Ciudadanos y PP cortejan al sector de la hosteler¨ªa en Barcelona
La vicealcaldesa de Madrid defiende las demandas de la restauraci¨®n frente a las restricciones de la Generalitat
e laDos partidos de la oposici¨®n de Catalu?a, Ciudadanos y el Partido Popular, se han convertido en los arietes de la defensa de la hosteler¨ªa y la restauraci¨®n, dos de las actividades m¨¢s castigadas por las restricciones que ha impuesto la Generalitat por la situaci¨®n de la pandemia. Frente a horarios reducidos o cese de actividad, dos de las medidas que se han tomado en Catalu?a, Ciudadanos y PP abogan por una opci¨®n m¨¢s liberal, la de Madrid.
Los gestos de las dos formaciones hacia los gremios hoteleros y de la restauraci¨®n en Catalu?a se han ido incrementando a medida que se acerca la convocatoria de las elecciones auton¨®micas del pr¨®ximo mes de febrero. Y todo se produce mientras el sector de la restauraci¨®n, en el que trabajan unas 200.000 personas ¡ª entre afiliados a la Seguridad Social y aut¨®nomos en Catalu?a¡ª est¨¢ en pie de guerra contra la Generalitat.
El gesto m¨¢s reciente ha sido el de este martes, con la reuni¨®n que ha mantenido la vicealcaldesa de Madrid, Bego?a Villac¨ªs, con representantes de los hoteleros y restauradores. El mensaje es claro: ¡°En estos momentos hay que apostar por ayudar al comercio y a la hosteler¨ªa y eso no se hace con limitaciones arbitrarias porque la restauraci¨®n es un espacio seguro si se toman todas las medidas y se inspeccionan los locales para controlar ese cumplimiento¡±, manten¨ªa Villac¨ªs despu¨¦s de ese encuentro en un contacto con los medios de comunicaci¨®n.
La restauraci¨®n de Madrid estuvo cerrada durante el estado de alarma y desde su levantamiento reinici¨® su actividad con las limitaciones de aforos. Cuando los indicadores de la pandemia se dispararon, al inicio de este oto?o, siguieron abiertos. En Catalu?a se cerraron durante 40 d¨ªas y solo se permiti¨® su funcionamiento para el take away. El toque de queda impuesto en Madrid tambi¨¦n fue m¨¢s laxo y pueden estar abiertos hasta las 12 de la noche. En Catalu?a, antes de la nueva tanda de restricciones, la hora l¨ªmite para servir en los locales era las 10 de la noche hasta que el pasado 21 de diciembre se limit¨® a dos franjas horarias, de ma?ana y mediod¨ªa, y solo permitir el servicio para llevar en el resto del d¨ªa.
La vicealcaldesa de Madrid sostiene que son los propios datos de la pandemia los que ¡°demuestran que los contagios son m¨ªnimos en la actividad de la hosteler¨ªa, no representan m¨¢s del 2% y est¨¢ claro que los contagios se producen m¨¢s en la esfera privada¡±. Lo que hace falta, en su opini¨®n, es dejarles trabajar y una pol¨ªtica activa de ayudas.
Ciudadanos pone como ejemplo a Madrid en contraposici¨®n a Barcelona: ¡°En Madrid se ha bajado el IBI a los hoteles al 50% y la tasa de residuos el 50%. Lo que toca es apoyarlos¡±, insist¨ªa Villac¨ªs, junto a Carlos Carrizosa, candidato de Cs a las auton¨®micas.
El argumentario de Ciudadanos es el mismo que mantiene el PP, ambos en plena sinton¨ªa con las demandas del sector. Un apoyo de los populares que tambi¨¦n se ve en gestos, como el encuentro que mantuvo la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel D¨ªaz Ayuso, con empresas de restauraci¨®n cuando visit¨® Barcelona hace un mes. O la participaci¨®n en primera l¨ªnea y pancarta en alto del presidente del grupo municipal del Partido Popular, Josep Bou, en la concentraci¨®n de los restauradores contra las restricciones hace poco m¨¢s de una semana en la plaza de Sant Jaume que acab¨® en una marcha por el centro de la ciudad.
El gremio de restauraci¨®n agradece el inter¨¦s de los partidos en la b¨²squeda de soluciones o reflexiones. No obtienen ning¨²n compromiso y son conscientes de que son contactos institucionales que se producen en un momento de casi cortocircuito con el Govern catal¨¢n. Los restauradores se quejan de que, adem¨¢s, las medidas restrictivas se toman sin ning¨²n contacto previo. Y levantan su dedo acusador contra Pere Aragon¨¨s y Alba Verg¨¦s.
Abierto o cerrado seg¨²n la ciudad
El impacto de las diferentes directrices sanitarias que se siguen en las ciudades de Madrid y Barcelona lo conocen bien las cadenas de restauraci¨®n con establecimientos en las dos ciudades. El grupo Sagardi, por ejemplo, tiene los cinco restaurantes de Madrid en funcionamiento con normalidad, mientras que en Barcelona est¨¢n abiertos 4 y otros 10 permanecen cerrados. ¡°Y los que est¨¢n abiertos lo est¨¢n por pol¨ªtica de empresa y de marca, no por el movimiento de clientela¡±, explicaba un conocedor de la gesti¨®n del grupo que se quejaba de esa disparidad en funci¨®n de la ciudad.
Como otros restauradores, defiende que los locales son seguros y que son los primeros interesados en cumplir las normativas. Y tambi¨¦n comparte sus cr¨ªticas hacia una administraci¨®n que les ¡°criminaliza¡± y no les ayuda.
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