El jugoso negocio de la droga acecha los puertos
La Fiscal¨ªa Antidroga pide m¨¢s esfuerzos para blindar los recintos portuarios ante el tr¨¢fico de drogas, un objetivo que tambi¨¦n se ha marcado la Comisi¨®n Europea para contener al crimen organizado
El asesinato de un tiro en la cabeza de un hist¨®rico estibador del puerto de Barcelona; un jefe policial antiblanqueo con 20 millones de euros en billetes escondidos en las paredes de su casa; un alijo r¨¦cord de 13.000 kilos de coca¨ªna en Algeciras (C¨¢diz). Las noticias m¨¢s impactantes de las ¨²ltimas semanas vinculadas al narcotr¨¢fico comparten un rasgo com¨²n: la corrupci¨®n para introducir droga en Espa?a a trav¨¦s de los puertos. La inusitada entrada de coca¨ªna en los ¨²ltimos a?os, con un mercado saturado de droga y un ritmo de incautaciones que no para de crecer, y el hecho de que el 70% de las aprehensiones se efect¨²e en contenedores mar¨ªtimos, ha situado a los puertos en el punto de mira. Las administraciones europeas han reforzado la vigilancia sobre ese ecosistema aparentemente impenetrable y desconocido, muy atractivo para el negocio del narco.
La Fiscal¨ªa espa?ola reclama, en su ¨²ltima memoria, un mayor control en estas instalaciones, y alerta especialmente sobre los grandes puertos, como Valencia, Barcelona, Algeciras o Vigo, utilizados para la entrada de droga. ¡°Se van haciendo mejoras, m¨¢s controles, m¨¢s medidas de seguridad, m¨¢s c¨¢maras, pero creo que falta mucho¡±, explica la fiscal jefa Antidroga, Rosa Ana Mor¨¢n. No se trata solo de cortar el narcotr¨¢fico como un problema de salud p¨²blica, sino de impedir que el crimen organizado se haga fuerte, mediante la intimidaci¨®n o la corrupci¨®n, en unas infraestructuras cr¨ªticas del Estado.
¡°La UE nos est¨¢ poniendo la realidad en la cara. Tenemos que abordarlo como un fen¨®meno integral donde la justicia tiene mucho que decir¡±, a?ade Mor¨¢n. ¡°Ha sido B¨¦lgica y Holanda los que est¨¢n llamando la atenci¨®n, y ya est¨¢ Francia tambi¨¦n alerta¡±. En estos pa¨ªses, las mafias han comenzado a poner en aprietos al Estado. ¡°Hace falta recuperar una mesa en la que nos veamos todos. Cuando hay una racha de tantas muertes de mujeres, se re¨²ne la mesa de violencia de g¨¦nero. Y sin embargo pasa lo de Barbate [el asesinato de dos guardias civiles el pasado febrero embestidos por una narcolancha] y no hay un sitio donde sentarnos todos¡±, a?ade. La lucha contra el narcotr¨¢fico engloba a varios ministerios: el Plan Nacional sobre Drogas est¨¢ en Sanidad; Vigilancia Aduanera, que colabora estrechamente con Fiscal¨ªa, en el ministerio de Hacienda; Polic¨ªa Nacional y Guardia Civil, en Interior, y la Fiscal¨ªa, en Justicia.
¡°Las incautaciones no solo han crecido en Espa?a. Tambi¨¦n en Amberes, Rotterdam, ?msterdam o Hamburgo. El a?o pasado estaban triplicando la cantidad¡±, explica el teniente general de la Guardia Civil, Manuel Navarrete, director del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen organizado (CITCO) hasta el pasado 16 de octubre. ¡°Se ha visto que esto supone posibilidades de corrupci¨®n grandes dentro de las personas que trabajan en los puertos y que las concesiones quiz¨¢s no se han hecho teniendo en cuenta con el elemento de seguridad¡±. La delegaci¨®n espa?ola, seg¨²n el mando de la Guardia Civil, ha puesto en evidencia en Europa que los puertos son un tema esencial. ¡°Hay que hacer una inversi¨®n espec¨ªfica y repensar la relaci¨®n que tenemos con los operadores portuarios, muchos de ellos en manos extranjeras (¡) Y evitar que sea un foco de contagio del crimen organizado¡±.
Valencia, Barcelona, Algeciras son los puertos que m¨¢s incautaciones registran, tambi¨¦n porque son los que m¨¢s contenedores reciben, explica Francisco de Andr¨¦s, jefe de Estupefacientes del Servicio de Vigilancia Aduanera. Algeciras y Valencia mueven cinco millones de contenedores TEU (equivalente a 20 pies, 6,1 metros de largo) al a?o, mientras que Barcelona, que ocupa el tercer puesto, gira en torno a los 3 y 3,5 millones. ¡°Si hay 6.000 buques que llegan a Valencia cada a?o, y hay 350 que llegan a otro puerto m¨¢s peque?ito, pues claro, al final las actuaciones est¨¢n ah¨ª¡±, a?ade De Andr¨¦s.
En 2023 hubo un pico y se pas¨® de incautar 40 toneladas de coca¨ªna a m¨¢s de 90 en los puertos de Espa?a, un incremento que se registr¨® tambi¨¦n en pa¨ªses del norte de Europa. Barcelona tuvo un r¨¦cord hist¨®rico, 19 toneladas. En Valencia y Algeciras rondaron las 14 toneladas. Los puertos peque?os, como M¨¢laga o Vigo, que gestionan en torno a 200.000 contenedores anuales, tambi¨¦n preocupan porque no tienen tantos recursos humanos y materiales para la detecci¨®n. El mi¨¦rcoles se conoci¨® el arresto de cuatro estibadores en el puerto de M¨¢laga por tr¨¢fico de coca¨ªna.
El mal ejemplo de Barcelona
La Fiscal¨ªa destaca, para mal, la situaci¨®n en el puerto de Barcelona. En su memoria de 2023 cita la absoluci¨®n de todos los acusados por la incautaci¨®n de una tonelada de coca¨ªna (entre ellos el ch¨®fer de un cami¨®n y un empleado de la compa?¨ªa) porque los estibadores convencieron al tribunal de que la estiba, carga y descarga ten¨ªan una ¡°absoluta falta de control¡±. ¡°Los puertos tienen unas reuniones mixtas en las que se habla tanto con empresas privadas, Aduanas, Guardia Civil o Fiscal¨ªa, para ver medidas de seguridad, c¨®mo se comparte informaci¨®n. Nosotros estamos convencidos de que hay unas reglas que funcionan. Si es as¨ª, en un juicio, la conclusi¨®n es que hay unos responsables de que la droga haya salido. Entonces ?Funcionan las reglas? ?Las hay o no las hay?¡±, se pregunta la fiscal jefa Antidroga sobre ese caso. Tambi¨¦n al a?o pasado, un contenedor sali¨® de una zona de inspecci¨®n de la Aduana, fue vaciado y lo devolvieron al mismo sitio, sin que nadie pudiera dar una explicaci¨®n.
Las reuniones mixtas de los puertos tienen su origen en una iniciativa pionera desarrollada por Aduanas en 2018 en Valencia. Su modelo se ha llevado a Barcelona y Algeciras y ahora se estudia implantar en Vigo, M¨¢laga y Bilbao. Sentar en una misma mesa a la Autoridad Portuaria, a las concesionarias de las terminales, a la Aduana, a la Fiscal¨ªa Antidroga, Vigilancia Aduanera y Guardia Civil ha permitido arreglar aspectos como control de accesos, videovigilancia, iluminaci¨®n de las explanadas, o para abordar los fallos en los intentos de rescate de drogas captados por las c¨¢maras. ¡°No es un ¡®yo te pido y t¨² te apa?as¡¯, es un ejercicio de colaboraci¨®n entre empresas y autoridades y por ah¨ª puede que venga parte de la soluci¨®n¡±, conf¨ªa De Andr¨¦s.
En una terminal del puerto de Valencia, por ejemplo, puede haber cada d¨ªa unos 30.000 contenedores en calles de cinco, seis o siete alturas y en bloques que no son de una pila ¨²nica, sino que puede haber cinco pilas, una contra otra. No se puede encontrar la ubicaci¨®n de un contenedor sin ayuda. ¡°Los estibadores son un eslab¨®n, una posibilidad que tienen los grupos criminales cuando quieren rescatar la coca¨ªna de un contenedor en el puerto y necesitan saber d¨®nde est¨¢¡±, afirma el responsable de Estupefacientes de Vigilancia Aduanera. ¡°Pero seg¨²n en qu¨¦ puertos, esa ubicaci¨®n tambi¨¦n la puede dar un empleado de la terminal, un guardia civil, un funcionario de aduanas, un empleado de la Autoridad Portuaria, y podr¨ªa seguir¡±, matiza De Andr¨¦s.
La Coordinadora de Trabajadores del Mar, en la que se integran los 1.200 estibadores que trabajan en Barcelona, asegura que el colectivo no ha sido invitado a participar en las reuniones de seguridad, pero que se muestra dispuesto a colaborar para lograr la eficiencia en la actividad. El fen¨®meno se extiende por Europa, donde la actividad de los estibadores est¨¢ en el punto de mira de las nuevas medidas de seguridad.
EL PA?S visit¨®, antes de la dana, el recinto portuario valenciano para conocer las medidas de seguridad. Moverse por el puerto no es darse un paseo por los muelles: control de acceso con una autorizaci¨®n con el motivo de la entrada, identificaci¨®n de los visitantes, del lugar al que se va a acudir, tiempo estimado y personas u organismos que se hacen responsables, en este caso la administradora de la Aduana de Valencia, Mar¨ªa Jos¨¦ Palau y el jefe regional adjunto de Gesti¨®n Aduanera de Valencia, D¨ªdac Salazar Santaf¨¦. Una vez superada la Polic¨ªa Portuaria se accede a un recinto comunicado por carreteras en el que se disponen las terminales, como si fueran islas rodeadas de alambrada. Cada una con sus controles de acceso, en los que se vuelve a pedir la orden de trabajo. Desde un alto, en el contradique sur, en una zona permitida para las visitas, se observan filas y filas de contenedores, gr¨²as en hilera, barcos cargados y los movimientos de camiones. Por una parte, la zona de graneles, a otro, naves con veh¨ªculos, m¨¢s all¨¢ la terminal de pasajeros. Cada uno tiene su misi¨®n. Las concesionarias, mover los contenedores, o las cajas, como las llaman, en el menor tiempo posible. Para la Aduana y Vigilancia Aduanera, que no entre nada prohibido o que no est¨¦ declarado. Este problema crece, cuando se incrementa la actividad. El Puerto de Valencia tiene prevista una ampliaci¨®n por el muelle norte que duplicar¨¢ su capacidad de tr¨¢fico de contenedores. Pasar¨¢n de cinco millones anuales, a diez, seg¨²n las estimaciones.
Los sistemas inform¨¢ticos de las empresas est¨¢n pensados para sus servicios y en general no est¨¢n adaptados a las necesidades de seguridad, aunque hay algunas excepciones. Esto hace que en un juicio sea dif¨ªcil vincular a un usuario que ha consultado una ubicaci¨®n de un contenedor al tr¨¢fico de drogas. ¡°Es necesario demostrar de forma fehaciente que eso sucedi¨® as¨ª y que esa persona sab¨ªa lo que estaba haciendo. Y no es sencillo¡±, avanza De Andr¨¦s. El informe de la Fiscal¨ªa sobre Valencia reconoce ¡°la mejora de los sistemas de seguridad del puerto¡± y la ¡°presi¨®n policial¡±, aunque tambi¨¦n detecta que las redes se han pasado a otros m¨¦todos, como el gancho dirigido, por el que la droga se deja fuera de las instalaciones.
No todos los contenedores pueden pasar por un esc¨¢ner. Los controles de Aduanas se hacen bas¨¢ndose en el an¨¢lisis de riesgos, en el que intervienen factores como el lugar de procedencia, la inteligencia policial, o informaciones del puerto de origen. ¡°Es muy dif¨ªcil controlar por la cantidad de comercio y contenedores¡±, a?ade la fiscal Mor¨¢n. ¡°Sospechamos que pasa mucho, pero no podemos parar por eso¡±. De Andr¨¦s subraya el gran valor que tiene la cooperaci¨®n policial, tanto dentro, como fuera de las fronteras. ¡°Sin ella, este problema ser¨ªa inabarcable¡±.
La soluci¨®n para blindar los puertos llega desde varios frentes. ¡°Son muchas claves, es un trabajo conjunto con las empresas privadas, tanto mercantiles, como estiba, las navieras, en el que todos tienen algo que aportar y hay que conseguir ese compromiso¡±, detalla la jefa Antidroga, que tambi¨¦n ve necesario un mayor trabajo con los puertos de los que est¨¢ saliendo la coca¨ªna, como Guayaquil (Ecuador), considerado la gran plataforma actual. ¡°Tiene poco sentido que aqu¨ª elevemos m¨¢s el muro y que no ayudemos o compartamos con nuestros compa?eros de Ecuador, Brasil, Per¨² o algunos pa¨ªses del Golfo de Guinea esas posibilidades de aumentar la seguridad¡±, coincide el general Navarrete.
La Comisi¨®n Europea lanz¨® en enero una Alianza de Puertos para que empresas privadas y p¨²blicas se unan para controlar la seguridad de estas instalaciones, adem¨¢s de fomentar el intercambio de informaci¨®n y las operaciones conjuntas entre los cuerpos policiales europeos, entre otras acciones. En 2024 se han sucedido las reuniones de ministros del Interior y de fiscales, sobre crimen organizado y corrupci¨®n, pero tambi¨¦n otras a nivel operativo o relacionadas con tecnolog¨ªas innovadoras para detectar la droga.
El grupo de la alianza de Puertos sigue con su trabajo, una delegaci¨®n visit¨® Valencia el 30 y 31 de octubre, para conocer las instalaciones y asistir a a una demostraci¨®n de algunos de los proyectos de colaboraci¨®n, como Meteor, un sistema de detecci¨®n basada en vapores que permite detectar hasta cinco sustancias en un contenedor. Los participantes en esas reuniones conf¨ªan en que 2025 ser¨¢ el a?o en el que comiencen a verse todas las iniciativas.
¡°Hay mucho dinero en la droga, y corrompe tanto en lo p¨²blico como en lo privado¡±, aporta la fiscal jefa Antidroga. La idea de la Uni¨®n Europea es trabajar mucho en la colaboraci¨®n p¨²blico y privada y hacer a las empresas consignatarias y de transporte responsables de la seguridad de lo que ocurre en las terminales. ¡°No se ha abierto nunca diligencias a las empresas que trabajan en los puertos, pues a lo mejor en alg¨²n momento tiene que pasar¡±, afirma Mor¨¢n.
Como el gato y el rat¨®n
El crimen organizado, con su poderío económico, siempre va por delante. Se trata de que quienes luchan contra el narcotráfico en los puertos no se queden demasiado atrás en esta interminable carrera del gato y el ratón. Las formas de camuflar la droga son casi tan numerosas como los métodos que los agentes de Vigilancia Aduanera tienen para detectarla. Rip off o gancho ciego (poner unas bolsas con droga entre la carga legítima); camuflarla dentro del contenedor, de forma que al abrirlo solo se vea la carga permitida, conocido como in the cargo (en la carga); mezclarla con otra sustancia y que parezca melaza, harina o azúcar; o esconderla en el casco de la embarcación (en boyas o ruedas). Las inspecciones se pueden hacer con escáneres de alta energía, capaz de revisar contenedores enteros cargados sobre camiones, escáneres móviles (para cajas o sacos individuales), de retrodispersión (que escanea desde manera encubierta y que puede viajar oculto en un vehículo) o manuales (que caben en una bolsa de deporte y se acercan a un objeto).
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