La peor resaca en el Pirineo leridano

Cuando la Generalitat cerr¨® perimetralmente una parte del Pirineo, a finales de diciembre, empezaron a sonar los tel¨¦fonos de los hoteles de Baqueira, en la Vall d¡¯Aran (Lleida), a la otra punta de la cordillera. ¡°La gente nos empez¨® a llamar pidiendo disponibilidad para los d¨ªas siguientes¡±, explica Rosa Vila, jefa de ventas del hotel Val de Neu. Llegaron esquiadores catalanes poco frecuentes en la zona, y clientes del resto de Espa?a y de Francia. Semanas despu¨¦s de que el turismo salvara la temporada tur¨ªstica de invierno, la Vall d¡¯Aran se encuentra en su peor momento de la pandemia, los contagios se disparan y el hospital no da abasto.

¡±Se han superado las plazas disponibles en el ¨¢rea que acog¨ªa las hospitalizaciones por covid¡±, explica Maria Verg¨¦s, s¨ªndica de Aran (m¨¢xima autoridad del gobierno aran¨¦s). Los registros actuales contrastan con el control epidemiol¨®gico del inicio de la pandemia, cuando el riesgo de rebrote en el pico de la primera ola (1.017, el 25 de marzo del 2020) fue tres veces menor del actual (3.174, el 20 de enero).

En los hoteles de la zona no contemplaban una ocupaci¨®n invernal tan alta. ¡°No nos esper¨¢bamos esta respuesta de los clientes¡±, admite un responsable del hotel Montarto. ¡°Nos dijeron que las Navidades ser¨ªan regionales y solo esper¨¢bamos catalanes, que es un porcentaje baj¨ªsimo, generalmente¡±. Pero las habitaciones se llenaron de hu¨¦spedes de todas partes. ¡°Tuvimos franceses, gente del resto del Estado y catalanes que eran asiduos de otras pistas de esqu¨ª. Fue sorprendente¡±, a?ade el responsable.

La restauraci¨®n prepar¨® men¨²s para grupos de hasta 20 personas

Las autoridades sanitarias admiten el exceso de movilidad en la zona y el descontrol de la pandemia. ¡°Es un caso ligado a una serie de actividades en algunos periodos que implican que haya m¨¢s afluencia de gente¡±, admite el consejero de Interior de la Generalitat, Miquel S¨¤mper. La zona ha pasado de contabilizar dos positivos las dos primeras semanas de diciembre a un m¨ªnimo de 170 las dos ¨²ltimas. ¡°El crecimiento de los positivos es alt¨ªsimo. Hay varios brotes detectados¡±, reconoce la consejera de Salud, Alba Verg¨¦s.

Ninguna sorpresa

El auge actual no sorprende a los vecinos. ¡°Tiene todo el sentido. Ha habido mucho movimiento. Y ahora sufrimos las consecuencias¡±, considera Vila. En el hotel Montarto son m¨¢s contundentes: ¡°Las medidas han sido un coladero¡±, explica el responsable. La s¨ªndica defiende que las restricciones eran iguales en toda Catalu?a: ¡°Las medidas se han aplicado, pero el control de estas medidas no nos corresponden. No tenemos competencias. El equilibrio entre salud y econom¨ªa era muy delicado¡±.

Los hoteles no esperaban una ocupaci¨®n tan alta en pleno confinamiento

Las celebraciones y las fiestas en casas privadas son otro factor que explica el auge de la covid en la comarca. ¡°Hemos visto de todo, explica Dolors, de 39 a?os, trabajadora del restaurante Eth Bistro de Vielha. ¡°En Fin de A?o nos ped¨ªan men¨²s para 14 y 20 personas. No eran familias, sino grupos de amigos que se juntaban en casas y pasaban la noche juntos¡±. Para Dolors, el auge del virus no se explica solo por la llegada de turistas. ¡°Si la gente que vive en la Vall d¡¯Ar¨¢n se quedara en casa, esto no pasar¨ªa. Se realizan fiestas en casas particulares y este es el principal problema¡±, asegura. Seg¨²n ella, algunos bares no respetan el horario de cierre y se ha celebrado alg¨²n encuentro a puerta cerrada. ¡°Falta polic¨ªa, pero ?c¨®mo se controlan las casas privadas?¡±, se pregunta. La s¨ªndica rechaza que los excesos navide?os de la zona sean mayores que en otras comarcas: ¡°No creo que Aran sea una excepci¨®n de lo que pudo pasar en cada casa¡±.

El consejero S¨¤mper admiti¨® el aumento de las fiestas multitudinarias en el Pirineo: ¡°Si la tendencia continua al alza habilitaremos m¨¢s recursos donde haga falta¡±. El Govern no contemplaba el lunes tomar m¨¢s medidas restrictivas en la zona para frenar el virus.

El crecimiento de la hosteler¨ªa ha sido mayor que en la restauraci¨®n, limitado por los horarios y los aforos reducidos. ¡°Hemos llevado mucha comida por la noche en los hoteles¡±, explica Mihai Borde, jefe de la braser¨ªa El Rac¨® de Vielha. ¡°Pero la mayor¨ªa de pedidos eran para familias, no para grandes grupos¡±, concreta. Ahora, sin embargo, toda la Vall d¡¯Aran sufre su peor resaca de Navidad.

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