S¨¢nchez halla en su choque con los jueces una estrategia para aglutinar a los progresistas
El presidente y los suyos se revuelven cada vez m¨¢s claramente contra algunos magistrados y manejan datos que indican que en sus votantes cunde la sensaci¨®n de injusticia
El Gobierno ha dejado atr¨¢s los d¨ªas en los que, ante cualquier decisi¨®n judicial adversa, se limitaba a mostrar su respeto a la Justicia. En el Ejecutivo se ha instalado la idea de que algunos jueces han tomado la decisi¨®n de hacer todo lo posible para debilitar a Pedro S¨¢nchez y su entorno. El propio presidente ha ido aumentando el tono de la cr¨ªtica a estos magistrados, a los que incluso acusa de actuar en connivencia con el PP. ¡°El PP juega con las cartas marcadas en la justicia, y eso me preocupa¡±, lleg¨® a decir el mi¨¦rcoles en la tradicional copa de Navidad en La Moncloa, despu¨¦s de asegurar que los populares tienen informaci¨®n privilegiada de lo que va a pasar en algunos procesos cr¨ªticos para el Gobierno.
Detr¨¢s de esta frase, y otras anteriores que muestran una l¨ªnea ascendente ¨D¡±este acoso pol¨ªtico, medi¨¢tico y judicial se volver¨¢ contra los acosadores¡±, hab¨ªa dicho en el acto del d¨ªa de la Constituci¨®n¡ª no hay, aseguran diversas fuentes del Ejecutivo, ning¨²n calent¨®n. Es una estrategia medida. S¨¢nchez y su equipo manejan datos que demuestran, tal como lo interpretan en el Gobierno, que cada vez m¨¢s ciudadanos trasladan su malestar con algunas decisiones judiciales que afectan al entorno del presidente, y que se extiende la sensaci¨®n de que algunos jueces no est¨¢n siendo justos y objetivos, sino que est¨¢n tratando de estirar procesos sin contenido para perjudicar al Ejecutivo.
Seg¨²n una encuesta del CIS en abril, el 83% de los espa?oles cree que la justicia ¡°se ve influida por otros poderes pol¨ªticos o econ¨®micos¡±, frente a un 9,5% que cree que siempre act¨²a de manera imparcial. Pero m¨¢s all¨¢ del CIS, denostado por la oposici¨®n, hay varias encuestas privadas que se?alan que crece la sensaci¨®n de que la justicia est¨¢ instrumentalizada con fines pol¨ªticos. En La Moncloa manejan datos que indican esa idea que lanz¨® S¨¢nchez, esto es, que lo que ven como un acoso judicial al Gobierno se puede volver en contra electoralmente y generar una reacci¨®n de apoyo al Ejecutivo en importantes sectores progresistas.
La frase ¡°el que pueda hacer que haga¡±, que dijo el expresidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, es la m¨¢s repetida en c¨ªrculos pol¨ªticos del Gobierno para explicar algo que no tiene por qu¨¦ ser, se?alan, una maniobra orquestada y coordinada, una conspiraci¨®n, sino una sucesi¨®n de decisiones individuales de algunos jueces que querr¨ªan, seg¨²n esta visi¨®n, da?ar al Ejecutivo en un momento de mucha tensi¨®n pol¨ªtica, y cuando una parte de la judicatura ha dejado muy claro por ejemplo su rechazo a la amnist¨ªa del proc¨¦s, una de las medidas estrella de esta legislatura.
¡°No tengo una oposici¨®n pol¨ªtica, es otra cosa¡±, insiste S¨¢nchez, en clara referencia a una situaci¨®n de anormalidad y acoso judicial, tal como la perciben en La Moncloa. ¡°La verdadera oposici¨®n la hacen algunos jueces. No el PP, que no nos desgasta nada, no es capaz¡±, aseguran varios ministros y dirigentes socialistas consultados. ¡°Es una realidad atronadora que hay jueces que no est¨¢n siendo justos con el Gobierno. Una aproximaci¨®n m¨ªnimamente objetiva as¨ª lo indica¡±, se?ala un destacado miembro del Ejecutivo.
Por tanto, esta l¨ªnea estrat¨¦gica va a seguir. S¨¢nchez ya pidi¨® a los suyos en el congreso del PSOE en Sevilla que salieran ¡°a la ofensiva¡±. El Gobierno y el propio presidente est¨¢n recibiendo cr¨ªticas muy duras por estas frases de desconfianza en algunos jueces por parte de asociaciones judiciales y de la presidenta del Consejo General del Poder Judicial, la progresista Isabel Perell¨®, pero estos reproches no hacen que el Gobierno var¨ªe su estrategia. Esta semana, que tendr¨¢ un nuevo hito en el Supremo con una nueva declaraci¨®n de Aldama y otra de Koldo Garc¨ªa, es presumible que se mantenga esta l¨ªnea fuerte de S¨¢nchez y su equipo alertando de ese acoso judicial contra el Gobierno. En la conferencia de presidentes en Santander se vivi¨® una especie de tregua, y nadie habl¨® de justicia ni de esc¨¢ndalos ni de corrupci¨®n, pero el ambiente t¨®xico volver¨¢ a su apogeo esta semana, presumiblemente, con la agenda pol¨ªtica de nuevo pendiente de los tribunales.
Adem¨¢s de las conocidas instrucciones de los casos contra la esposa y el hermano de S¨¢nchez, que se critican mucho en La Moncloa, ahora hay mucha suspicacia en el Gobierno por la decisi¨®n de dejar tan r¨¢pidamente a V¨ªctor de Aldama en libertad, cuando tanto el Ejecutivo como el propio ?scar Puente, ministro de Transportes, que encarg¨® un informe espec¨ªfico sobre esto, mantienen que el empresario no ha presentado ninguna prueba s¨®lida sobre la supuesta corrupci¨®n en adjudicaciones de obras.
Ah¨ª entran no solo los jueces, sino la Fiscal¨ªa, que pidi¨® la libertad de Aldama por su colaboraci¨®n con la justicia. En algunos sectores del Gobierno y del PSOE hay malestar por la sensaci¨®n de que el fiscal general, ?lvaro Garc¨ªa, no es capaz de controlar situaciones como esta. ¡°A veces parece que estamos en Gobierno, pero no gobernamos en algunos temas sensibles¡±, se?ala uno de los consultados. S¨¢nchez mantiene su respaldo total a Garc¨ªa. El presidente cree que el fiscal general tambi¨¦n es v¨ªctima de un acoso medi¨¢tico, pol¨ªtico y judicial injusto y por eso siempre ha defendido que no tiene que dimitir. No es presumible ning¨²n cambio ah¨ª, pero algunos sectores del Gobierno y del partido opinan que habr¨ªa que ser m¨¢s directos y tomar la iniciativa frente a una ofensiva de sectores de la justicia que ven cada vez m¨¢s clara.
No todo el mundo est¨¢ de acuerdo con este mensaje cr¨ªtico con algunos jueces, como dej¨® claro en el congreso del PSOE Emiliano Garc¨ªa-Page, que insisti¨® en que cuando se est¨¢ en el Gobierno ¡°no se puede ir de v¨ªctima¡± y menos despu¨¦s de haber pactado con el PP la renovaci¨®n del Consejo General del Poder Judicial. Pero al margen de Page y otros sectores, la sensaci¨®n de acoso judicial injusto est¨¢ muy extendida en el Gobierno, en el PSOE, en Sumar, en la mayor¨ªa de los socios e incluso en los sindicatos, que han mostrado su apoyo cerrado al Ejecutivo frente a lo que Unai Sordo (CC OO) y Pepe ?lvarez (UGT) definieron como lawfare. En estos sectores est¨¢ totalmente asumido que la justicia tendr¨¢ un gran protagonismo en lo que queda de legislatura, pero tambi¨¦n creen que algunos jueces han cruzado l¨ªneas rojas y sus excesos se volver¨¢n contra ellos porque cada vez perder¨¢n m¨¢s credibilidad. Lo que parece seguro es que S¨¢nchez y su equipo no dar¨¢n marcha atr¨¢s en estas cr¨ªticas cada vez m¨¢s claras a algunos jueces, para las que creen contar con el apoyo de una parte cada vez m¨¢s relevante de sus votantes.
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