Las peticiones de tratamiento en Proyecto Hombre remontan tras la desescalada en Catalu?a

La desescalada ha vuelto a aflorar las demandas de ayuda por drogodependencias que quedaron ocultas durante el par¨®n del confinamiento. Despu¨¦s de tres meses con las peticiones de tratamiento a medio gas en Catalu?a, Proyecto Hombre ha empezado a vislumbrar un incremento en los inicios de tratamiento. En total, 116 personas en el ¨²ltimo mes (hasta el 20 de junio) iniciaron el tratamiento de deshabituaci¨®n en la organizaci¨®n en Catalu?a, casi una veintena m¨¢s que en el mismo per¨ªodo del a?o anterior. La coca¨ªna y el alcohol son las sustancias causantes de m¨¢s del 80% de las demandas de tratamiento.

¡°Nos ha trastocado a todos esto que est¨¢ pasando. En este periodo de reclusi¨®n ha disminuido la demanda y algunos usuarios nos dec¨ªan que pensaban que est¨¢bamos cerrados. Las familias consideraron que era mejor esperarse¡±, explica Oriol Esculies, director de Proyecto Hombre Catalu?a. En los meses de marzo, abril y mayo, los inicios de tratamiento llegaron a caer hasta un 75%. Pero el consumo y la problem¨¢tica de las drogodependencias no entiende de pandemias y, pasado lo peor de la crisis sanitaria, las demandas de ayuda vuelven a resurgir. La coca¨ªna est¨¢ a la cabeza por cuarto a?o consecutivo y supone el 48% de los nuevos inicios de terapia, mientras que el abuso del alcohol representa el 34%.

¡°En 2019 hubo 1.520 personas atendidas. Es mucha gente. En Catalu?a los problemas de drogas est¨¢n muy presentes. El alcohol forma parte de nuestro ADN cultural, pero es m¨¢s dif¨ªcil de entender c¨®mo es que la coca¨ªna contin¨²a a niveles tan elevados. Tenemos que ser capaces de que esta curva vaya bajando en los pr¨®ximos a?os¡±, advierte Esculies. El experto tampoco descarta que, en los pr¨®ximos meses y derivado del mal escenario econ¨®mico que se prev¨¦ en Espa?a, vuelva a repuntar el alcoholismo. ¡°En t¨¦rminos generales, cuando el poder adquisitivo de las personas baja, se consumen m¨¢s sustancias econ¨®micas, como el alcohol. Puede ser que en los pr¨®ximos tiempos baje la coca¨ªna y suba el alcohol. Pero es una hip¨®tesis¡±, a?ade.

El patr¨®n del usuario com¨²n no ha variado en estos a?os: 40 a?os de edad, de media. M¨¢s hombres (83%) que mujeres. M¨¢s de un 40% solo tiene estudios primarios y el 30% padecen otros trastornos mentales y psicol¨®gicos. Un 7,6% son portadores del VIH. ¡°Este a?o observamos que en menores de 13-23 a?os, la sustancia predominante es el cannabis (m¨¢s marihuana que hach¨ªs)¡±, se?ala Esculies. Y alerta: ¡°Cuando est¨¢s bajo los efectos del alcohol o el cannabis eres m¨¢s imprudente. En el momento de desescalada, ya hemos visto a j¨®venes que han vuelto a agruparse para consumir. Tenemos que ir con cuidado porque se baja la guardia y puede perderse la toma de medidas como la distancia f¨ªsica o el uso mascarillas¡±.

A causa de la pandemia, Proyecto Hombre tambi¨¦n ha tenido que readaptar su forma de trabajar. Desde sesiones telem¨¢ticas para los usuarios que est¨¢n en tratamiento ambulatorio hasta extremar las medidas de seguridad para los que est¨¢n internados en sus centros terap¨¦uticos. A las personas que ingresan ahora se les hacen las pruebas diagn¨®sticas de la covid-19 y se las mantiene en cuarentena unos d¨ªas, para evitar contagios entre el grupo. ¡°Hemos pasado a un modelo ssemipresencial y ha funcionado razonablemente bien¡±, valora Esculies.

No ha sido f¨¢cil para los usuarios. Ni los de la comunidad terap¨¦utica ni los que estaban en casa. ¡°Todav¨ªa estamos en confinamiento para evitar contagiar a los compa?eros. Es muy dif¨ªcil. Sacamos fuerzas de donde podemos¡±, admite Carlos, que lleva siete meses en Proyecto Hombre por su adicci¨®n a la coca¨ªna. El consumo abusivo de esta sustancia lo arrastr¨® a la calle el pasado verano y pidi¨® ayuda. Lleva un a?o sin consumir. ¡°Nos tenemos que amoldar a la situaci¨®n. Es muy complicado tener una adicci¨®n. Tienes que sacar fuerzas de donde sea. Es mucha presi¨®n la que aguantamos aqu¨ª. Nos vemos obligados a no salir para no contagiar a los dem¨¢s compa?eros¡±, cuenta Carlos.

La crisis sanitaria tambi¨¦n ha tra¨ªdo complicaciones para la recuperaci¨®n de los usuarios de Proyecto Hombre. Por ejemplo, con las limitaciones de movimiento y aforo en determinados lugares, la reinserci¨®n se complica. ¡°Lo que nos preocupa es el futuro. Vemos que una persona para que se rehabilite de su drogodependenica ha de hacer un proceso de reinserci¨®n social. No es solo aguantar las ganas de consumir, sino resocializaci¨®n y restablecer la red de amigos. En este contexto de pandemia y restricciones, las oportunidades han quedado muy restringidas y eso nos preocupa¡±, explica Esculies.