Los clubes temen que la crisis por el virus derive en un declive social y deportivo
Las entidades sufren una dr¨¢stica ca¨ªda de ingresos y la huida de parte de sus socios. Alertan de que pueden perder capacidad competitiva y piden ayudas
Los clubes deportivos catalanes fueron los primeros en parar su actividad por la crisis sanitaria y ser¨¢n de los ¨²ltimos en volver a empezar. ¡°Nuestra naturaleza mueve a un gran n¨²mero de masas, y esto es incompatible con las medidas sanitarias actuales¡±, explican presidentes de clubes y federaciones.
El par¨®n ha debilitado a todas las entidades. Muchos clubes han sufrido bajas de abonados y no pueden ofrecer servicios deportivos que complementan sus ingresos anuales. ¡°Los socios son copropietarios del club¡±, recuerdan las entidades. ¡°No pagan solamente para recibir una contraprestaci¨®n, sino para formar parte de un proyecto y una masa social¡±.
Chema Buenache trabaja de 8.00 a 12.00. Su tarea y la de sus compa?eros de mantenimiento del Club Nataci¨® Sabadell es garantizar que la temperatura y el estado del agua de la piscina sea el correcto. Pero no hay ba?istas ni usuarios en el vestuario. Buenache est¨¢ solo con otros dos trabajadores en una instalaci¨®n con capacidad para centenares de personas. Es el guardi¨¢n del vac¨ªo. ¡°Esto es como ir a Las Vegas, pero sin luces. Es la misma ciudad, pero no tiene nada que ver¡±, compara. Buenache es uno de los 12 trabajadores activos de los 250 en n¨®mina en el club para garantizar la higiene de las instalaciones y su mantenimiento. ¡°Ahora tenemos unos gastos fijos, pero casi no tenemos ingresos. E ir¨¢ a peor¡±, avanza el presidente del club, Claudi Mart¨ª.
La situaci¨®n del club de Sabadell es calcada a la de la mayor¨ªa de clubes deportivos de Catalu?a. Sin competiciones ni servicios que ofrecer, los gastos son ahora mucho mayores que los ingresos. La direcci¨®n ha aplicado un ERTE a todos sus trabajadores, y parte de sus socios se han dado de baja. ¡°Estimamos que hemos perdido el 15% de la masa social. Pero si esto se alarga unos meses m¨¢s, podemos quedarnos sin el 50%¡±. A Mart¨ª le da miedo el d¨ªa despu¨¦s de la crisis. ¡°Empezaremos con el 100% de los gastos que ten¨ªamos antes, pero con el 50% de los ingresos. Las cuotas de los socios son la parte principal de los ingresos¡±, alerta. ¡°Necesitamos liquidez de manera urgente¡±. La Generalitat anunci¨® el jueves que aportar¨¢ 61 millones este a?o. ¡°Est¨¢ muy bien y lo valoro, pero que antes nos paguen el total de las subvenciones que nos deben desde el 2017¡±, apunta Mart¨ª.
Parte de los socios del club se han mostrado disconformes por haber tenido que pagar la cuota del mes de abril. ¡°Pero al ser un club privado, debemos abonarla por estatutos¡±, explica el presidente. A diferencia de los abonados en gimnasios, por ejemplo, los socios del CN Sabadell y otras entidades privadas son copropietarios y no pagan por una contraprestaci¨®n, sino por formar parte del club. ¡°El pr¨®ximo mes reduciremos el importe¡±, avanza el dirigente del club, que cuenta con unos 28.000 socios.
Crisis deportiva
Para fidelizar a sus socios, el Reus Deportiu ofreci¨® una entrada extra por cada d¨ªa de confinamiento. Nadie esperaba la respuesta de uno de los abonados. ¡°Pues yo me doy de baja, y vendr¨¦ al club con las entradas adicionales que recibir¨¢ mi mujer¡±. En el club a¨²n alucinan. De los cerca de 6.500 socios del Reus, unos 650 devolvieron el ¨²ltimo recibo. ¡°Algunos te explican que tienen dificultades en sus trabajos¡±, explica la presidenta, M¨°nica Balsells. ¡°Otros se dan de baja sin explicaciones¡±. La Generalitat tuvo que aclarar hace unos d¨ªas la situaci¨®n en un comunicado: ¡°Estas cuotas son aportaciones a fondo perdido para contribuir al mantenimiento de la entidad y reflejan la adhesi¨®n y pertenencia a un proyecto compartido para todos los asociados¡±.
Balsells y el Reus Deportiu ten¨ªan previsto recibir en verano a unos 500 ni?os por semana en sus campus deportivos. A falta de dos meses para las actividades, la entidad desconoce qu¨¦ pasar¨¢. ¡°La incertidumbre es lo peor. Seremos los ¨²ltimos en volver a ponernos en marcha [por celebrar actividades masivas], pero lo que no haremos ser¨¢ abrir las instalaciones para que se disputen competiciones profesionales a puerta cerrada, y que los usuarios sigan sin poder venir. Ser¨ªa una incongruencia. O todos, o ninguno. Tenemos que pensar en cada uno de los miembros del club, no solo en nuestros equipos profesionales¡±, afirma Balsells.
Los clubes temen que el rendimiento deportivo de sus equipos profesionales acabe afectado. ¡°Si tengo que prescindir de un jugador profesional o de un empleado de mantenimiento, lo tengo claro, tendr¨¦ que renunciar al deportista y quiz¨¢s al nivel competitivo actual¡±, lamenta Mart¨ª. ¡°Tenemos la plantilla del pr¨®ximo curso cerrada y confiamos en poderla mantener¡±, explica Balsells.
Para Mart¨ª, el ¨¦xito de los clubes catalanes depender¨¢ de la reacci¨®n del resto de pa¨ªses. ¡°Si el resto de Europa baja, bajamos todos; y nos mantenemos. Pero hay otros pa¨ªses que han reaccionado mucho mejor que nosotros. Y ah¨ª est¨¢ el problema¡±. El CN Sabadell es el gran dominador del waterpolo femenino espa?ol, base de la exitosa selecci¨®n nacional; y el Reus ha ganado ocho Copas de Europa de hockey patines. Gran parte del tejido deportivo catal¨¢n nutre a las federaciones nacionales y, a un a?o de los Juegos, la situaci¨®n es incierta. ¡°Si el CN Sabadell se constipa, la federaci¨®n catalana coge la gripe, y la espa?ola enferma¡±, refleja Mart¨ª. ¡°Es dif¨ªcil que el deporte espa?ol vuelva al mismo nivel para preparar los Juegos¡±, a?ade.
Sin ni?os, usuarios ni equipos en las instalaciones, los trabajadores como Buenache toman un protagonismo esencial. ¡°Mucha gente puede pensar que ahora no hace falta mantener la temperatura de la piscina¡±, avanza el empleado, ¡°pero si la dejas a cero, el gasto de gas para recuperarla es bestial. Bajarla un grado puede suponer unos 8.000 euros. Esto hay que explicarlo a la gente¡±, afirma. ¡°Ahora la piscina est¨¢ 27 grados¡±, a?ade. Pero sigue vac¨ªa.
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