Los centros de acogida de migrantes identifican a cientos de adolescentes mezclados con adultos
Tras su llegada a Canarias y una vez en la Pen¨ªnsula, cientos de posibles menores piden ser reconocidos como tal y salir de los centros de adultos. La cadena de identificaci¨®n falla desde su llegada a puerto
Cae la tarde y el fr¨ªo comienza a apretar a las puertas del acuartelamiento Primo de Rivera, en Alcal¨¢ de Henares (Madrid). Un joven gambiano aparece con su ch¨¢ndal m¨¢s nuevo. ¡°Mira, me he puesto guapo para hablar con vosotros¡±, bromea. Pide que le llamen Moussa, un nombre que no es el suyo. Est¨¢ contento porque por fin va a poder darse una vuelta y despejarse tras 24 horas seguidas entre las paredes del campamento militar, ahora reconvertido en dispositivo de acogida para inmigrantes. A pesar de que declaran tener 17 a?os, tanto Moussa como su amigo Ousmane (tambi¨¦n nombre ficticio), viven rodeados de adultos desde que desembarcaron en El Hierro el pasado 10 de octubre.
¡°Calculo que ah¨ª adentro hay alrededor de 100 menores. Uno de ellos dice que tiene 14 a?os¡±, explica Moussa. En realidad, hay 140 que declaran serlo, m¨¢s del 11% de los residentes, seg¨²n los propios datos de Accem, la organizaci¨®n que gestiona el centro. Un ejemplo de c¨®mo el sistema falla de forma recurrente a la hora de identificar menores migrantes y lo hace desde que los migrantes ponen el pie en el puerto. No es algo nuevo, el Defensor del Pueblo se?ala este problema a?o tras a?o, pero sigue sin soluci¨®n. ¡°En el muelle era todo muy ca¨®tico. Hab¨ªa mucha gente por cada polic¨ªa o cada trabajador de la Cruz Roja¡±, recuerdan Moussa y Ousmane sobre su llegada.
El repunte de llegadas a Canarias volvi¨® a coger desprevenidas a las autoridades. Hasta el 15 de diciembre hab¨ªan arribado a las islas 37.187 personas, un 140% m¨¢s que en 2022. Este in¨¦dito trasiego ha disparado el n¨²mero de menores migrantes no acompa?ados de los que debe hacerse cargo el Gobierno regional, son ya 4.391 tutelados.
Ante las miles de llegadas, el Gobierno aceler¨® las derivaciones de migrantes mayores de edad a la Pen¨ªnsula para evitar el colapso de los recursos de acogida de las islas. Pero, pasados los meses de mayor afluencia, con miles de personas ya acogidas en decenas de provincias, se han detectado centenares de casos de menores residiendo en dispositivos de adultos, gestionados por el Ministerio de Inclusi¨®n, Seguridad Social y Migraciones.
La propia fiscal superior de Canarias explic¨® a EL PA?S que solo en las islas se han detectado unos 200 casos que hab¨ªan sido considerados como mayores de edad en un primer cribado y que despu¨¦s, o bien por la documentaci¨®n que aportaron o bien por las dudas de los propios trabajadores, podr¨ªan ser menores. ¡°Todas las personas que entran en nuestros recursos han sido identificadas por Polic¨ªa Nacional como adultos o unidades familiares con menores¡±, puntualizan fuentes del Ministerio de Migraciones. ¡°En el caso de que se haya trasladado a una persona de Canarias a Pen¨ªnsula y, una vez aqu¨ª, esta persona o la propia entidad que gestiona el centro indique que es menor, se pone inmediatamente en conocimiento de la Fiscal¨ªa de Menores¡±.
Fuentes de Accem, organizaci¨®n que gestiona parte del despliegue de centros de acogida de migrantes en Espa?a, han informado a EL PA?S que han detectado unos 70 casos en el dispositivo de Cartagena, y otros 140 en el de Alcal¨¢ de Henares, en el que residen Moussa y Ousmane, los dos recursos con mayor capacidad. Pero son muchos m¨¢s, seg¨²n confirman otras ONG dedicadas a la acogida. En Zaragoza, por ejemplo, el antrop¨®logo forense del Instituto de Medicina Legal de Zaragoza, Salvador Baena, cont¨® a EL PA?S que ten¨ªa sobre la mesa las pruebas de 50 supuestos menores llegados de Canarias. ¡°Hacemos un trabajo individualizado con los que verbalizan que son menores para tratar de demostrarlo, muchas veces hay que esperar a que su familia les mande un documento acreditativo, por lo que a veces la resoluci¨®n se demora y mientras nos vemos obligados a tratarlos como a mayores de edad¡±, explican en Accem. Tanto Migraciones como la Fiscal¨ªa General del Estado aseguran desconocer el n¨²mero total de presuntos menores en esta situaci¨®n.
Periplo como mayores
Los fallos en la identificaci¨®n se dan desde que los migrantes llegan a tierra, cuando son recibidos por la Polic¨ªa y atendidos por la Cruz Roja. Al mismo tiempo que se dan situaciones en las que hombres adultos dicen ser menores, aunque sea evidente que no lo son, se dan casos en los que los menores, a pesar de su apariencia f¨ªsica, declaran ser mayores. Y as¨ª acaban todos mezclados, en comisar¨ªas y en centros de menores o de adultos, hasta que la Fiscal¨ªa ponga orden.
Muchos j¨®venes llegados en los ¨²ltimos meses se han visto dentro de esta espiral, incluso habiendo dicho la verdad. Seg¨²n han contado algunos de estos chicos a EL PA?S, ellos han asegurado desde el principio ser menores de 18 a?os, pero su palabra fue perdiendo valor en las distintas fases de un proceso marcado por el desbordamiento y la falta de garant¨ªas. Seg¨²n su testimonio, hasta los int¨¦rpretes pueden influir en su destino porque les han recomendado cambiar su declaraci¨®n y decir que son adultos, algo que excede sus funciones. Tambi¨¦n cuentan que la polic¨ªa, sencillamente, no les ha cre¨ªdo.
Moussa y Ousmane ocultaron su edad hasta que se vieron en Barcelona. ¡°Cuando llegamos est¨¢bamos agotados, asustados y mareados. Ten¨ªamos miedo sobre las consecuencias que podr¨ªa acarrear reconocerse como menores, as¨ª que dijimos que ten¨ªamos 20 por decir algo¡±, cuenta Moussa. ¡°Cuando nos llevaron a un hotel en Lloret de Mar nos hicieron una segunda entrevista y admitimos que ten¨ªamos 17. Pero no nos creyeron y nos dijeron que hasta que no mostr¨¢semos el pasaporte no hab¨ªa nada que hacer¡±.
Sus padres ya han enviado los documentos desde Gambia, pero los pasaportes podr¨ªan tardar entre uno y dos meses en llegar, aseguran. Mientras tanto, pasan sus d¨ªas en el interior del cuartel, en el que el aburrimiento, el fr¨ªo y las dificultades para descansar por el exceso de personas por metro cuadrado ¡ªa veces se producen conflictos y las reglas internas no siempre se respetan¡ª. ¡°Solo nos dejan salir un par de horas al d¨ªa. Te levantas de la cama y no hay nada que hacer, todos los d¨ªas son iguales y es un poco frustrante¡±, comenta Moussa.
Defensor del Pueblo
El caso de estos dos menores ha sido llevado al Defensor del Pueblo en una denuncia presentada el 20 de diciembre por la Red Espa?ola de Inmigraci¨®n y Ayuda al Refugiado, que sostiene, adem¨¢s, que tras comunicar su edad fueron recluidos. Los dos menores han solicitado pasar a estar tutelados por la Comunidad de Madrid, seg¨²n la denuncia. ¡°Como entidad, estamos enormemente preocupados por la protecci¨®n de las personas vulnerables y trabajamos por que se cumpla el inter¨¦s superior del menor¡±, explican fuentes de Accem. Admiten que en un primer momento se limit¨® ¡°temporalmente la salida de aquellos que verbalizaron o presentaron documentaci¨®n que les identificaba como menores de edad, con el objetivo de analizar la situaci¨®n¡±, pero que posteriormente se ha aplicado la pauta general del centro y se les ha proporcionado un m¨®vil para su mayor seguridad hasta que la Fiscal¨ªa determine su situaci¨®n. ¡°Instamos a todos los actores implicados, incluidas las comunidades aut¨®nomas, a que se involucren para dar la mejor atenci¨®n a estos j¨®venes y garantizar su inter¨¦s superior¡±.
La situaci¨®n de los menores extranjeros que llegan a Canarias es algo que preocupa especialmente al Defensor del Pueblo. ¡°Hay que mejorar la detecci¨®n de los menores de edad, se insta a que no haya menores en los centros policiales y a que estos sean trasladados a centros de acogida. Asimismo, se incide en la necesidad de que se mejore la atenci¨®n pedi¨¢trica que reciben desde el momento de su llegada, se pide rapidez a la hora de realizar las pruebas de determinaci¨®n de la edad¡±, afirman fuentes del organismo. ¡°Creemos que el hecho de que no haya actores especializados en infancia en el proceso de atenci¨®n y recepci¨®n de ni?os complica mucho la detecci¨®n y reconocimiento de la minor¨ªa de edad¡±, completa Jennifer Zuppiroli, especialista de Save the Children. ¡°Por ello, son trasladados al sistema de acogida humanitaria e, incluso, estamos viendo c¨®mo muchos de ellos son trasladados a la Pen¨ªnsula por error¡±.
Ya es de noche y es hora de que Moussa y Ousmane regresen al cuartel. Antes de despedirse, aseguran tener muchos planes para sus vidas. ¡°Estoy agradecido con Espa?a¡±, explica el primero, ¡°y me gustar¨ªa dedicarme a una profesi¨®n en la que pueda devolver el favor, como polic¨ªa, bombero o militar¡±. Cualquier cosa menos volver a Gambia. ¡°Por m¨¢s que la situaci¨®n sea dif¨ªcil aqu¨ª, no tenemos nostalgia: la vida era tan dura que volver¨ªamos a repetir el viaje una y mil veces¡±.
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