El escritor en la ciudad ¨¢erea

La entrevista transcurre en castellano pese a que el entrevistado entiende y habla el catal¨¢n. El entrevistado es Juan Pablo Villalobos (Guadalajara, M¨¦xico, 1973), escritor barcelon¨¦s desde hace diecisiete a?os. Villalobos lamenta que no le hablen en catal¨¢n, y describe situaciones cotidianas en las que su interlocutor se dirige a ¨¦l invariablemente en castellano. Cuenta que hace poco, en un camping, le pidieron de d¨®nde era ¨¦l: ¡°Dije que era de Barcelona, pero aquel hombre insisti¨® que a ver de d¨®nde, de verdad, era yo. Hay una obsesi¨®n con estas clasificaciones que no deber¨ªa ser propia de una ciudad como Barcelona¡±.

La mujer de Villalobos, Andreia, es brasile?a, y sus dos hijos nacieron en la ciudad condal. Es la llegada de los ni?os el hecho que termina por convertirle en barcelon¨¦s, dice. ¡°Es f¨¢cil vivir aqu¨ª sin echar ra¨ªces, es una ciudad a¨¦rea, puedes vivir en una burbuja, estar de paso¡±, opina Villalobos, sentado en su estudio de trabajo, en la calle Bail¨¦n. Dice que ¨¦l vivi¨® en la burbuja durante los primeros cinco a?os, estrenados con los estudios de doctorado en Teor¨ªa de Literatura y Literatura Comparada por los que aterriz¨® en Barcelona. ¡°Pisos compartidos, la playa, las plazas, los viajes por Espa?a y Europa... Es una ciudad proclive a esta temporalidad, quiz¨¢ porque es portuaria. Es f¨¢cil vivir de espaldas a su historia, a sus barrios e idiosincracia. Barcelona tiene un germen de ciudad desidentizada, de ciudad global¡±.

Las cosas cambiaron cuando Andreia dio a luz a su primer hijo, con las visitas al m¨¦dico, la preparaci¨®n para el parto, los colegios, las actividades extraescolares y, m¨¢s adelante, con la clases que Villalobos imparti¨® en la universidad. La culminaci¨®n de su adaptaci¨®n a Barcelona es la vida de barrio, en Gr¨¤cia. Casi todo en un radio de un kil¨®metro: el colegio de su hija, el rato que est¨¢ con ella en la plaza mientras juega con sus amigos; la hora que consume en el mismo bar, leyendo, mientras espera a que la ni?a finalice la clase de ballet. Las charlas en las librer¨ªas Taifa ¨Ccon un vaso de pachar¨¢n o de mezcal¨C y en la Obaga; tambi¨¦n est¨¢ su fidelidad a tres paradas del mercado de Lesseps, como la carnicer¨ªa en la que compra la carne que utilizar¨¢ para preparar guisos mexicanos, y a la que d¨ªas m¨¢s tarde vuelve para mostrar fotos del resultado.

Este micromundo de barrio es una de las caracter¨ªsticas barcelonesas que el escritor ha mimetizado. Hay otras peculiaridades locales que ha hecho suyas, como lo que ¨¦l describe como ¡°el orgullo de vivir aqu¨ª y decir que no vas a la playa de Barcelona¡±: ¡°El nuevo barcelon¨¦s, que no conoce la costa, o que no tiene casa en el Empord¨¤, sabe que en 20 minutos puede estar en la Barceloneta. A m¨ª me encanta la Barceloneta, para pasear, hacer un arroz, pero si me ba?o, es en la Costa Brava¡±. Villalobos, apasionado del f¨²tbol, afirm¨® en 2019 en una entrevista en La Vanguardia que, por fidelidad a clubes minoritarios, deber¨ªa haberse hecho del Espanyol, pero admit¨ªa que es culer ¡°para disfrutar un poco de la vida¡±. ¡°El coraz¨®n me ped¨ªa ser del Espanyol, y sufrir, y tener dos o tres amigos periquitos, como lo era con el Atlas ¡ªclub de Guadalajara¡ª¡±. Villalobos explica hoy que sus simpat¨ªas por el Bar?a dependen en verdad de su filiaci¨®n por jugadores como Rafa M¨¢rquez, Neymar, Iniesta y Xavi. Y sin embargo, a?ade, el Bar?a, su vertiente m¨¢s global, tambi¨¦n es un obst¨¢culo para conocer la diversidad de Barcelona, porque un extranjero dif¨ªcilmente llegar¨¢ a tener contacto con el abonado del Camp Nou que lleva 40 a?os ocupando el mismo asiento.

La familia vivi¨® entre 2011 y 2014 en Brasil, pero quisieron volver a Barcelona. Su apuesta por la ciudad le desmarca, explica, de los novelistas que pasaron por aqu¨ª pero con la cabeza en su pa¨ªs de origen. ?l fue un escritor mexicano hasta que en sus dos ¨²ltimas obras, el mapa de su ciudad de adopci¨®n gan¨® protagonismo. Su evoluci¨®n como escritor ha corrido en paralelo a su adaptaci¨®n a Barcelona. Se considera un creador que escribe una ¡°nueva realidad, entre mundos, que no es de ning¨²n lado y que observa con distancia ir¨®nica¡±. Para ello busc¨® referentes de autores latinoamericanos que dejaron que Barcelona impregnara su obra, como Sergio Pitol o Jos¨¦ Donoso, pero sobre todo, el chileno Roberto Bola?o. ¡°Es un problema grand¨ªsimo a nivel literario cuando pierdes tu manera de hablar porque te est¨¢s adaptando al nuevo lugar. Bola?o me ayud¨® a perder el miedo¡±.