La confesi¨®n de un ¡®narcolegionario¡¯: ¡°Yo recog¨ª ese hach¨ªs y lo introduje en los blindados¡±

Daniel S¨¢nchez, legionario de profesi¨®n, se coloca frente a los tres magistrados del tribunal y toma aire. Tras una d¨¦cada de proceso judicial, sabe que ha llegado un momento clave. Y se prepara para confesar. ¡°Yo recog¨ª ese hach¨ªs de un garaje de Melilla y, minutos antes de embarcar, yo lo introduje en esos dos BMR [acr¨®nimo de Blindado Medio sobre Ruedas, unos tanques acorazados]¡±, admite a preguntas del fiscal. ?Y qui¨¦n le dijo que fuera a ese garaje? ¡°Un hombre que me presentaron, que est¨¢ sentado aqu¨ª¡±, contin¨²a, se?alando a Mustafa Hamed, que lo escucha a su espalda, desde el banquillo que comparte con otra decena de acusados de integrar una organizaci¨®n dedicada a introducir droga en la Pen¨ªnsula desde Melilla. ?Y qui¨¦n ten¨ªa que sacar despu¨¦s esa mercanc¨ªa del veh¨ªculo? ¡°Eso ya no lo s¨¦. Yo no ten¨ªa que sacar nada. Solo introducirlo¡±, remacha S¨¢nchez.

Estas palabras del militar han resonado este lunes en una sala de vistas de la Audiencia Nacional, donde ha comenzado el juicio contra la presunta red de narcotr¨¢fico melillense que consigui¨® corromper a varios miembros del Ej¨¦rcito y de la Guardia Civil para perpetrar sus cr¨ªmenes, seg¨²n concluy¨® el sumario. Adem¨¢s de esta narcolegionario, entre los acusados destacan otros dos militares, Francisco Javier Padiel y Samir Ahmed Al Lal, imputados por ejecutar y facilitar las operaciones de traslado de droga; y un agente del instituto armado, Alaud Din Ali, que supuestamente ¡°proporcionaba informaci¨®n reservada¡± a Mohamed Chemlal, alias Haimito, calificado por el ministerio p¨²blico como uno de los ¡°jefes¡± que ¡°organizaba¡± movimientos de esta mercanc¨ªa prohibida.

La declaraci¨®n de Daniel S¨¢nchez ha destacado por encima del resto. Ha sido el ¨²nico que ha admitido su implicaci¨®n en la trama ¡ªaunque ha minimizado su rol y se ha escudado en que atravesaba ¡°malos momentos econ¨®micos¡±¡ª. Pero una pregunta ha sobrevolado la sesi¨®n: ?ha dicho toda la verdad o todo lo que sabe? El fiscal lo pone en duda. Solo ha reconocido que, el 20 de febrero de 2014, ocult¨® unos 20 kilos de hach¨ªs (repartidos en 170 paquetes) en dos BMR del Tercio Gran Capit¨¢n 1? de La Legi¨®n, que por esas fechas deb¨ªan embarcar hacia Almer¨ªa para unas maniobras: ¡°?bamos a viajar todo el Tercio, alrededor de 500 personas, y tambi¨¦n con veh¨ªculos militares¡±. En cambio, S¨¢nchez ha insistido en que no sabe nada de otros 62 kilos de la misma droga que tres d¨ªas antes se hab¨ªan encontrado en otro veh¨ªculo blindado del cuartel. Una mercanc¨ªa que el fiscal tambi¨¦n le atribuye.

De esta forma, el ministerio p¨²blico sospecha que el papel de Daniel S¨¢nchez iba m¨¢s all¨¢ de lo que ha confesado, pero que no dejaba de ser una pieza de un engranaje m¨¢s complejo y que ¨¦l no lideraba. Seg¨²n el escrito de acusaci¨®n, ¨¦l introdujo hach¨ªs en veh¨ªculos blindados que embarcaban hacia la Pen¨ªnsula. Y, al menos en una ocasi¨®n, otro militar destinado en Almer¨ªa deb¨ªa extraer presuntamente la droga ¡ªFrancisco Javier Padiel, que se ha negado a declarar este lunes¡ª. Sin embargo, Samir Ahmed Al Lal, cabo primero del Tercio Gran Capit¨¢n 1? de la Legi¨®n, era el que ejerc¨ªa supuestamente de enlace y manten¨ªa contacto con los miembros de la banda: fue quien present¨® a Daniel S¨¢nchez y Mustafa Hamed, seg¨²n ha reconocido, aunque ha dicho que, al hacerlo, no ¡°sab¨ªa que iba a pasar lo que pas¨®¡± y se ha desvinculado de cualquier operaci¨®n de narcotr¨¢fico.

Por ello, la Fiscal¨ªa pide ocho a?os de prisi¨®n para Samir Ahmed; y siete a?os y tres meses para Daniel S¨¢nchez y Francisco Javier Padiel. Tambi¨¦n reclama cuatro a?os de c¨¢rcel para el guardia civil Alaud Din Ali, que estaba destinado en labores de seguridad del puerto de Melilla y que este lunes ha negado igualmente su implicaci¨®n en la trama: ¡°?Yo quiero que el fiscal me explique qu¨¦ informaci¨®n he pasado yo? Yo no he pasado ninguna informaci¨®n a nadie¡±, se ha defendido.

Para el resto de procesados, el fiscal solicita desde 1 hasta casi 14 a?os de c¨¢rcel. El escrito de acusaci¨®n destaca que, adem¨¢s, se intervino a la trama unos 162 kilos de hach¨ªs enviados por mensajer¨ªa a Canarias; y otros 16 kilos de hach¨ªs que iban ocultos en un turismo que el 3 de septiembre de 2013 se dispon¨ªa a embarcar en el buque Sorolla para emprender camino desde Melilla a Almer¨ªa.