El cisma en la antigua Converg¨¨ncia agrava la inestabilidad en Catalu?a
Un grupo de concejales y cinco senadores dejan el PDeCAT para irse con Junts, el partido de Puigdemont
La inestabilidad pol¨ªtica que se vive en Catalu?a dio este domingo una vuelta m¨¢s de tuerca con lo que parece la ruptura total en el PDeCAT, el partido que cre¨® Artur Mas para borrar la imagen de corrupci¨®n de la extinta Converg¨¨ncia. Hasta ahora han anunciado que entregan el carn¨¦ los cinco senadores elegidos con estas siglas, los concejales de 16 poblaciones del ?rea Metropolitana de Barcelona (AMB) y el exconsejero de Cultura huido a B¨¦lgica, Llu¨ªs Puig, para sumarse al proyecto de Junts per Catalunya que impulsa Carles Puigdemont. Decenas de pactos municipales cerrados en 2019 podr¨ªan peligrar ahora.
Junts per Catalunya es un partido nacido el 25 de julio a medida de Carles Puigdemont, que tiene la misma denominaci¨®n que la marca electoral que concurri¨® a las elecciones catalanas de 2017 y cuyo cabeza de cartel fue precisamente el expresidente de la Generalitat, entonces ya fugado. Es tambi¨¦n la misma marca electoral que se present¨® a las elecciones municipales de 2019, cuyas listas estaban integradas mayoritariamente por candidatos con carn¨¦ del PDeCAT.
Desde que Puigdemont anunci¨® la creaci¨®n de un nuevo partido en el que ¨¦l ser¨ªa el centro de gravedad, la direcci¨®n del PDeCAT no escondi¨® sus recelos porque entend¨ªan que podr¨ªan acabar competiendo por el mismo espacio electoral, aunque entonces todo fueron buenas palabras y deseos de lograr un punto de encuentro y fusionar siglas y proyectos.
Las distancias se agravaron cuando se anunci¨® que el nuevo partido que presidir¨ªa Carles Puigdemont y cuyo secretario general ser¨ªa Jordi S¨¤nchez, expresidente de la ANC encarcelado por el proc¨¦s, se llamar¨ªa igual que la marca electoral de Junts per Catalunya, tras una maniobra legal poco clara para hacerse con el uso del nombre. Los recelos se hicieron realidad y la direcci¨®n del PDeCAT anunci¨® hace m¨¢s de un mes que pon¨ªa el caso en manos de sus abogados.
A principios de agosto, que este a?o ha sido h¨¢bil en los juzgados, el partido present¨® una demanda en la que se reclama la propiedad de la marca y que se proh¨ªba a los seguidores de Puigdemont que la sigan utilizando. El martes est¨¢ prevista la vista en un juzgado de Barcelona. Fuentes del PDeCAT recuerdan que, en cumplimiento del acuerdo congresual de Junts per Catalunya, a partir del 1 de septiembre han de empezar a pagar cuota a este partido todos los inscritos que ocupen un cargo p¨²blico, sean o no del PDeCAT.
M¨¢s all¨¢ de las batallas internas en este sector del independentismo, queda por ver el alcance que puede tener este reguero de bajas en decenas de gobiernos locales, configurados hace poco m¨¢s de un a?o y que ahora pod¨ªan peligrar seg¨²n el camino que tomen los cargos p¨²blicos del PDeCAT: seguir en el partido o entregar el carn¨¦ para irse con Junts, una formaci¨®n que apuesta por la ¡°confrontaci¨®n inteligente¡±, en palabras recientes del expresidente. El caso m¨¢s ilustrativo es la Diputaci¨®n de Barcelona, donde el PSC gobierna con el PDeCAT tras el pacto que negoci¨® el secretario de organizaci¨®n del PSC, Salvador Illa, ahora tambi¨¦n ministro de Sanidad, y que Puigdemont intent¨® evitar.
La dimisi¨®n en bloque de los concejales de Junts per Catalunya no afectar¨¢ al gobierno del ?rea Metropolitana de Barcelona que preside Ada Colau y del que forman parte todos los partidos que obtuvieron representaci¨®n en las elecciones municipales. Entre los dimisionarios est¨¢n los alcaldes de Sant Climent de Llobregat y de Begues, que son, a la vez, vicepresidente del AMB y portavoz de la formaci¨®n.
Los alcaldes est¨¢n con el PDeCAT en su mayor¨ªa y probablemente seguir¨¢n en ese partido, pues su visi¨®n de la pol¨ªtica cotidiana est¨¢ alejada de enfrentamientos institucionales y llamados a la desobediencia. Una de las excepciones es la de la alcaldesa de Girona y diputada de Junts en el Parlament, Marta Madrenas, que desde el primer momento se aline¨® con el que fue su predecesor en el consistorio.
En el Govern, solo hay una consejera del PDeCAT, que no tiene cargos en Junts, Angels Chac¨®n, que ocupa la cartera de Empresa y Conocimiento, adem¨¢s de Quim Torra, que ya anunci¨® que no se dar¨ªa de alta en ese partido ni seguir¨ªa en primera l¨ªnea pol¨ªtica.
Est¨¢ por ver la repercusi¨®n de estos movimientos en la formaci¨®n de mayor¨ªas en el Congreso de los Diputados. All¨ª, Junts tiene ocho, pero por lo menos la mitad no tienen carn¨¦ del PDeCAT. La diputada, M¨ªriam Nogueras, renunci¨® al cargo de vicepresidenta del PDeCAT hace un mes y la portavoz, Laura Borr¨¤s, siempre se ha alineado con Puigdemont.
Las dimisiones hacen imposible que ambos partidos puedan concurrir juntos a las elecciones catalanas, con lo que el independentismo se fragmentar¨¢ todav¨ªa m¨¢s y puede beneficiar a Esquerra Republicana. Pero ni Junts ni el PDeCAT tienen todav¨ªa candidato y no se descarta que esta ¨²ltima formaci¨®n pacte con el Partit Nacionalista Catal¨¤. Es otra marca pol¨ªtica nacida en junio y liderada por Marta Pascal, exsecretaria general del PDeCAT hasta que lo abandon¨® hace dos a?os por el seguidismo que se hac¨ªa entonces de Puigdemont. Lo cierto es que para entender en qu¨¦ ha quedado la Converg¨¨ncia que fund¨® y lider¨® Jordi Pujol cada vez hace m¨¢s falta un manual de uso. Artur Mas, mientras tanto, no se ha posicionado ni a favor del sucesor que ¨¦l nombr¨® en la Generalitat ni con los cuadros pol¨ªticos que promocion¨® durante tantos a?os en los ayuntamientos.
El proceso congresual de Junts est¨¢ previsto que finalice el 3 de octubre y para entonces es muy probable que ya haya hablado la justicia sobre la utilizaci¨®n de esa marca electoral y sobre la inhabilitaci¨®n de Quim Torra, tras la vista que se ha de celebrar el 17 de septiembre en el Tribunal Supremo.
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