El metro de Barcelona solo roza la mitad del pasaje habitual en el primer d¨ªa laborable tras las vacaciones

El primer d¨ªa laborable tras las vacaciones de verano de la mayor¨ªa de los ciudadanos ha puesto a prueba el transporte p¨²blico de Barcelona y su ¨¢rea. Sobre todo el metro, el sistema de transporte que m¨¢s pasajeros es capaz de absorber, pero tambi¨¦n el que m¨¢s ha perdido por miedo al virus del coronavirus. En este primer lunes, el metro solo ha rozado la mitad del pasaje (ha sido de un 49% respecto al mismo d¨ªa del a?o pasado), ha informado la presidenta de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) y concejal de Movilidad, Rosa Alarc¨®n. ¡°Se han podido mantener con ciertas garant¨ªas las distancias sanitarias, estamos relativamente satisfechos¡±, ha valorado Alarc¨®n.

Sobre los autobuses, TMB no tendr¨¢ datos hasta este martes. En el caso del tr¨¢fico privado, la ciudad ha sumado coches respecto al lunes pasado (un 17%), pero todav¨ªa es un 22% inferior a las mismas fechas del a?o pasado. Por zonas de la ciudad, la ca¨ªda de coches ha sido del 25% en el interior de la ciudad, del 21% en los accesos y solo de un 13% en las rondas, que permiten rodear la ciudad sin entrar en el centro. En el caso de la red de Cercan¨ªas, el pasaje ha sido de un 51% en comparaci¨®n con el mismo lunes de 2019, una cifra parecida a la que hubo a finales de junio y julio de este a?o.

Alarc¨®n ha recordado que la red de transporte p¨²blico ha funcionado al 100%, con refuerzos en las l¨ªneas 1 y 5, las m¨¢s concurridas, algo que en un escenario sin pandemia no ocurr¨ªa hasta que comenzaban las escuelas. Y ha agradecido a los empleados que han tenido que cambiar turnos de vacaciones para trabajar esta semana. Las frecuencias de paso en hora punta han sido de menos de tres minutos en la L1 y de menos de dos minutos y medio en la L5.

La operativa del metro a primera hora se ha desarrollado sin incidencias. A las ocho de la ma?ana, en la estaci¨®n de La Sagrera, ha habido momentos puntuales en los que ha sido dif¨ªcil guardar las distancias de seguridad. Se han formado peque?as aglomeraciones a pesar de la frecuencia de los trenes de la L5, que han pasado era de dos minutos en ambas direcciones. En uno de los accesos, dos trabajadores han sostenido una cinta de pl¨¢stico para evitar encuentros entre las personas que sal¨ªan de la estaci¨®n y las que entraban.

Dentro de los trenes, pr¨¢cticamente toda la gente ha utilizado la mascarilla durante sus trayectos. Un audio, reproducido varias veces, recordaba a las personas que es obligatorio llevarla. En general, en los vagones los viajeros vuelven a ocupar todos los asientos. Menos concurridas han estado las l¨ªneas L1 y L3, con menos usuarios vistos, donde s¨ª se ha podido mantener la distancia. Las tres han tenido una frecuencia de trenes de cada dos minutos.

En un recorrido por las estaciones de Drassanes, Diagonal y La Sagrera, de las 8.00 a las 9.00 de la ma?ana, no se han encontrado informadores que avisasen a la gente sobre las medidas de seguridad para utilizar el metro. Los que hab¨ªa eran del servicio de Rodalies. En cuanto a la presencia de trabajadores que limpiasen este transporte p¨²blico, solo se ha visto a una empleada desinfectando uno de los accesos de la estaci¨®n Sagrada Familia, a los pies de la obra de Gaud¨ª.