Centinela: la pulsera que detecta si te han echado droga en la bebida se estrena con ¨¦xito en San Ferm¨ªn
Un empresario navarro que fue v¨ªctima de esta pr¨¢ctica dise?a un brazalete con geolocalizaci¨®n que es capaz de hallar hasta 22 estupefacientes
Aquella noche, Abel quiso salir de fiesta por Barcelona. Alrededor de las nueve se tom¨® un cubata y pasadas las tres de la ma?ana se despert¨® en una marquesina. No sab¨ªa d¨®nde estaba, no ten¨ªa su cartera y, lo que es peor, no sab¨ªa qu¨¦ hab¨ªa pasado durante las horas previas: ¡°No s¨¦ lo que pas¨®, pero s¨ª s¨¦ que pas¨® algo porque con un cubata yo no pierdo el control de esa forma. Fue horrible. El infierno empieza ah¨ª porque no sabes qu¨¦ has hecho¡±. De esa noche han pasado 16 a?os y Abel Lafuente (Pamplona, 49 a?os), hoy gerente de Aglaya Creativos Consultor¨ªa, no ha olvidado lo sucedido. Hace dos a?os, ley¨® en la prensa un caso similar al suyo y este fue el germen del proyecto Centinela. Junto con sus socios ha creado una pulsera que detecta drogas en la bebida. Entre ellas, ketamina, GHB (¨¦xitasis l¨ªquido), burundanga o LSD. Acaban de sacar a la venta dos tipos de pulseras: una est¨¢ndar (3,70 euros) y otra premium (5 euros). La primera detecta GHB y ketamina y la segunda es capaz de hallar hasta 22 estupefacientes, adem¨¢s de disponer de un cierre con leva ajustable y un c¨®digo QR con geolocalizaci¨®n.
¡°El funcionamiento es simple, t¨² metes el dedo en la bebida y dejas caer una o dos gotas en el recuadro de la prueba. De 3 a 5 segundos despu¨¦s se ve la reacci¨®n. Lo que marca el positivo es que salga un anillo naranja muy intenso. Si sale otro color, es negativo¡±, explica Lafuente. El fin de la pulsera no es que el usuario analice cada bebida, aclara su socio comercial Juan Erro (Pamplona, 49 a?os), sino que el objeto tenga un efecto disuasorio. De ah¨ª el nombre, centinela. No precisa autorizaciones especiales ni homologaciones porque no es un f¨¢rmaco ni tampoco sirve como prueba pericial, aclaran sus inventores, es solo un dispositivo informativo: ¡°El ladr¨®n entra antes a la casa que no tiene alarma que a la que la tiene. Si una persona que va a hacer el spiking ¡ªsumisi¨®n qu¨ªmica¡ª ve que la otra lleva la pulsera, se lo va a pensar dos veces porque pueden comprobarlo. Lo que intentamos es, en una primera fase, evitar que suceda la acci¨®n y, en segunda, si te han echado algo en la bebida, que seas capaz de no quedarte solo y avisar al de seguridad, al encargado o a tus amigos¡±.
El camino hasta aqu¨ª ha sido largo: dos a?os de investigaci¨®n hasta dar con un laboratorio en el Reino Unido ¡ªDrugsLab 118¡ª con la tecnolog¨ªa necesaria para dise?ar la pulsera, detalla Lafuente. La cuesti¨®n era ¡°c¨®mo colocar el reactivo en un medio preventivo¡±, cuenta Erro. ¡°Todos los que hab¨ªa en el mercado eran medios no visibles ¡ªtarjetas, pajitas¡¡ª con los que pod¨ªas hacer la prueba, pero para entonces ya te han adulterado las bebidas¡±, se?ala. Apostar por un formato pulsera tampoco ha sido sencillo, subraya Erro, y, de hecho, ha retrasado su salida al mercado: ¡°Uno de los mayores problemas es que puede caerte algo de bebida, puede salpicarte alguna sustancia l¨ªquida en la prueba, que se active y se invalide. Ten¨ªamos que buscar un sistema para impermeabilizarla. Nos hemos tropezado con problemas porque los cobertores o ten¨ªan qu¨ªmicos o se adher¨ªan tambi¨¦n a la muestra¡±. Han logrado a?adir a la pulsera una especie de film que protege el ¨¢rea reactiva. ¡°No quiere decir que puedan meter la mano en el agua, pero si caen unas gotas, sigue funcionando¡±, a?ade Lafuente. La pulsera ha salido a la venta antes de San Ferm¨ªn, pero su aspiraci¨®n es que pueda llegar a todas partes. El dise?o est¨¢ inspirado en las fiestas pamplonesas, pero es personalizable para eventos o fiestas populares.
Una vez dise?ado el producto, se ha fabricado en centros de inclusi¨®n social en Navarra y sali¨® a la venta el pasado 24 de junio. Est¨¢ siendo un ¨¦xito. Puede comprarse en las tiendas f¨ªsicas que tiene la empresa en Pamplona o encargarse a trav¨¦s de su web. ¡°Los clientes son fundamentalmente padres y madres preocupados por la seguridad de sus hijas, y, sobre todo, mujeres. Ese perfil, el de mujeres menores de 30 a?os, es el m¨¢s afectado por el spiking, se?ala Sara Lafuente (Pamplona, 54 a?os), ¡°aunque puede pasarle a cualquiera¡±. Esta enfermera, vinculada al proyecto, asegura que s¨ª ven este tipo de casos en Urgencias y centros de salud: ¡°Hay mujeres que han venido a Urgencias diciendo que no se acuerdan de nada, que han aparecido en un lugar que no conocen. No saben si han sufrido una agresi¨®n sexual¡ A nivel psicol¨®gico, es lo que llaman una amnesia retr¨®grada. Es brutal porque no te acuerdas de nada¡±.
Pensando en quienes puedan ser v¨ªctimas de esta pr¨¢ctica en un lugar que no conocen, el dispositivo incorpora un QR con geolocalizaci¨®n, describe Lafuente: ¡°Escaneas el c¨®digo QR y te geolocaliza. Por ejemplo, a Pamplona puede venir gente de fuera, que se despierta desorientada, no sabe d¨®nde est¨¢ y no quiere llamar al 112. Se geolocaliza y puede llamar a sus amigos para que vayan a por ¨¦l. Tambi¨¦n tiene la opci¨®n de llamar directamente al 112¡å.
No se trata, insiste Erro, de ¡°generar alarma social¡±, sino que ¡°es como cuando piensas que va a haber una situaci¨®n complicada y pones m¨¢s seguridad¡±. Eso s¨ª, esperan que con esta iniciativa se pueda frenar esta pr¨¢ctica y sensibilizar a la ciudadan¨ªa. Esta es una de las misiones del proyecto: concienciar a la ciudadan¨ªa de que este problema existe. ¡°Es algo que las v¨ªctimas sufren en silencio, por verg¨¹enza o porque no saben qu¨¦ les ha pasado y no lo quieren contar¡±, expresa Lafuente. De ah¨ª, explica la enfermera, que est¨¦n trabajando en una plataforma de formaci¨®n ¡°para que la poblaci¨®n general conozca los tipos de drogas y sus efectos¡±: ¡°Es una informaci¨®n b¨¢sica, sin grandes explicaciones, tambi¨¦n para que el personal de los lugares de ocio, eventos o discotecas sepan c¨®mo actuar si alguien les dice que tiene sospechas de que le han adulterado la bebida¡±.
Para quienes sufran esta pr¨¢ctica directamente, Sara Lafuente recomienda que avisen cuanto antes al personal del local o que llamen a un centro sanitario o al 112. Es posible identificar los s¨ªntomas a tiempo: ¡°Hay unas drogas m¨¢s depresoras, otras te provocan euforia¡ Si te tomas un cubata y de repente empiezas a notar una distorsi¨®n de la realidad, no te acuerdas muy bien de d¨®nde est¨¢s o empiezas con un cuadro de n¨¢useas, avisa al personal del local, a tus amigos y, sobre todo, no te quedes sola¡±.
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