Laura Borr¨¤s afronta su primera prueba como presidenta del Parlament con la gesti¨®n de la investidura

Laura Borr¨¤s puso una condici¨®n para ser presidenta del Parlament: nombrar al curtido abogado y exdiputado Jaume Alonso Cuevillas como secretario de la Mesa. Con ese movimiento busca dotarse de solvencia jur¨ªdica para una legislatura que la propia dirigente de Junts ubic¨® en el enfrentamiento con el Estado y sus ¡°injerencias¡±. Ahora llega su primera prueba de estr¨¦s: gestionar el pleno de investidura del president.

El proceso para elegir al jefe del Govern est¨¢ pautado por la ley de Presidencia y el reglamento parlamentario. La norma fija un plazo de 10 d¨ªas, tras la constituci¨®n de la C¨¢mara, para que la presidenta, ¡±una vez consultados los representantes de los grupos, proponga un candidato al pleno¡±. El elegido necesita la mayor¨ªa absoluta (68 diputados) para ser investido. Si no lo logra, se convoca otra votaci¨®n donde basta la mayor¨ªa simple. La celebraci¨®n de la primera votaci¨®n fallida, adem¨¢s, activa los dos meses de plazo antes de volver a convocar elecciones, sin cerrar la puerta a intentar otras candidaturas.

La ronda de consultas solo comienza cuando todos los grupos est¨¦n conformados. ERC formalizar¨¢ este lunes el tr¨¢mite (es el ¨²nico que falta, aunque el plazo expira el mi¨¦rcoles) y Borr¨¤s podr¨¢ abrir los contactos. ¡°Si existe el apoyo para uno de los candidatos, el pleno ser¨¢ en el l¨ªmite de lo que marca el reglamento¡±, explic¨® Borr¨¤s el pasado jueves. Pero Junts busca ganar tiempo y presionar m¨¢s a ERC. Una de las f¨®rmulas que sopesan es imitar el procedimiento propuesto por los letrados cuando se inhabilit¨® a Quim Torra por desobediencia y la mayor¨ªa independentista opt¨® por no proponer otro candidato. Tras la ronda, Borr¨¤s formalizar¨ªa que no hay candidato. Ese ¡°acto equivalente¡± a una investidura fallida har¨ªa correr el reloj.

El temor ese movimiento fue uno de los ingredientes que motiv¨® a ERC y la CUP a anunciar este domingo un preacuerdo de investidura, al margen de Junts. El independentismo se arriesgaban adem¨¢s al llegar a la ronda sin un candidato conjunto (74 de 135 diputados). Anticapitalistas y republicanos suman 42 apoyos, uno m¨¢s que PSC y comunes. Eso descabalga las opciones del socialista Salvador Illa de poder ir al debate de investidura.

El PSC, con dos puestos en la Mesa, tambi¨¦n hizo sus deberes y ubic¨® all¨ª a Ferran Pedret, su experto en t¨¦cnica parlamentaria. La falta de acuerdo secesionista les hab¨ªa abierto una ventana de oportunidad. Primero, la ley fija la obligaci¨®n de ¡°proponer un candidato¡±. El informe jur¨ªdico creen que respond¨ªa a una casu¨ªstica y el acto equivalente es una respuesta extrema.

Ese dictamen, no vinculante, tambi¨¦n esboza el papel del l¨ªder de la C¨¢mara en la designaci¨®n del aspirante: se limita a constatar si ¡°hay un candidato con ciertas posibilidades¡± de ser investido, incluso sin ¡°la certeza¡± de su ¨¦xito. La del PSC, adem¨¢s, no era una ¡°candidatura instrumental¡±, sino de una que aspira a gobernar. Si Borr¨¤s no presenta un nombre, muy posiblemente todo termine en los tribunales.