El Congreso rechaza prohibir en listas electorales a condenados por terrorismo o rebeli¨®n

Un gran alboroto se origin¨® en el Congreso en 2005 despu¨¦s de que el entonces l¨ªder de la oposici¨®n, Mariano Rajoy, acusase al presidente Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero de ¡°traicionar a los muertos¡± de ETA. Casi dos d¨¦cadas despu¨¦s, ahora que la banda terrorista ya no existe, la misma acusaci¨®n puede proferirse varias veces en el hemiciclo y para los diputados es como o¨ªr el rumor del tr¨¢fico cuando salen al centro de Madrid.

Palabras muy parecidas a aquellas de Rajoy ¡ª¡±han ustedes traicionado a las asociaciones de v¨ªctimas¡±¡ª las arroj¨® este martes contra las bancadas del Gobierno Jos¨¦ Antonio Berm¨²dez de Castro, uno de los diputados m¨¢s veteranos, rigurosos y mesurados del PP. De forma casi id¨¦ntica las repiti¨® luego Alberto Catal¨¢n, representante de Uni¨®n del Pueblo Navarro (UPN). Nadie movi¨® un m¨²sculo. Sus se?or¨ªas continuaron charlando con el vecino de esca?o o enfrascados en las pantallas de sus m¨®viles. El esc¨¢ndalo de hace 20 a?os es la rutina de hoy.

Existe en el Congreso un fen¨®meno de eterno retorno y lleva las siglas de la organizaci¨®n terrorista. La desaparecida ETA estaba ausente de la discusi¨®n desde las elecciones municipales de 2023, cuando la presencia de condenados por terrorismo en las listas de EH Bildu se convirti¨® en uno de los grandes temas de campa?a. Meses despu¨¦s, el PP anunci¨® una iniciativa para prohibir por ley que personas con esos antecedentes ¡ªy de paso, tambi¨¦n los condenados por rebeli¨®n, aun sin sentencia firme¡ª puedan ser candidatos electorales. De la propuesta nunca m¨¢s se supo. Hasta que esta semana sali¨® del caj¨®n. Justo en el momento en que los populares digieren el mal trago de haber respaldado ¡ªdicen que por error¡ª la adaptaci¨®n de la ley europea que puede acortar la estancia en prisi¨®n de dirigentes etarras.

Para no repetir el criticado espect¨¢culo de la pasada semana, con el portavoz parlamentario, Miguel Tellado, y la secretaria del grupo, Macarena Montesinos, agitando entre risas fotos de los socialistas asesinados por ETA, los populares recurrieron esta vez a una de sus voces menos estridentes. Lo que no quiere decir que Berm¨²dez de Castro, vicepresidente segundo del Congreso, pusiese pa?os calientes. Sostuvo que aunque ETA se haya disuelto, quedan cr¨ªmenes sin resolver, adem¨¢s de que el Gobierno pacta con quienes ¡°la apoyaron y jalearon¡± y promueve iniciativas que ¡ªah¨ª lleg¨® la acusaci¨®n¡ª ¡°traicionan a las asociaciones de v¨ªctimas¡±. Berm¨²dez de Castro explic¨® que la propuesta exige que quienes arrastren ese tipo de condenas muestren p¨²blico arrepentimiento, ¡°el m¨ªnimo recorrido moral¡±, dijo, ¡°que se le debe exigir¡±. Y acab¨® poniendo en pie a todo su grupo: ¡°Por la democracia y la libertad no lucharon los que mataron, lucharon los que murieron¡±.

EH Bildu no rehuy¨® el choque. Subi¨® a la tribuna a su portavoz, Mertxe Aizpurua, para acusar al PP de promover ¡°leyes propias de una dictadura¡±. ¡°Se reservan el derecho de decidir qui¨¦n se puede presentar o no a unas elecciones¡±, contraatac¨®. ¡°La democracia ni la aceptan, ni la respetan, ni la comparten¡±. Las protestas arreciaron en la bancada popular. La presidenta, Francina Armengol, les pidi¨® silencio, y alguien le respondi¨® gritando entre risas: ¡°?S¨ª, cari?o!¡±. ¡°Un poco de decoro, un poco de educaci¨®n¡±, rog¨® la presidenta.

La iniciativa tropez¨® con el rechazo frontal del bloque que invisti¨® a S¨¢nchez. Los m¨¢s beligerantes fueron los dos grupos catalanes, aludidos por la inclusi¨®n en los motivos de inelegibilidad a los condenados por rebeli¨®n. ¡°Es una ley propia de la Venezuela chavista¡±, clam¨® Josep Pag¨¨s, de Junts, quien ironiz¨®: ¡°?Por qu¨¦ no obligan a besar la rojigualda y a gritar ¡®?viva Espa?a!¡¯?¡±. Francesc-Marc ?lvaro, de ERC, denunci¨®: ¡°Ustedes funcionan como si ETA existiese todav¨ªa. Los historiadores del futuro flipar¨¢n¡±. ?lvaro soliviant¨® a los populares al leer unas c¨¦lebres declaraciones en 2013 del actual portavoz de su direcci¨®n, Borja S¨¦mper, en las que se?alaba: ¡°El futuro de Euskadi se tiene que construir tambi¨¦n con Bildu¡±.

S¨¦mper pidi¨® la palabra por alusiones, adujo que el problema es que Aizpurua sigue creyendo que los asesinatos de ETA ¡°tuvieron una raz¨®n de ser¡± y pareci¨® corregir sus palabras de hace 13 a?os. EH Bildu ¡°no es una fuerza homologable¡±, sentenci¨® ahora, y pactar con ellos supone una ¡°inmoralidad¡±.

El debate tom¨® una nueva derivada. Los ataques al PP pasaron a provenir del flanco derecho. Jos¨¦ Mar¨ªa S¨¢nchez, de Vox, carg¨® contra S¨¦mper y, como este no atend¨ªa a sus palabras, le afe¨®: ¡°Estoy hablando de usted, no de su abuela¡±. S¨¢nchez dedic¨® casi toda su intervenci¨®n a fustigar al PP. Subray¨® que en su iniciativa los populares consignan que desde 2011 se han presentado a las elecciones decenas de condenados por terrorismo, a lo que apostill¨®: ¡°?Han necesitado 13 a?os para traer esta propuesta?¡±. S¨¢nchez ech¨® en falta que el PP no proponga la ilegalizaci¨®n de los partidos indepedentistas catalanes por sus actuaciones en el proc¨¦s. El diputado de Vox volver¨ªa sobre el tema, dos horas despu¨¦s, cuando le toc¨® intervenir sobre otro asunto y aprovech¨® para recordar algo que se le hab¨ªa quedado en el tintero. Y no era cualquier cosa: sugiri¨® que PSOE, Sumar y Podemos tambi¨¦n pod¨ªan ser ilegalizados por pactar con quienes ¡°cometen delitos¡±.

El debate se cerr¨® con la diputada socialista por Gipuzkoa Rafaela Romero con la voz entrecortada por la emoci¨®n, recitando los nombres de sus compa?eros asesinados por ETA y conminando al PP: ¡°?Dejen de ense?ar las fotos de nuestros muertos!¡± Pero el choque entre las bancadas de la derecha ya no se cerr¨®. En el posterior debate sobre inmigraci¨®n, el diputado de Vox Ignacio Hoces volvi¨® a cargar contra S¨¦mper. En defensa de este sali¨® su compa?ero Agust¨ªn Conde con una especie de concurso de m¨¦ritos: ¡°El se?or S¨¦mper era concejal de Irun cuando ETA mataba. ?Usted con qui¨¦n ha empatado en la lucha contra ETA?¡±.

Vox tambi¨¦n aprovech¨® el pleno y otro de los asuntos candentes, la inmigraci¨®n, para desempolvar una propuesta, ya rechazada hace dos a?os. La iniciativa pretend¨ªa negar la nacionalidad a las personas de origen extranjero con antecedentes penales y retir¨¢rsela a las que ya la tienen y cometan delitos o incluso sean castigados con una sanci¨®n administrativa. Esto ¨²ltimo fue uno de los aspectos m¨¢s criticado por el popular Conde, quien aleccion¨® a sus todav¨ªa socios municipales: ¡°Estamos de acuerdo con ustedes en que Espa?a no puede abrir sus puertas indiscriminadamente. Pero discrepamos en que a los que vienen legalmente ustedes los miran con desconfianza y nosotros como seres humanos dignos¡±. As¨ª y todo, el PP tuvo el detalle de evitar el voto negativo. Y simplemente se abstuvo.