¡®Caso Monedero¡¯: el esc¨¢ndalo que erosiona la imagen de Podemos
Tras estallar la crisis, las explicaciones de la direcci¨®n del partido fueron inmediatas, pero a¨²n no ha acreditado con documentos c¨®mo resolvi¨® ¡°apartar¡± al polit¨®logo y cofundador de la formaci¨®n

Un Juan Carlos Monedero emocionado aplaud¨ªa a Pablo Iglesias en la sede del Ministerio de Derechos Sociales el 13 de enero de 2020. Desde las butacas del auditorio principal, el veterano profesor de Ciencias Pol¨ªticas de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) asist¨ªa a la toma de posesi¨®n del nuevo vicepresidente del Gobierno, otro acad¨¦mico mucho m¨¢s joven. Iglesias era un comunicador que hab¨ªa despuntado al calor del 15-M y con el que en los ¨²ltimos seis a?os hab¨ªa compartido una historia pol¨ªtica y personal que discurri¨® a una velocidad de v¨¦rtigo: la fundaci¨®n de Podemos, su ascenso mete¨®rico, las imputaciones contra dirigentes del partido, la ruptura en dos, las repeticiones electorales... Aquella ma?ana en la que Iglesias asum¨ªa un alto cargo del primer Ejecutivo de coalici¨®n de la democracia, Monedero estaba all¨ª, orgulloso como el que m¨¢s, y sigui¨® est¨¢ndolo un tiempo m¨¢s, a pesar de que formalmente ya no ocupaba ning¨²n puesto m¨¢s all¨¢ de sus responsabilidades al frente de la fundaci¨®n vinculada a Podemos.
Han pasado 10 d¨ªas desde que el partido admiti¨® haber conocido dos acusaciones de acoso y abuso sexual dentro de la formaci¨®n contra Monedero en septiembre de 2023, una de ellas escrita a trav¨¦s de un email y la otra trasladada de manera verbal. En el correo electr¨®nico enviado a la Secretar¨ªa de Feminismos se describ¨ªan ¡°manoseos¡±, ¡°tocamientos en cintura y trasero¡± o el ¡°intento de besar a una compa?era estando ebrio¡±. La direcci¨®n (con la secretaria general, Ione Belarra, y la exministra de Igualdad, Irene Montero, a la cabeza) ha defendido desde ese jueves 20 de febrero que lo ¡°apartaron¡± inmediatamente y que, aunque la Comisi¨®n de Garant¨ªas ¡ª¨®rgano encargado de abrir la investigaci¨®n¡ª trat¨® de ponerse en contacto con las denunciantes, estas nunca contestaron y las pesquisas no pudieron continuar.
Justifican que hasta antes de esa fecha no hab¨ªa constancia de ninguna denuncia, que solo a las v¨ªctimas correspond¨ªa seguir con el proceso (y no al partido indagar por su cuenta), y que al no existir una resoluci¨®n de dicho organismo no pod¨ªan ni expulsarlo del chat de la direcci¨®n ¡ªel Consejo Ciudadano Estatal, donde no ten¨ªa voto pero s¨ª voz y participaba como invitado meses despu¨¦s¡ª, ni iniciar el procedimiento para suspenderlo de militancia o prohibirle la entrada a actos. ¡°Actuamos cuando nadie miraba¡± y ¡°no por presi¨®n medi¨¢tica¡±, para hacer de Podemos ¡°un espacio seguro¡±, han sostenido en un alegato de su ¡°compromiso con los valores feministas¡±. El lunes, ¨²ltimo d¨ªa que dieron explicaciones sobre este asunto, el secretario de Organizaci¨®n, Pablo Fern¨¢ndez, asegur¨® que decidieron dejar de ¡°convocarlo¡±, pero nunca se lo comunicaron a ¨¦l.
En redes sociales, dirigentes como Belarra a¨²n intercambiaron alg¨²n mensaje afectuoso con Monedero tres meses despu¨¦s de que llegaran las acusaciones y este continu¨® con su programa en Canal Red, la televisi¨®n de Iglesias, hasta enero de 2024. En p¨²blico y en privado, se justific¨® tanto su salida como su renuncia a la presidencia del Instituto Rep¨²blica y Democracia por discrepancias pol¨ªticas vinculadas a la estrategia con Sumar y nunca se supo de las denuncias.
Con el paso de los d¨ªas, la ley del silencio se ha impuesto entre antiguos dirigentes, ex altos cargos y pol¨ªticos vinculados a Podemos en esos primeros a?os. EL PA?S ha tratado de contactar con m¨¢s de una docena de ellos. O bien no quieren hablar o aseguran no tener informaci¨®n sobre lo ocurrido en torno al caso, pero son muchas las figuras del c¨ªrculo del partido que reconocen actitudes ¡°machistas¡± e ¡°invasivas¡±. ¡°La gente que funda Podemos eran compa?eros suyos de facultad [en referencia a Iglesias, Carolina Bescansa, Luis Alegre e ??igo Errej¨®n]. Resultaba una persona inc¨®moda, molesta, con un comportamiento previo intolerable¡±, afirma una voz que cuestiona la versi¨®n oficial y a?ade: ¡°En torno a Monedero ha habido un gran cinismo y protecci¨®n, porque era amigo¡±.
¡°El comportamiento de Juan Carlos [Monedero] es conocido y hay muchos testimonios que lo pueden acreditar. Eso ha sucedido en muchos ambientes. Se salvan pocos. En qu¨¦ grado ha sido acoso o agresi¨®n, lo tendr¨¢n que decir las v¨ªctimas. La l¨ªnea roja es la denuncia¡±, asegura otro perfil vinculado en su d¨ªa al espacio pol¨ªtico.
Pese a su defensa casi siempre f¨¦rrea de Podemos (este viernes el polit¨®logo escribi¨® en X que ¡°no es¡± su ¡°tarea¡± que la izquierda ¡°se divida y se pelee¡±), Monedero siempre ha sido un verso suelto. En abril de 2015, el profesor de Pol¨ªticas dimiti¨® como secretario de Proceso Constituyente horas despu¨¦s de criticar la estrategia del partido. Fue su primer y ¨²ltimo cargo org¨¢nico tras la primera asamblea, pero sigui¨® siempre como una voz autorizada y respetada dentro, recibido incluso con aplausos de la militancia en multitud de actos hasta a?os m¨¢s tarde. De igual modo, segu¨ªa interviniendo y asistiendo a sus encuentros anuales, como la Fiesta de la Primavera de abril de 2023 en Zaragoza, donde tienen origen las denuncias. Entonces, la Ejecutiva estaba mucho menos masculinizada y con las ministras Montero y Belarra a la cabeza, la organizaci¨®n hab¨ªa conseguido hacer realmente del feminismo una de sus banderas. ¡°Cuando hablamos del Podemos de 2016 poco pueden se?alar compa?eros y amigos. En todo caso tendr¨ªan que entonar el mea culpa e incluso estar orgullosos de c¨®mo han evolucionado¡±, reconoce una fuente. Pese a su proximidad a la c¨²pula, Monedero no lleg¨® a ir nunca en una lista electoral, ni tampoco lo nombraron cargo p¨²blico.
Tras el estallido de la crisis, las explicaciones de la direcci¨®n fueron inmediatas, pero el partido no ha acreditado hasta ahora con documentos que resolviera ¡°apartarlo¡± y algunas voces de peso ponen en duda en privado que realmente fuera as¨ª. En elDiario.es, peri¨®dico que public¨® en exclusiva la denuncia, la autora del correo defend¨ªa este jueves que nunca recibi¨® el email de respuesta (aunque la direcci¨®n ha facilitado pruebas de su existencia), y censuraba que el partido no intentase volver a ponerse en contacto con ella.
El esc¨¢ndalo toca de ra¨ªz a la formaci¨®n en un asunto clave para el partido como es el feminismo, y deja a¨²n preguntas en el aire. Podemos no ha aclarado qu¨¦ personas en concreto tomaron las decisiones ni qui¨¦nes las conocieron. Tampoco c¨®mo fue posible finalmente echarlo del canal de comunicaci¨®n del Consejo Ciudadano Estatal (CCE) por ¡°filtraciones¡± a medios, seg¨²n reconoci¨® Fern¨¢ndez, pero no en su d¨ªa ante las denuncias de acoso. Adem¨¢s, la dureza con la que salieron sus dirigentes contra Yolanda D¨ªaz por haber permitido a ??igo Errej¨®n ser candidato en las generales y hacerlo portavoz parlamentario de Sumar cuando hubo una denuncia ya en 2023 o sus continuos pronunciamientos en otros casos como el de Luis Rubiales, expresidente de la Real Federaci¨®n Espa?ola de F¨²tbol condenado recientemente por el beso no consentido a la futbolista Jennifer Hermoso, contrastan con la tibieza en la condena expl¨ªcita ahora de los presuntos actos de Monedero.
La denuncia en la Universidad
El terremoto traspas¨® la esfera pol¨ªtica cuando, horas despu¨¦s de que Podemos admitiera que conoc¨ªa esas denuncias, la Complutense adelant¨® que ten¨ªa abierto un expediente contra Monedero por una denuncia interna de una alumna por acoso sexual. La UCM, que ha afirmado que da credibilidad al relato de la presunta v¨ªctima, se encuentra a la espera de que la Inspecci¨®n de Servicios termine la investigaci¨®n para conocer sus propuestas: trasladar la denuncia a la Fiscal¨ªa, imponer una sanci¨®n temporal al acusado o archivar el caso.
Las acusaciones contra el fundador de Podemos se han alimentado esta semana con otros testimonios en redes sociales y diversos medios de alumnos (antiguos y actuales) de la facultad de Ciencias de Pol¨ªticas y Sociolog¨ªa, donde Monedero da clase, que aluden a que era ¡°vox populi¡± desde hace a?os que el expol¨ªtico ¡°intentaba seducir¡± y acosaba a las estudiantes. En medio de este tsunami, Monedero present¨® a la facultad una baja laboral. La instituci¨®n public¨® este mi¨¦rcoles un comunicado donde anunciaba que el polit¨®logo dejaba de dar clase ¡°hasta nuevo aviso¡± y que le estaba buscando un sustituto.
EL PA?S ha preguntado a la universidad sobre la existencia de otros expedientes contra Monedero, pero no ha recibido respuesta. El protocolo de la Complutense, divulgado en 2016, marca que anualmente el campus publicar¨¢ los ¡°datos desagregados por sexo y g¨¦nero sobre casos e intervenciones de los diferentes hechos de acoso¡±. Pero esta informaci¨®n no es accesible en la p¨¢gina web de la UCM, tan solo hay varias memorias de la Unidad de Igualdad donde no aparece ninguna informaci¨®n sobre este tipo. Este diario ha solicitado esos documentos, con el inter¨¦s de saber cu¨¢ntos profesores han sido expedientados por abusar o acusar sexualmente del alumnado, pero la universidad no los ha facilitado.
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