Las coaliciones de Unidas Podemos sobreviven un a?o despu¨¦s de la ruptura en la izquierda

El 16 de agosto de 2023, un d¨ªa antes de la constituci¨®n de las Cortes, Yolanda D¨ªaz reun¨ªa por primera vez a los diputados de Sumar en el Congreso. Aquel d¨ªa estaba previsto que todo el grupo se hiciera la foto de familia para inaugurar la legislatura en las escaleras de entrada al palacio, junto a los Leones, pero falt¨® a la cita la l¨ªder de Podemos, Ione Belarra, y la instant¨¢nea nunca se pudo tomar. La an¨¦cdota la contaba meses despu¨¦s de la ruptura un parlamentario, que a?ad¨ªa que aquella primera ausencia no presagiaba ya nada bueno. Con la salida de Podemos al Grupo Mixto fueron muchos los que vaticinaron una reacci¨®n en cadena en los territorios. Un a?o despu¨¦s, sin embargo, la unidad resiste en las 24 capitales de provincia y las siete comunidades en las que la candidatura conjunta de Podemos e IU obtuvo representaci¨®n en los ¨²ltimos comicios.

?Sentido de la responsabilidad? ?Simple supervivencia? ¡°Probablemente una mezcla de ambas. Cuando una coalici¨®n nace solo por necesidad, est¨¢ condenada al fracaso. Hay que hacer pol¨ªtica cuatro a?os¡±, opina la polit¨®loga andaluza Ana Salazar, quien ha visto c¨®mo en su comunidad los partidos del grupo Por Andaluc¨ªa se han podido entender cada vez mejor. Aquel pacto electoral entre las izquierdas alumbrado en el ¨²ltimo minuto empez¨® muy mal, los primeros meses de legislatura fueron dif¨ªciles, pero hoy se habla ya de una reedici¨®n del acuerdo para 2026. La confluencia cuenta con cinco diputados (tres de la formaci¨®n de Ione Belarra, una de IU y otra de M¨¢s Pa¨ªs). ¡°El proyecto ha madurado y el grupo ha llegado a un punto de equilibrio y entendimiento, trabajando por la misma causa. Desde la oposici¨®n, han logrado abanderar temas como la sanidad o el apoyo al Consejo de RTVA¡±, considera Salazar.

Tras una campa?a en primarias sin cr¨ªticas a Sumar, la reciente designaci¨®n de Raquel Mart¨ªnez como coordinadora auton¨®mica de Podemos podr¨ªa favorecer la unidad, coinciden varias voces. Aunque el partido evita pronunciarse sobre una cita para la que queda a?o y medio, una eternidad en pol¨ªtica, el trabajo est¨¢ en marcha. Dentro de IU, el PCA hizo p¨²blica en octubre su propuesta para volver a presentarse juntos. Ser¨ªa un cambio de tendencia despu¨¦s de lo sucedido este a?o en Galicia, Euskadi, Catalu?a ¡ªdonde Podemos ni estuvo¡ª o Europa. ¡°No se trata de hacer solo una candidatura, sino de lanzar un proceso de confluencia y movilizaci¨®n. Hay gente desencantada con lo que sucedi¨® que ha agradecido la iniciativa¡±, explica el coordinador de Izquierda Unida en Andaluc¨ªa, Toni Valero. En su opini¨®n, son tres los elementos clave para que el pacto fructifique. ¡°Que se establezcan m¨¦todos democr¨¢ticos consensuados para elaborar las candidaturas, que no haya vetos y que sea un proceso en el que se mantenga el m¨¢ximo decoro, evitando generar un ruido que haga que la gente se quede en casa¡±, reflexiona Valero, quien ve en la desmovilizaci¨®n de la izquierda el gran problema y subraya que desde que Javier Arenas era el candidato del PP a la presidencia de la Junta (la ¨²ltima vez en 2012) el n¨²mero de votantes de la derecha ha sido pr¨¢cticamente el mismo.

Las auton¨®micas de mayo de 2023 comportaron un profundo retroceso en el espacio, saliendo de cinco de los seis gobiernos que compart¨ªan. Para esos comicios hubo acuerdo entre Podemos e IU en 10 de las 12 comunidades en juego, y tan solo en cinco de esos territorios con pacto lograron mantenerse dentro de los parlamentos. Todas ellas resisten unidas. Son Navarra, La Rioja, Baleares, Murcia y Extremadura. A estas hay que sumar Castilla y Le¨®n, que fue a elecciones en febrero de 2022 y, previsiblemente, ser¨¢ la pr¨®xima en abrir las urnas. Asturias y Arag¨®n representaron hace a?o y medio las excepciones. Ah¨ª concurrieron por separado y en el primer caso entr¨® IU (coaligada a otras fuerzas y con presencia en Gobierno) y en el segundo, ambos con un diputado cada uno.

En varias comunidades, los diputados son de un ¨²nico partido y el compromiso se limita ya a lo econ¨®mico. En Murcia y Baleares, donde se obtuvo un solo esca?o, el representante de Podemos debe dejar paso al de IU a medio mandato, es decir, en julio del pr¨®ximo a?o. Ser¨¢ la prueba de fuego definitiva para medir el grado de cumplimiento de los acuerdos. ¡°El ruido de Madrid no ayuda, y la competencia electoral tampoco¡±, se?ala un dirigente de los partidos de la coalici¨®n en Baleares. ¡°La relaci¨®n aqu¨ª es correcta, pero eso es solo un punto de partida y quedan a¨²n casi tres a?os¡±, advierte. En el conjunto de Espa?a, hasta ahora, las desavenencias se han limitado a cuestiones econ¨®micas, por ejemplo, en Euskadi y La Rioja. En general, las direcciones territoriales consultadas no reportan problemas.

Todas las fuentes citan a Extremadura como ejemplo del buen desempe?o. ¡°Llevamos cinco a?os trabajando sin problemas, pero nunca nos ponen en el mapa¡±, lamenta Irene de Miguel, portavoz de Unidas por Extremadura, que el 28-M logr¨® revalidar los cuatro diputados obtenidos ya en 2019. ¡°Creo que el ¨¦xito radica en que no funcionamos como coalici¨®n electoral, con cupos, sino como confluencia. Actuamos como un grupo solidario y cohesionado y hasta los trabajadores los compartimos entre todos, sin importar de qu¨¦ partido sean, adem¨¢s de tomar las decisiones por consenso¡±, explica. ¡°Tenemos una mesa pol¨ªtica que se re¨²ne de manera peri¨®dica para abordar las l¨ªneas estrat¨¦gicas y los conflictos, conformada tanto por gente del grupo parlamentario como por cargos de los partidos. Adem¨¢s, aunque la confluencia empez¨® de arriba abajo, hemos trabajado para construir por la base y ya tenemos asambleas municipales en las que no solo est¨¢n Podemos e IU, sino tambi¨¦n otros colectivos de izquierdas¡±, expone.

Para ella, el camino es, sin duda, el de la unidad, y as¨ª lo plante¨® a sus compa?eros antes de presentarse a la reelecci¨®n como coordinadora auton¨®mica de Podemos, puesto en el que acaba de ser revalidada este diciembre con el 95% de apoyos. ¡°En Extremadura tenemos muy claro que separados no vamos a ning¨²n sitio y que hay que ir a m¨¢s, no a menos. Se ha actuado con respeto a cada organizaci¨®n, sabiendo que nos unen m¨¢s cosas de las que nos separan (...) hasta la gente m¨¢s reacia comprende que el futuro pasa por entenderse¡±, afirma. De Miguel, partidaria de los acuerdos, discrep¨® sobre la estrategia de la c¨²pula con Sumar antes de las generales, pero sostiene que desde la direcci¨®n estatal le han dejado tomar siempre todas las decisiones con autonom¨ªa.

Crisis de representaci¨®n en ayuntamientos

La debacle del 28-M ahond¨® la crisis de representaci¨®n de UP en los consistorios. La lista conjunta no logr¨® entrar en los ayuntamientos de Madrid y Valencia y los comunes perdieron la alcald¨ªa de Barcelona, el ¨²ltimo gran basti¨®n del espacio. La recesi¨®n fue tal que ¡°a efectos de contabilidad de la Federaci¨®n Espa?ola de Municipios y Provincias (FEMP) Podemos no tiene ni una sola alcald¨ªa¡±, recuerda un alto cargo de la coalici¨®n Sumar.

La organizaci¨®n de Belarra e IU fueron juntas en 39 de las 52 capitales de provincia espa?olas y ¨²nicamente en 24 de ellas lograron concejales. En la madrile?a Alcorc¨®n (donde cogobierna con el PSOE la candidatura Ganar Alcorc¨®n), Ferrol y Santiago a¨²n existen. Izquierda Unida firm¨® m¨¢s de 1.000 alianzas en ese proceso electoral, y aunque tambi¨¦n sufri¨® el duro golpe, retuvo ayuntamientos como Rivas o Mieres.

En el ¨¢mbito municipal, la pelea del Congreso queda lejos, pero con un Sumar carente todav¨ªa de estructura territorial y Podemos fuera de juego, la cita de 2027 representa un desaf¨ªo enorme. Con este panorama, Comprom¨ªs, M¨¢s Madrid, Chunta y otras organizaciones de car¨¢cter auton¨®mico jugar¨¢n un papel esencial en la reconfiguraci¨®n del espacio, clave para sostener gobiernos con los socialistas.