Distintas formas, mismo fondo

El viernes pasado, en su primera sesi¨®n de investidura, Pere Aragon¨¨s (ERC) cit¨® a Karl Marx. Y un fantasma recorri¨® los asientos de los diputados de Junts per Catalunya (JxC). Tambi¨¦n cit¨® a Pasqual Maragall, un pol¨ªtico al que hoy reivindican muchos grupos, pero no los junteros, o juntistas, ese partido de convergentes centrifugados que afirma no ser de derechas, pero tiene los pelos como escarpias por el pacto que ERC ha firmado ya con los anticapitalistas de la CUP. Los de Junts no ten¨ªan asidero posible en el discurso eminentemente social de Aragon¨¦s, y su reacci¨®n no fue la de un socio pretendido, sino la de un impl¨ªcito opositor.

Era de caj¨®n que algo ten¨ªa que cambiar que justificara la segunda sesi¨®n de ayer. Y el candidato a la presidencia de la Generalitat movi¨® alguna ficha. Para empezar, Marx desapareci¨® de su discurso y dej¨® paso a una cita de¡­ Carles Puigdemont. Es otro nivel, pero en JxC no parecen tener otro pr¨®cer de referencia. M¨¢s gui?o, imposible. El presidenciable tambi¨¦n dedic¨® m¨¢s tiempo al proyecto independentista y algo menos al socioecon¨®mico. La portavoz de Junts, Gemma Geis, agradeci¨® el tono y baj¨® la beligerancia. Lo que desencaden¨®, a su vez, una cadena de agradecimientos mutuos entre republicanos y puigdemontistas.

Cambiaron las formas, tal vez, pero el acercamiento real es casi inexistente. En sustancia, las posiciones siguen igual de alejadas. S¨®lo hay que repasar las redes sociales, un terreno en el que no se estila agradecer tonos, ni tampoco usar tonos dignos de agradecer.

M¨¢s gui?o de Aragon¨¨s, imposible: ya no cit¨® a Marx y s¨ª a Puigdemont

En s¨ªntesis, Pere Aragon¨¦s quiere gobernar la Generalitat sin tutelas externas (lo de las tutelas lo ha repetido varias veces, como quien dicta un titular de prensa), y Junts per Catalunya desea imponerle el poder superior del Consell de la Rep¨²blica, una entidad controlada por Puigdemont con vocaci¨®n de Generalitat privada. La supervivencia pol¨ªtica del ex presidente es el objetivo irrenunciable de su partido, lo que no deja mucho margen a la negociaci¨®n. Adem¨¢s, los junteros, o juntistas, no est¨¢n acostumbrados a jugar de socios menores y, por si fuera poco, s¨®lo tienen un diputado menos que Esquerra.

Lo parad¨®jico del panorama catal¨¢n es que este bloqueo pol¨ªtico ocurre con una ERC que marca perfil progresista y defiende un catalanismo poco identitario (Aragon¨¦s presumi¨® este martes de sus abuelos almerienses de Palomares) y, sin embargo, sigue lejos la otra opci¨®n num¨¦ricamente posible: alg¨²n acuerdo de Esquerra y socialistas. El Parlament de Catalunya es el ¨²nico lugar del mundo en que dos l¨ªderes, Aragon¨¦s y Salvador Illa (PSC), coinciden en reivindicar el lema de la Revoluci¨®n Francesa 2.0 ¡ªlibertad, igualdad, fraternidad, feminismo y ecolog¨ªa¡ª y se lo lanzan uno contra otro desde cada lado de la concertina que separa los dos frentes.

Esquerra marca perfil progresista pero sigue lejos alg¨²n acuerdo con el PSC

O sea, no hay alternativa a un Govern ERC-JxC y, a la vez, esto parece hoy imposible. En los pasillos, algunos negociadores lucen sonrisas de circunstancias, tratando de fingir que la soluci¨®n llegar¨¢ por la fuerza del destino. Pero cuesta imaginarlo a d¨ªa de hoy. Y, ciertamente, se acercan algunas posibles fechas hist¨®ricas, a las que tan dado es el independentismo: viernes santo, domingo de resurrecci¨®n ¡ªun dirigente de ERC recuerda que al cat¨®lico Junqueras le alegrar¨ªa esa opci¨®n¡ª o incluso el 14 de abril, 90? aniversario de la Segunda Rep¨²blica. En cambio, si no hay pacto de gobierno, la repetici¨®n electoral ser¨ªa en julio: el 18 cae en domingo.