De pastor a alcalde en el paradigma de la Andaluc¨ªa Vaciada
Santiago-Pontones, el municipio m¨¢s extenso del mayor parque natural de Espa?a, tiene la primera alcald¨ªa de Ja¨¦n Merece M¨¢s
Antonio Rodr¨ªguez, Rodri, como lo conocen sus vecinos, anda todav¨ªa buscando a alg¨²n pastor que quiera hacerse cargo de la explotaci¨®n ganadera familiar. ?l, que volvi¨® a su pueblo hace cuatro a?os dejando su trabajo como enfermero en una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), ya no puede sacar a pastar a sus ovejas y cabras porque desde el pasado 17 de junio es el nuevo alcalde de Santiago-Pontones (2.632 habitantes, Ja¨¦n), el primer municipio en ser gobernado por Ja¨¦n Merece M¨¢s, el partido provincialista que en su d¨ªa fue cofundador de la plataforma de la Espa?a Vaciada junto a Teruel Existe y Soria Ya.
¡°Santiago-Pontones est¨¢ donde tiene que estar, se nos tiene que quitar los complejos de inferioridad por vivir en un pueblo¡±, comenta el primer edil del que es el municipio m¨¢s extenso (ocupa un tercio de la superficie total) del mayor parque natural de Espa?a, el de Cazorla, Segura y Las Villas.
Rodr¨ªguez, de 43 a?os, intenta transmitir optimismo a sus paisanos, una tarea nada f¨¢cil en el que ya se ha convertido en el paradigma de la Andaluc¨ªa Vaciada. En el ¨²ltimo medio siglo ha perdido el 82% de su poblaci¨®n y su tasa de envejecimiento -del 26,47%- es de las m¨¢s altas del pa¨ªs.
Santiago-Pontones alcanz¨® su techo demogr¨¢fico con 15.000 habitantes poco despu¨¦s de su nacimiento como municipio en 1975 (de la fusi¨®n de las localidades de Santiago de la Espada y Pontones) pero desde entonces su declive poblacional ha sido constante.
Rodr¨ªguez asume, no obstante, que el fen¨®meno de la despoblaci¨®n es algo que los serranos tienen interiorizado desde hace a?os. ¡°Mis padres me educaron y me mandaron fuera a estudiar y a trabajar porque aqu¨ª no ve¨ªan futuro para sus hijos¡±, se?ala el alcalde santiague?o. Y cuando repasa las cifras que representan el despoblamiento de este municipio, a Rodr¨ªguez se le acaban los mensajes de optimismo y cae en el desaliento: ¡°Estamos m¨¢s en peligro de extinci¨®n que el lince y el quebrantahuesos¡±, subraya.
El declive demogr¨¢fico es una constante en el resto de pueblos de la comarca de la Sierra de Segura: ¡°Estamos al borde del abismo; vamos todos en picado y cuesta abajo¡±, ha alertado Pascual Berm¨²dez, alcalde socialista de Benatae, el segundo municipio menos poblado de Ja¨¦n (448 habitantes).
Por su parte, Jos¨¦ Manuel Mart¨ªnez, flamante alcalde de Segura de la Sierra por el PP, coincide con el sentir de los otros regidores y urge a las Administraciones a activar planes de discriminaci¨®n positiva para los municipios m¨¢s castigados por la despoblaci¨®n.
Medidas, apuntan los alcaldes, que tienen que ver con las ayudas y beneficios fiscales para los pobladores y para los que quieran asentarse en estos pueblos del interior del mayor parque natural del pa¨ªs. El turismo no basta para retener a los m¨¢s j¨®venes.
La peculiaridad de Santiago-Pontones es la vasta extensi¨®n del municipio con m¨¢s de 80 peque?os n¨²cleos habitados, lo que hace que tenga una densidad de poblaci¨®n de 4,07 habitantes por kil¨®metro cuadrado, la mitad del ¨ªndice en el que la Uni¨®n Europea cataloga a las ¡°zonas muy escasamente pobladas¡±.
La econom¨ªa local gira en torno a la ganader¨ªa ovina y caprina (hay m¨¢s de 200 explotaciones censadas), pero se trata de un sector muy castigado en los ¨²ltimos a?os por la sequ¨ªa y la crisis de precios. Tampoco la riqueza forestal del municipio, cuna del r¨ªo Segura, revierte entre los habitantes. ¡°Todo el valor a?adido se va fuera porque las concesiones de la corta de la madera siempre van a empresas for¨¢neas¡±, se lamenta Rodr¨ªguez.
Y si la ganader¨ªa se resiente, tambi¨¦n lo hacen el resto de comercios de la localidad. ?ngel y Remedios han cerrado, por jubilaci¨®n, la ¨²nica tienda de electrodom¨¦sticos que hab¨ªa en el municipio, y no han encontrado a nadie que quiera seguir con el negocio.
Algo m¨¢s esperanzada se muestra Yolanda Vizca¨ªno, otra enfermera que volvi¨® a su tierra en plena pandemia para poner en marcha una empresa de turismo rural. ¡°Pese a la sangr¨ªa demogr¨¢fica, estamos viendo que muchos j¨®venes est¨¢n cambiando el chip y quieren emprender en su tierra, algo parece que se est¨¢ moviendo¡±, indica Vizca¨ªno, agarr¨¢ndose a un futuro m¨¢s alentador.
Para hacer frente al elevado envejecimiento de la poblaci¨®n, las autoridades locales de Santiago-Pontones consideran que hay algunas l¨ªneas rojas que no se pueden traspasar: ¡°Los que queremos vivir aqu¨ª queremos una vida digna, pero si se sigue perdiendo poblaci¨®n tambi¨¦n se perder¨¢n servicios b¨¢sicos, es la pescadilla que se muerde la cola¡±, apunta Rodr¨ªguez, que reclama el mantenimiento de los servicios p¨²blicos de sanidad y educaci¨®n y tambi¨¦n la mejora de las comunicaciones por carretera hacia Ja¨¦n, pero tambi¨¦n hacia Granada y Murcia.
Y es que, asentado en el v¨¦rtice de las tres provincias, la vida comercial, laboral y estudiantil de estos vecinos guarda m¨¢s relaci¨®n con Murcia que con Andaluc¨ªa, algo que refrendan cada invierno cuando, al emigrar a otros pueblos de Ja¨¦n para la campa?a de la aceituna, comentan ¡°nos vamos a las Andaluc¨ªas¡±.
Mientras Antonio Rodr¨ªguez sigue buscando un pastor que lo sustituya, estos d¨ªas tambi¨¦n tiene trabajo extra porque, adem¨¢s de atender la alcald¨ªa, tiene que remangarse en la campa?a electoral de las Generales para intentar el objetivo trazado por Ja¨¦n Merece M¨¢s de entrar en el Congreso de los Diputados. ¡°Si no somos imprescindibles, nos convertimos en irrelevantes¡±, asume Manuel Barrionuevo, cabeza de lista de esta formaci¨®n que tambi¨¦n ha entrado en los gobiernos municipales de Ja¨¦n capital, Baeza y Santisteban del Puerto.
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