El giro social del PP se queda en un suspiro
La corrupci¨®n y la denuncia del ¡°sanchismo¡± alimentan toda la estrategia parlamentaria de Feij¨®o
Alberto N¨²?ez Feij¨®o ha desterrado aquello de ¡°derogar el sanchismo¡±que emple¨® como uno de sus grandes lemas de la fracasada campa?a a las elecciones generales de 2023. Que esa malograda divisa se haya evaporado de su vocabulario no quiere decir que, 15 meses despu¨¦s, el contenido del discurso del l¨ªder popular se separe mucho de lo que pretend¨ªa connotar entonces. A finales de septiembre, Feij¨®o anunci¨® un ¡°giro social¡± y un af¨¢n m¨¢s propositivo, con iniciativas para favorecer la conciliaci¨®n familiar y laboral o sobre pol¨ªtica de vivienda. El movimiento ha durado el tiempo de un suspiro. Todo el esfuerzo parlamentario de los populares vuelve a estar centrado en la denuncia de la corrupci¨®n y el ¡°deterioro institucional¡± de lo que llaman ¡°sanchismo¡±. Y m¨¢s con las novedades sobre el caso Koldo y el esc¨¢ndalo por la conducta sexual del dimitido portavoz de Sumar, ??igo Errej¨®n.
¡°?Qu¨¦ instituci¨®n asaltar¨¢ ma?ana el Gobierno?¡±; ¡°?cu¨¢nto tiempo van a seguir amparando la corrupci¨®n?¡±: ¡°?le queda alguna l¨ªnea roja por traspasar?¡±; ¡°?c¨®mo cree usted que van a pasar a la historia este Gobierno y sus ministros?¡±. Este es el tenor de la mayor¨ªa de las preguntas que el PP, con su secretaria general, Cuca Gamarra, y su portavoz parlamentario, Miguel Tellado, a la cabeza, dirigir¨¢ este mi¨¦rcoles al Ejecutivo en la sesi¨®n de control del Congreso.
Por segunda semana consecutiva, no intervendr¨¢ Feij¨®o al estar ausente Pedro S¨¢nchez, que en la cita anterior acudi¨® a Portugal a una cumbre ib¨¦rica y en esta se encuentra de viaje oficial en India. La semana pasada, aun sin su l¨ªder, el PP convirti¨® el pleno en un monogr¨¢fico dedicado enteramente a la denuncia de la corrupci¨®n. Los socialistas se agarraron a la estrategia de que la mejor defensa es un buen ataque y replicaron con la larga retah¨ªla de casos del PP en los ¨²ltimos a?os y el fraude fiscal de la pareja de la presidenta madrile?a, Isabel D¨ªaz Ayuso. Las peores acusaciones volaron durante tres horas sobre el hemiciclo. Y todo indica que esta semana el cuadro no variar¨¢ mucho.
De las 10 preguntas que formular¨¢ el PP al Ejecutivo, solo tres se ocupan de temas sociales. Una sobre vivienda, otra sobre pesca y una tercera que no resulta aventurado prever que derivar¨¢, como las siete restantes, hacia el terreno de lo escandaloso: su destinataria es la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda D¨ªaz, en pleno caso Errej¨®n. La pregunta inicial del diputado Juan Bravo no ten¨ªa ninguna relaci¨®n con el asunto, aunque su enunciado ya estaba revestido de sarcasmo: ¡°?Considera el mon¨®logo social una forma ¨®ptima de llegar a acuerdos?¡±. D¨ªaz tendr¨¢ raci¨®n doble, al medirse tambi¨¦n a uno de los m¨¢s afilados estiletes de la bancada popular, Ester Mu?oz, que, antes de que estallara el esc¨¢ndalo del dimitido portavoz de Sumar, se?alaba en su pregunta a la vicepresidenta por ¡°amparar la corrupci¨®n¡±. Los populares intentaron colocar otra pregunta a la vicepresidenta espec¨ªficamente sobre Errej¨®n, pero la Mesa no se lo permiti¨®. En la parte socialista del Ejecutivo, el ministro de Transformaci¨®n Digital, ?scar L¨®pez, se enfrentar¨¢ a otra pregunta-acusaci¨®n del diputado Jaime de los Santos: ¡°?Ha sido usted ministro para aforarle ante el Tribunal Supremo?¡±.
Fuera de la sesi¨®n de control, el primer partido de la oposici¨®n transit¨® el mismo camino, sin rastro del anunciado giro social, ya desde el inicio del pleno, este martes. El PP intent¨® sin ¨¦xito que el Congreso pidiese la dimisi¨®n del fiscal general del Estado, ?lvaro Garc¨ªa Ortiz, tras la investigaci¨®n que le ha abierto el Tribunal Supremo por supuestamente revelar secretos del novio de Ayuso. Y lanz¨® otras dos iniciativas para intentar acorralar con la corrupci¨®n y las relaciones con la justicia al ministro F¨¦lix Bola?os.
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