¢ que hacer equilibrios a la hora de explicar los acuerdos con ellos y la propia amnist¨ªa.

Pero S¨¢nchez no quiere que la medida de gracia monopolice el debate, que es lo que intentar¨¢ la oposici¨®n. Por eso, desgranar¨¢ lo que tendr¨¢ a cambio, cuatro a?os de un Gobierno progresista con la intenci¨®n de consolidar la transformaci¨®n econ¨®mica y social iniciada en la anterior legislatura. Los elementos centrales est¨¢n en el acuerdo de gobierno con Sumar, pero el candidato desarrollar¨¢ otros, aunque no est¨¢n previstos grandes anuncios. S¨¢nchez quiere un discurso completamente diferente al de Feij¨®o en su investidura fallida de septiembre, donde se dedic¨® mucho m¨¢s a atacar al presidente en funciones que a plantear sus propuestas. Habr¨¢ reproches al PP, y sobre todo intentar¨¢ colocarlo aislado con Vox, mucho m¨¢s en las r¨¦plicas, pero la idea inicial es ofrecer un proyecto pol¨ªtico completo con un papel capital para la econom¨ªa.

Apuesta econ¨®mica

Espa?a sigue siendo uno de los pa¨ªses de la UE que m¨¢s crecen y tienen la inflaci¨®n m¨¢s baja, y bate r¨¦cords de ocupaci¨®n (m¨¢s de 21 millones de trabajadores) pese a la desaceleraci¨®n global. S¨¢nchez sigue convencido de que puede ser la legislatura del ¡°pleno empleo¡± que para ¨¦l supondr¨ªa rebajar las cifras de paro al 8% (ahora es inferior al 12%). Todo ello manteniendo compromisos como la revalorizaci¨®n de las pensiones conforme al IPC o el aumento del salario m¨ªnimo hasta situarlo en el 60% del salario medio. La transformaci¨®n industrial y la apuesta decidida en energ¨ªas renovables impulsada por la adaptaci¨®n al cambio clim¨¢tico ser¨¢ otro de los ejes del discurso de S¨¢nchez, que con su ideario ecologista ha convertido al PSOE en una excepci¨®n dentro de la familia socialdem¨®crata, al no tener la competencia de un partido verde a costa de sus electores.

La ministra portavoz en funciones, Isabel Rodr¨ªguez, resalt¨® el martes que la hoja de ruta para los pr¨®ximos cuatro a?os ¡°est¨¢ ya respaldada por los cinco a?os [de S¨¢nchez] al frente del Gobierno de Espa?a¡±. La portavoz dio pistas de por d¨®nde ir¨¢ la intervenci¨®n del l¨ªder socialista: ¡°Si uno relee el discurso de investidura de hace cuatro a?os del presidente del Gobierno, lo que puede encontrar en ¨¦l es que lo que entonces dijo, sin saber que se encontrar¨ªa con una crisis como consecuencia de una pandemia o una guerra en Europa que han influido en nuestra econom¨ªa, se ha cumplido. La direcci¨®n y el rumbo que entonces marc¨® el presidente del Gobierno era la transformaci¨®n de una Espa?a hacia un modelo m¨¢s sostenible desde el punto de vista energ¨¦tico, una transformaci¨®n digital, una mejora de los derechos laborales, de los derechos sociales, la recuperaci¨®n de los recortes, y todo eso se ha visto cumplido¡±.