El PNV y EH Bildu llegan empatadas a las elecciones vascas
Urkullu mantiene en secreto la fecha de los comicios auton¨®micos de 2024, aunque otras formaciones creen que ser¨¢n en marzo


Las elecciones vascas sol¨ªan ir acompasadas hasta ahora con las gallegas. La buena conexi¨®n que siempre mantuvieron I?igo Urkullu y Alberto N¨²?ez Feij¨®o cuando coincidieron al frente de los Ejecutivos del Pa¨ªs Vasco y de Galicia permiti¨® celebrar los comicios auton¨®micos el mismo d¨ªa. Una sola llamada entre ambos mandatarios era suficiente para celebrarlas en la misma fecha. As¨ª ocurri¨® incluso hace casi cuatro a?os, en unas circunstancias excepcionales por la pandemia por la covid. El panorama ha cambiado ahora con el salto de Feij¨®o a la pol¨ªtica nacional. Urkullu guarda en secreto sus planes y se debate entre agotar la legislatura, hacer coincidir las elecciones con las europeas en junio o adelantarlas al mes de marzo.
Hace cuatro a?os, el PNV gan¨® de forma holgada las elecciones, pero esa ventaja ha ido menguando peligrosamente en las dos citas electorales celebradas este a?o. EH Bildu ha conseguido pisarle los talones en ambas citas. En las municipales de mayo pasado y en las generales, dos meses despu¨¦s, la coalici¨®n que lidera Arnaldo Otegi logr¨® acariciar la victoria (solo les separaron 1.000 votos en las legislativas). La amenaza del sorpasso est¨¢ sobre la mesa. Esta realidad obliga a Urkullu a calcular mucho el mejor escenario para que su partido no se vea sobrepasado por la izquierda abertzale. En el PNV insisten en que ¡°no hay ninguna fecha se?alada en el calendario de momento¡±, aunque son partidarios de evitar que la campa?a se vea contaminada por ¡°el ruido de Madrid¡±. En EH Bildu est¨¢n convencidos de que habr¨¢ un adelanto electoral, posiblemente al primer fin de semana de marzo. Los socialistas, socios del PNV en el Ejecutivo aut¨®nomo, no tienen ¡°informaciones fehacientes¡±, dice un representante de la direcci¨®n regional, pero sus ¡°c¨¢balas¡± les llevan a marcar tambi¨¦n en rojo el mes de marzo.
Los principales partidos vascos mantienen en ralent¨ª sus motores electorales. Urkullu no ha comunicado oficialmente si se presentar¨¢ por cuarta vez como cabeza de lista del PNV. EH Bildu no ha abierto el proceso interno para elegir a su candidato. Arnaldo Otegi, que ya cumpli¨® la condena que le inhabilitaba para presentarse, se ha limitado decir que est¨¢ dispuesto a ser el elegido. Solo los socialistas vascos y el PP tienen decidido qui¨¦nes ser¨¢ sus aspirantes. Eneko Andueza asumir¨¢ el liderazgo en el PSE-EE, mientras que Javier de Andr¨¦s representar¨¢ a los populares tras su reciente designaci¨®n como presidente del partido en Euskadi. Podemos no ha resuelto a¨²n si concurrir¨¢ con la marca Sumar que emple¨® en las generales. Y Vox, salvo sorpresa, volver¨¢ a confiar en su ¨²nica parlamentaria, Amaia Mart¨ªnez.
Todo el inter¨¦s de las auton¨®micas est¨¢ centrado en la lucha cerrada que presumiblemente mantendr¨¢n el PNV y EH Bildu por la supremac¨ªa en el Pa¨ªs Vasco. Est¨¢ por ver si el PNV confirma el desgaste sufrido tras mantenerse durante 21 a?os seguidos en Ajuria Enea y al frente de las tres diputaciones y los principales Ayuntamientos. En Bildu dicen estar preparados para ¡°salir del campo base para conquistar la cima¡±. Un triunfo electoral de los soberanistas no les asegurar¨ªa el poder. Necesitar¨ªan un aliado. En su contra juega la dificultad que hist¨®ricamente han tenido para concitar apoyos a su proyecto pol¨ªtico de ruptura unilateral con el resto de Espa?a.
Si se cumplen los pron¨®sticos, la llave de la gobernabilidad volver¨¢ a estar en manos de los socialistas. El PSE-EE, tercera fuerza en el Parlamento (partido m¨¢s votado en Euskadi en las generales de julio), conf¨ªa en jugar de nuevo un papel determinante en la pol¨ªtica vasca. El PNV y los socialistas mantienen un pacto s¨®lido en Euskadi en Ayuntamientos y diputaciones, pero la proximidad de las elecciones ha hecho aflorar los desencuentros entre ambas formaciones en asuntos como la reforma educativa vasca o la ley estatal de vivienda. Es previsible que la tirantez vaya en aumento en la fase final de este mandato, aunque los dos partidos est¨¢n obligados a entenderse tras el acuerdo para la investidura de S¨¢nchez que el PNV ha firmado a cambio de negociar, entre otros asuntos, el ¡°reconocimiento nacional de Euskadi¡± y el traspaso de las competencias pendientes en un plazo de cuatro a?os.
La pr¨®xima legislatura en Euskadi deber¨ªa abrir definitivamente el debate sobre el futuro del autogobierno vasco. La tramitaci¨®n en el Congreso de la proposici¨®n de ley de amnist¨ªa abre la puerta, seg¨²n Urkullu, a lograr conquistas nacionalistas de forma ¡°acordada¡± y celebrar un refer¨¦ndum o consulta ciudadana para conocer la voluntad mayoritaria de los vascos sobre el futuro pol¨ªtico de Euskadi. Esta es una de las principales asignaturas que sigue pendiente en el Parlamento. La ponencia de autogobierno creada para renovar el estatuto de Gernika (1979) se encuentra paralizada desde 2020, sin un acuerdo pol¨ªtico suficiente para tramitarlo en la C¨¢mara de Vitoria.
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