Los ejes comerciales de los barrios de Barcelona resisten a la pandemia

Los ejes comerciales de los barrios de Barcelona est¨¢n resistiendo y sobreviviendo mejor que el centro el envite que ha supuesto la pandemia. Si uno de cada cuatro comercios en el casco hist¨®rico de Barcelona han bajado la persiana de forma definitiva, en los barrios el promedio es de un 5,5%. Valores como la proximidad, una sensaci¨®n de mayor de seguridad y evitar desplazamientos y tambi¨¦n de defensa del tejido vecinal y del territorio explican esa mejor salud comercial de la periferia frente a un centro que depende, en buena parte, del turismo y de una poblaci¨®n que ahora teletrabaja en muchos casos.

Algunos de los ejes que tienen mejor salud y que est¨¢n resistiendo mejor la crisis son los de Sant Andreu, Creu Coberta, Maragall y Nou Eixample, con un porcentaje de cierres por debajo del 5%. Por contra, ejes como el de Marina, Sagrada Familia, Gran de Gr¨¤cia o Sants superan el 10%, seg¨²n datos de la Fundaci¨®n Barcelona Comer? que agrupa a 25 ejes de la ciudad.

El panorama comercial de los barrios no tiene nada que ver con la desertizaci¨®n que asola al coraz¨®n de Ciutat Vella y la parte m¨¢s central del Eixample. Es la diferencia de las zonas residenciales frente a las que lo dejaron de ser al girar casi por completo a la actividad tur¨ªstica. Un paseo por la calle Gran de Sant Andreu o por la calle Ferran no tiene nada que ver. En el primero, resulta dif¨ªcil ver una persiana cerrada. En Ferran ocurre todo lo contrario. ¡°Se ha resistido mejor en los barrios porque, adem¨¢s, hay mucha gente que todav¨ªa est¨¢ teletrabajando por lo que hace vida donde vive. Eso s¨ª, se trata de un consumo mucho m¨¢s comedido. La gente no sale a pasear o a dar una vuelta como se hac¨ªa antes de la pandemia. Se va a comprar m¨¢s lo que se necesita y no algo que ves y entras y compras. Entre otras cosas, porque hay que respetar el aforo de los comercios y porque el miedo sigue presente¡±, apunta Alfons Barti, director de la Fundaci¨®n.

Sin cifras concluyentes sobre la ca¨ªda del consumo, desde la Fundaci¨®n apuntan que la media puede situarse en el 20%. ¡°Lo que va a ser determinante es la campa?a de Navidad. Si va bien, se seguir¨¢ trabajando y aguantando pero si va mal, el cierre de negocios se podr¨ªa disparar al 20%¡±, a?ade Barti. Lo argumenta por el l¨ªmite de ¡°resistencia¡± a la crisis y porque muchos comerciantes y restauradores pidieron cr¨¦ditos ICO ¡ªalgunos ya van por el segundo¡ª y tiraron de ahorros: ¡°Cuando esto empez¨® se pens¨® que ser¨ªa cuesti¨®n de tres meses pero est¨¢ claro que va para m¨¢s largo¡±. No todos los alquileres se han negociado a la baja o con aplazamientos, lo que tambi¨¦n influye a la hora de aguantar m¨¢s o menos tiempo. Como tambi¨¦n est¨¢ resultando determinante la expectativa de los negocios y si sus propietarios est¨¢n o no cercanos a la jubilaci¨®n.

Por sectores, los que salen peor parados son los de la restauraci¨®n y la moda, especialmente en los ejes de Nou Eixample y Cor Eixample. ¡°Parte de la restauraci¨®n depende, adem¨¢s del turismo, de los que iban a las oficinas a trabajar que com¨ªan a mediod¨ªa y hac¨ªan alguna compra en los comercios en la pausa. Muchos de esos clientes han desaparecido por el teletrabajo o por miedo, como pasa con la gente mayor¡±, comenta Sergio Moral, presidente del eje Nou Eixample.

En algunos ejes, como en Sant Andreu, se han cerrado 16 establecimientos y se han abierto siete nuevos, tan dispares como una zapater¨ªa, un local de comida para llevar o una tienda para reci¨¦n nacidos. ¡°Ahora hay m¨¢s poblaci¨®n haciendo vida de barrio por el teletrabajo. Es una zona con bastante estabilidad laboral y muchos pisos ya pagados y eso tambi¨¦n se nota¡±, subraya Pr¨°sper Puig, presidente del eje comercial de Sant Andreu en el que son bastantes los negocios que ocupan un local de propiedad. ¡°Eso tambi¨¦n ha ayudado a capear la crisis ya que, por lo menos, no hab¨ªa que pagar alquiler¡±, a?ade.

Puig cree, adem¨¢s, que los residentes de los barrios han apreciado en esta crisis de forma especial el comercio de proximidad en un continuo urbano, con diversidad de oferta y al aire libre. ¡°Est¨¢ claro que ahora se ha puesto en valor y que se ha subrayado el sentimiento de pertenencia a una comunidad¡±, a?ade. Un modelo que, hist¨®ricamente, es el que ha promovido el Ayuntamiento de Barcelona en oposici¨®n a los grandes centros comerciales fuera de las ciudades. El consistorio ha realizado una campa?a de promoci¨®n del comercio de proximidad en los ¨²ltimos meses para impulsar el consumo local y se hab¨ªa propuesto realizar m¨¢s actividades del comercio en la calle como una medida a desarrollar entre julio y diciembre. Sin embargo, las jornadas de los comercios en la calle, que se sol¨ªan realizar con periodicidad mensual en algunos ejes, pr¨¢cticamente han desaparecido por la complicaci¨®n que conlleva gestionar el flujo de personas.

El s¨¢bado pasado se hizo una en Sarri¨¤ con las paradas con dos metros de distancia entre s¨ª y un recorrido de entrada y salida diferente. ¡°Nosotros lo valoramos pero no creo que estemos todav¨ªa en un momento de la pandemia para poder hacerlo en Sant Andreu¡±, afirma Puig. Adem¨¢s de algunas l¨ªneas de ayuda econ¨®mica al peque?o comercio, el Ayuntamiento est¨¢ trabajando con el sector el desarrollo de un marketplace para fomentar la venta digital de los comercios y promocionar los productos locales y de establecimientos propios de Barcelona. La venta online y otras herramientas digitales tuvo un impulso al inicio de la pandemia, en los meses del estado de alarma, y el prop¨®sito es que se afiance y vaya a m¨¢s.