La batalla sin fin de los narcos para no ser condenados por sus mensajes desencriptados
La Audiencia Nacional y de C¨¢diz dictan sentencias que ¡°avalan¡±, como hicieron ¨®rganos judiciales de otros pa¨ªses, el uso de la informaci¨®n extra¨ªda de Encrochat, una plataforma usada por el crimen organizado e intervenida por Francia en 2020
Encrochat, un sistema de mensajer¨ªa encriptado que el crimen organizado utilizaba con absoluta impunidad, era la gran baza del mundo del narco. Pero ahora se ha convertido en una de sus peores pesadillas, a la que no logran poner fin. Desde que en 2020 Francia consiguiera infiltrar un software troyano en esa plataforma y extraer millones de comunicaciones ¡ªque las polic¨ªas de toda Europa analizan desde entonces p...
Encrochat, un sistema de mensajer¨ªa encriptado que el crimen organizado utilizaba con absoluta impunidad, era la gran baza del mundo del narco. Pero ahora se ha convertido en una de sus peores pesadillas, a la que no logran poner fin. Desde que en 2020 Francia consiguiera infiltrar un software troyano en esa plataforma y extraer millones de comunicaciones ¡ªque las polic¨ªas de toda Europa analizan desde entonces para armar sus investigaciones¡ª, los abogados de los traficantes emprendieron una batalla legal para intentar que no se pudieran esgrimir como pruebas en los procesos judiciales. Pero, tras a?os de pelea, esa ofensiva ha recibido dos reveses en las ¨²ltimas semanas: la Audiencia Nacional ha dictado su primera sentencia que ¡°avala¡± el uso de estas pruebas; y el Tribunal de Justicia de la Uni¨®n Europea (TJUE), donde las bandas depositaron buena parte de sus esperanzas, dict¨® otro fallo que tambi¨¦n les da luz verde de forma gen¨¦rica, aunque establece alg¨²n condicionante ¡ª¡°subsanable¡±, en opini¨®n de fuentes fiscales espa?olas¡ª.
Ambas resoluciones no han pasado inadvertidas. Ni entre las fuerzas de seguridad y la Fiscal¨ªa Antidroga, que muestran satisfacci¨®n ante dos fallos que les permiten seguir trabajando con unas pruebas que, en su opini¨®n, suponen el mayor hito en d¨¦cadas de la lucha contra el narcotr¨¢fico. Ni entre las defensas de los acusados: algunos de los cuales, consultados por EL PA?S, opinan que esas dos sentencias incluyen conclusiones t¨¦cnicas que podr¨¢n utilizar a su favor en instancias a¨²n por explorar ¡ªcomo el Tribunal Constitucional¡ª, y en otros casos a¨²n por resolver. Es decir, no ven que se les hayan cerrado todas las puertas.
¡°Cada caso es distinto, pero la gente tiende a extrapolar. Hay partido por delante¡±, resume Ricardo ?lvarez-Ossorio, uno de los abogados que ha impulsado procedimientos contra Encrochat, que ve grietas en el sistema de colaboraci¨®n empleado para solicitar el traslado de datos desde Francia, as¨ª como en las intervenciones por parte del pa¨ªs galo de comunicaciones de sospechosos que se encontraban en suelo espa?ol. En definitiva, ninguna parte se rinde. Todo ello, cuando el debate p¨²blico ha vuelto a fijar su atenci¨®n en la lucha contra el narco tras la tragedia de Barbate (C¨¢diz), donde dos guardias civiles murieron el 9 de febrero tras ser embestidos por una narcolancha; y tras el refuerzo policial en Marbella (M¨¢laga), uno de los epicentros del crimen organizado del pa¨ªs.
Esta historia comenz¨® en 2017, cuando se sospechaba que los narcos hab¨ªan encontrado un medio para comunicarse ajeno a todo control. Francia se fij¨® en Encrochat, que ten¨ªa sus servidores en ese pa¨ªs y que se presentaba como una plataforma que garantizaba el anonimato y la no trazabilidad de sus clientes. As¨ª que, en 2020, activ¨® una operaci¨®n, que cont¨® con aval judicial y cuyos detalles se declararon secreto militar, para intervenirlo. Seg¨²n Europol, se extrajeron 115 millones de ¡°conversaciones delictivas¡± de 60.000 usuarios diferentes.
Pero la trascendencia de este caso se multiplic¨® cuando los investigadores, a medida que analizaban la informaci¨®n interceptada, comenzaron a compartirla con otros pa¨ªses, que abrieron sus propias investigaciones. Era una fuente ingente de pruebas para armar nuevas causas. Las defensas de los narcos emprendieron la batalla contra lo que consideraron como una intervenci¨®n masiva e indiscriminada de las comunicaciones. ¡°El Estado no puede perseguir a toda costa el crimen¡±, insiste el penalista Luis de las Heras tras los fallos de la Audiencia y el TJUE.
El dictamen del TJUE se conoci¨® el 30 de abril. El mundo del narco esperaba con expectaci¨®n este fallo, pero el tribunal se limit¨® a ¡°aclarar las condiciones de transmisi¨®n y utilizaci¨®n de pruebas en asuntos penales con dimensi¨®n transfronteriza¡±. De forma gen¨¦rica, no invalida el uso de Encrochat como prueba y da margen a los jueces nacionales para utilizarlo, aunque establece una serie de limitaciones a las que habr¨¢ que dar respuesta en cada caso ¡ªcomo que la prueba no podr¨ªa ser utilizada si el afectado no puede impugnarla, sobre lo que fuentes fiscales espa?olas creen que aqu¨ª no habr¨¢ problemas¡ª. La Audiencia Nacional emiti¨® otra sentencia, conocida el pasada 22 de mayo, que ¡°avalaba¡± la utilizaci¨®n de esas comunicaciones interceptadas por Francia. En otros autos previos, este tribunal ya hab¨ªa indicado que se admit¨ªa, bas¨¢ndose en el acuerdo entre ambos pa¨ªses de ¡°reconocimiento mutuo¡± de sus legalidades.
Rosa Ana Mor¨¢n, jefa de la Fiscal¨ªa especial Antidroga de Espa?a, se muestra satisfecha tras las dos sentencias, aunque admite que a¨²n quedan aspectos t¨¦cnicos por limar. ¡°Pero han avalado su uso. Ahora, las pruebas se presentar¨¢n y analizar¨¢n en cada caso¡±, expone. Actualmente, el ministerio p¨²blico tiene abierta 46 investigaciones con datos de Encrochat. Mor¨¢n insiste en la relevancia de estas pruebas y en su gran dimensi¨®n: ¡°En Inglaterra ya hay m¨¢s de 1.000 condenados. En B¨¦lgica, m¨¢s de 400¡±.
La sentencia de la Audiencia Nacional tambi¨¦n ha sido recogida con satisfacci¨®n por las fuerzas de seguridad, aunque algunos mandos de la lucha contra el narcotr¨¢fico muestran a¨²n su ¡°cautela¡±, a la espera de nuevos fallos en el mismo sentido. ¡°Todo apunta por ahora a que las pruebas obtenidas ven a ser aceptadas por los tribunales, pero hay que esperar a que haya m¨¢s sentencias y, sobre todo, a que se pronuncie en el futuro el Supremo¡±, se?ala un responsable policial.
Polic¨ªa Nacional, Guardia Civil y Vigilancia Aduanera ¡ªque crearon hace tiempo grupos de agentes dedicados en exclusiva a analizar estas conversaciones¡ª se juegan mucho en esta batalla judicial. Buena parte de las grandes operaciones contra el narcotr¨¢fico realizadas en los ¨²ltimos a?os ¡ªno solo por el volumen de los alijos interceptados, sino tambi¨¦n por la relevancia de las estructuras criminales desmanteladas¡ª han sido posible gracias precisamente a la informaci¨®n obtenida en este tipo de plataformas: a Encrochat se suman otras como Sky y Anom, ya que los narcos saltan de unas a otras a medida que se van interviniendo. Rosa Ana Mor¨¢n precisa que, en los foros internacionales, se habla ya de la existencia de m¨¢s de 50 sistemas encriptados similares.
Es el caso de la Operaci¨®n MVRand, que desemboc¨® en la detenci¨®n de Fikri Amellah, un presunto narco que, cuando fue arrestado en 2021, se encontraba en el sal¨®n de su casa de Barcelona rodeado de cinco tel¨¦fonos m¨®viles encriptados con los que estaba coordinando supuestamente diversos operativos de entrada de droga en Espa?a. Amellah, que es considerado por las fuerzas de seguridad como uno de los principales capos del sur de Europa, est¨¢ desde hace unas semanas en libertad provisional tras pasar dos a?os en prisi¨®n preventiva y depositar una fianza de 400.000 euros.
Un debate internacional
La reciente sentencia de la Audiencia Nacional, conocida hace dos semanas, es un claro ejemplo de los esfuerzos legales que los presuntos narcos van a desplegar por anular todas las pruebas relacionadas con las plataformas desencriptadas. Una de las condenadas en ese fallo, Marianne Christine Maria Toren, esgrimi¨® durante la vista oral pronunciamientos de las justicias de Italia, Pa¨ªses Bajos, Finlandia y Serbia que, en opini¨®n de su defensa, respaldaban su petici¨®n de sacar de la causa sus conversaciones recuperadas de Encrochat. Su intento revela el amplio debate internacional que genera este tema, aunque fue rechazado.
En ese fallo, los magistrados recalcaron que la propia Audiencia Nacional ya hab¨ªa avalado la utilizaci¨®n de las pruebas obtenidas de estas plataformas en varios autos y que, incluso, existe una sentencia del 18 de enero de la Audiencia Provincial de C¨¢diz que concluye que el uso de esta informaci¨®n no supone una vulneraci¨®n de derechos. En esa l¨ªnea, recordaron otras resoluciones de tribunales de Dinamarca, Francia, Noruega, Alemania y Francia que hab¨ªan respaldado la validez de esta informaci¨®n como prueba. Por ello, la Audiencia Nacional conden¨® a Marianne Christine Maria Toren a 11 a?os de c¨¢rcel tras considerar probado que ella se escond¨ªa en Encrochat tras el alias de Mysticlub, quien hablaba sin tapujos de presuntos movimientos de dinero y alijos.