La escuela que venci¨® a las restricciones

Adri¨¤ vuelve a trabajar como monitor; Pol puede hacer deporte con sus compa?eros de clase y Francisco tiene m¨¢s tiempo para ¨¦l mientras espera a sus hijos. Las tardes vuelven a tener alma en la Escola del Mar de Barcelona, en el barrio del Guinard¨®, donde los padres han creado unas actividades extraescolares alternativas para sortear las restricciones deportivas de la Generalitat. El nuevo programa, llamado Covisport, estructura las actividades en grupos burbuja para cumplir con las normativas sanitarias. La f¨®rmula funciona: el 60% de los ni?os de todo el centro ya se han apuntado. Los monitores han recuperado su empleo, los padres celebran la conciliaci¨®n familiar y los ni?os hacen deporte.

¡°Te toca a ti, Pol", dice un ni?o. Un grupo de siete estudiantes de quinto de Primaria juegan en el gimnasio de la escuela. La actividad parece una carrera de relevos y los ni?os no dejan de moverse. ¡°No me gusta estar en casa, y me da rabia que nos confinen¡±, admite Pol, de 10 a?os. Cuando el Govern prohibi¨® las extraescolares, se qued¨® sin f¨²tbol, donde juega en el Martinenc, y sin judo, sus actividades semanales por la tarde. Ayer se le ve¨ªa contento. ¡°En casa jugamos a juegos de mesa, pero prefiero estar fuera¡±. En el parque, por ejemplo. ¡°All¨ª jugamos con los compa?eros de clase¡±. ?Y de otras clases? ¡°S¨ª, tambi¨¦n¡±.

Una de las primeras medidas que tomaron los responsables de Covisport fue garantizar los grupos burbuja. Nada de juntar ni?os y ni?as de otras edades. Las actividades solo pueden realizarse con compa?eros de clase. ¡°De este modo garantizamos que aquellos padres que no hab¨ªan apuntado sus hijos a extraescolares por prudencia, en la escuela o afuera, los inscriban con toda seguridad sanitaria¡±, explica Joan Carles, uno de los impulsores. La mascarilla es obligatoria, aunque a Pol no le entusiasma. ¡°Nos hace sudar mucho¡±.

¡°Aquellos padres que no hab¨ªan apuntado sus hijos a extraescolares por prudencia, ahora los inscriben", dice un organizador

Adri¨¤ conduce las actividades en el gimnasio. Tiene 37 a?os, coordina un club de judo con 12 trabajadores y es uno de los monitores en la escuela. ¡°Nos hemos rebelado contra esta situaci¨®n de forma comunitaria¡±, reflexiona. ¡°Es un ejercicio de solidaridad de todos. Todos ponemos de nuestra parte por el bien de los ni?os¡±. Durante el confinamiento de marzo Adri¨¤ realiz¨® a distancia las actividades extraescolares, y a pesar de perder ¡°toda¡± la facturaci¨®n, ¡°los trabajadores siguieron cobrando¡±. Con los n¨²meros de la caja al l¨ªmite, recuperar la actividad en l¡¯Escola del Mar permite ver el futuro con optimismo. ¡°Lo bueno es que si las restricciones siguen, o si dentro de un tiempo vuelven a suspenderse las extraescolares, ya tendremos un plan que funciona¡±, celebran Adri¨¤ y Joan Carles. El centro ha recuperado a los 15 monitores que trabajaban por las tardes y ha a?adido a 8 trabajadores m¨¢s, sufragados por el coste de cada actividad. Cada sesi¨®n cuesta 6,5 euros. ¡°Al principio alguna empresa que gestionaba las extraescolares no acab¨® de verlo claro, pero al final ha sido f¨¢cil ponernos todos de acuerdo¡±, concreta Joan Carles. Ahora un par de centros m¨¢s ya han mostrado su inter¨¦s por aplicar la f¨®rmula con sus alumnos, y el Consorci d¡¯Educaci¨® ha transmitido su apoyo a la causa.

¡°Las tardes en casa se pueden hacer muy largas¡±, lamenta un padre

Pero no solo los ni?os y los trabajadores salen ganando. Los padres tienen unas horas para tomar aire antes de recoger a los menores a las seis de la tarde. ¡°Desde que salen de la escuela, a partir de las 16.10, hasta que cenan, sobre las 20.30, es mucho rato¡±, admite Francisco, de 44 a?os, padre de dos de los participantes y presidente de la asociaci¨®n de familias del centro. ¡°Las tardes en casa se pueden hacer muy largas¡±. Francisco puede teletrabajar y le ocurre lo mismo que a tantas familias. ¡°Los ni?os te reclaman, y a veces no puedes atenderles como quieres¡±. Recuperar las extraescolares le facilita la organizaci¨®n en casa. ¡°As¨ª la conciliaci¨®n familiar es un poco m¨¢s sencilla¡±, puntualiza Joan Carles.

El proyecto tiene fecha de caducidad. Las restricciones del Govern acaban el pr¨®ximo viernes y las extraescolares deber¨ªan volver a la normalidad. Pero el Departamento de Salud ya ha reclamado alargar las medidas y desde el centro est¨¢n a la expectativa. ¡°Estamos muy orgullosos de lo que hemos hecho¡±, muestra Joan Carles, ¡°pero deseamos que el proyecto tenga una vida corta¡±. Las tardes, al menos, ya son un poco m¨¢s normales para Adri¨¤, Pol y Francisco.