El ¡®caso Maracena¡¯ se ci?e al secuestrador y deja fuera a los dos pol¨ªticos investigados
El magistrado reconoce que no hay indicios contra la exalcaldesa y se centra en su expareja como raptor confeso de una concejala hace un a?o
El juez del caso Maracena ha emitido un auto este mi¨¦rcoles por el que el asunto se queda en lo que fue inicialmente: la detenci¨®n ilegal de Vanesa Romero, concejala socialista del de esta ciudad granadina de 22.275 habitantes, por parte de Pedro G¨®mez Rosa, entonces pareja de la alcaldesa socialista de la ciudad entonces, Berta Linares Carmona. El hecho ocurri¨® el 21 de febrero del a?o pasado y el rapto ¡ªconsiderado retenci¨®n ilegal desde el punto de vista legal?¡ª dur¨® algo m¨¢s de dos horas porque la concejala, que fue abandonada en el maletero de un coche mientras el secuestrador confeso acud¨ªa a comprar un cuchillo y otro material para presuntamente continuar su delito, pudo salir del coche y pedir ayuda. Pocas horas despu¨¦s de liberarse, la Guardia Civil detuvo a G¨®mez Rosa. La investigaci¨®n comenz¨® entonces alentando sorpresas de todo tipo, incluida la supuesta implicaci¨®n de otros miembros del equipo municipal, que, finalmente, han quedado en nada.
La primera de las sorpresas que dio el caso fue la inclusi¨®n en la investigaci¨®n ¡ªa partir exclusivamente de la declaraci¨®n del secuestrador y sin que constaran pruebas¡ª de tres pol¨ªticos. As¨ª figuraba en un auto dado a conocer tres d¨ªas antes de las elecciones municipales. Aparec¨ªan como investigados el que hab¨ªa sido alcalde socialista de Maracena durante a?os y en aquel momento ¡ªy en la actualidad¡ª n¨²mero tres del PSOE andaluz, Noel L¨®pez; la alcaldesa, que se presentaba el 28 de mayo como cabeza de lista a las elecciones municipales; y la mano derecha de esta, su concejal de Urbanismo, Antonio Garc¨ªa Leyva.
Ahora, el juez, ¡°tras la exhaustiva y minuciosa pr¨¢ctica de diligencias tendentes precisamente a verificar o descartar¡± la verosimilitud del relato del secuestrador, que habl¨® de una reuni¨®n entre los tres pol¨ªticos y ¨¦l mismo en la que presuntamente se puso en marcha el secuestro, concluye ¡°la ausencia de elemento alguno que corrobore o ampare siquiera de forma m¨ªnima la realidad de tal reuni¨®n sostenida por el coinvestigado Pedro G¨®mez¡±. Si bien el Tribunal Superior de Justicia de Andaluc¨ªa ¡ª¨®rgano jurisdiccional competente por ser diputado andaluz¡ª ya exoner¨® a Noel L¨®pez en junio, ahora el juez deja fuera de la investigaci¨®n tambi¨¦n a Berta Linares y Antonio Garc¨ªa Leyva.
De esta forma, desde este mi¨¦rcoles, explica el juez, ¡°el ¨²nico objeto de la presente acusa lo constituye el presunto delito de detenci¨®n ilegal y la presunta inducci¨®n al mismo¡±. En definitiva, el auto indica que se sigan actuaciones por el tr¨¢mite de procedimiento abreviado contra Pedro G¨®mez Rosa por un delito de detenci¨®n ilegal, dos de amenazas, un delito leve de lesiones y otro de lesiones ps¨ªquicas. Por otro lado, impide al Ayuntamiento de Maracena, gobernado ahora por el PP, personarse como acusaci¨®n particular ¡°por carecer de legitimaci¨®n¡±.
Seg¨²n el juez, Pedro G¨®mez Rosa hizo semanas antes del delito una b¨²squeda de pistolas de fogueo en Internet y acab¨® comprando una pistola simulada marca Colt, de color negro, por 36,99 euros, as¨ª como un cuchillo. Seg¨²n el juez, tambi¨¦n pint¨® ¡°con spray negro la pistola para dotarla de mayor apariencia de autenticidad.¡± Asimismo, adquiri¨® unos guantes, presuntamente para evitar dejar huellas, bridas de pl¨¢stico, papel de aluminio para envolver los m¨®viles y evitar un posible posterior rastreo, cinta carrocera y otros efectos. Con todo ello, lleg¨® a las inmediaciones del colegio Granada College, cerca de Maracena, donde se hizo el encontradizo con Vanesa Romero y comenz¨® el secuestro que acab¨® en la localidad de Armilla, donde G¨®mez Rosa hab¨ªa alquilado un local y donde dej¨® a la concejal en el maletero del coche. Seg¨²n el auto, Romero sufri¨® lesiones f¨ªsicas de poca entidad y ps¨ªquicas por las que a¨²n recibe tratamiento y est¨¢ siendo medicada.
Sobre Pedro G¨®mez Rosa, el juez indica que ¡°seg¨²n informe forense no consta que sufra trastorno psiqui¨¢trico alguno, presentando presuntamente un patr¨®n generalizado de falseamiento y exageraci¨®n de s¨ªntomas psicopatol¨®gicos y neurocognitivos¡±. G¨®mez Rosa ingres¨® en prisi¨®n tras el secuestro y fue puesto en libertad provisional el pasado 31 de julio, situaci¨®n en la que se mantiene a¨²n.
La otra sorpresa de los primeros d¨ªas fue la derivaci¨®n de la investigaci¨®n hacia una serie de expedientes que Vanesa Romero llevaba en su coche. Supuestamente, dec¨ªa, eran papeles que mostraban casos de corrupci¨®n de los tres pol¨ªticos ya exonerados, L¨®pez, Linares y Garc¨ªa Leyva. El juez abri¨® investigaci¨®n por tres asuntos concretos: la instalaci¨®n de una gasolinera en la entrada de la localidad, los permisos a la instalaci¨®n de unos talleres mec¨¢nicos y una asignaci¨®n dineraria a los grupos pol¨ªticos que la edil secuestrada Romero cre¨ªa ilegal. El juez ahora abandona tambi¨¦n esa l¨ªnea de investigaci¨®n.
El caso Maracena vuelve a ser, as¨ª, lo que aparentaba el d¨ªa que ocurri¨®: el rapto a manos de un hombre que, aparentemente, ten¨ªa problemas con su pareja y quiso reconquistarla quitando de en medio a una concejala que, presuntamente, le estaba dando problemas y malos ratos. Entre medias, sin embargo, la involucraci¨®n de los pol¨ªticos hizo que la alcaldesa dimitiera del cargo y, una vez celebradas las elecciones, no tomara posesi¨®n de su puesto en el Ayuntamiento. Adem¨¢s, aunque el PSOE gan¨® las elecciones no lo hizo con la mayor¨ªa de la que hab¨ªa disfrutado largo tiempo y, con la sombra de delito pendiendo sobre la formaci¨®n en aquel momento, ninguna otra fuerza quiso pactar con ella por lo que, finalmente, el PP encontr¨® aliados para gobernar Maracena. Veinte a?os despu¨¦s de estar en manos del PSOE, la localidad, colindante con la capital granadina, volvi¨® a tener un Ayuntamiento popular.
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