El aire contaminado, a examen en la Bienal de Arquitectura de Venecia
El pabell¨®n catal¨¢n, comisariado por Olga Subir¨®s, exige un nuevo modelo de ciudad
En el d¨ªa mundial del reciclaje, el Institut Ramon Llull ha presentado el pabell¨®n catal¨¢n de la Bienal de Arquitectura de Venecia, que, con un a?o de retraso, abrir¨¢ sus puertas a los profesionales el jueves y al p¨²blico el s¨¢bado hasta el pr¨®ximo 21 de noviembre en la ciudad italiana. Air, aria, aire, la propuesta de la arquitecta Olga Subir¨®s, es una de las m¨¢s ecol¨®gicas y reivindicativas de una bienal que pone especial ¨¦nfasis en la crisis medioambiental motivada por la contaminaci¨®n atmosf¨¦rica.
Pero si el tema general es ?C¨®mo viviremos juntos?, Subir¨®s da una vuelta de tuerca m¨¢s y se pregunta ?C¨®mo sobreviviremos juntos? El proyecto se centra en la contaminaci¨®n a pie de calle, la que se respira cada d¨ªa y que, seg¨²n los ¨²ltimos datos, se cobra siete millones de vidas al a?o, 2.100 de ellas en la ciudad de Barcelona. ¡°No queremos solo visibilizar aquellas part¨ªculas invisibles que almacenamos en nuestros pulmones, sino hacer visible lo inadmisible, un crimen contra la humanidad¡±, asegura Subir¨®s destacando avances tan significativos, como que un hombre obtuvo el estatus de refugiado en Francia debido a la contaminaci¨®n de Bangladesh o que un forense ingl¨¦s dictamin¨®, por primera vez en la historia, la muerte de una ni?a a causa de la contaminaci¨®n que hab¨ªa respirado.
¡°La bienal es una oportunidad para investigar y el resultado de este proceso de diagnosis son nuevas evidencias cartogr¨¢ficas, que nos permiten reclamar un nuevo modelo de ciudad y presionar para que haya consenso pol¨ªtico en estos temas¡±, contin¨²a la comisaria que, para visualizar esta ingente masa de datos, ha contado con el estudio 300.000 km/s, dirigido por Mar Santamar¨ªa y Pablo Mart¨ªnez, especializado en an¨¢lisis de Big Data, para orientar los arquitectos en el dise?o de ciudades m¨¢s sostenibles, saludables e igualitarias.
La ¨²ltima capa del proyecto es la aproximaci¨®n art¨ªstica, una especie de inmersi¨®n sensorial amplificada, nunca mejor dicho, por 60 altavoces que retransmiten en el espacio expositivo una aria compuesta e interpretada por Maria Arnal y John Talabot.
Conocida por sus montajes de exposiciones, Subir¨®s ha dise?ado un espacio que evoca de forma abstracta los ca?ones urbanos, aquellas calles donde la contaminaci¨®n se queda atrapada y permanece oculta, maligna y estable. Recorri¨¦ndolo el p¨²blico ver¨¢ los discos atrapa part¨ªculas. Como el de Barcelona totalmente negro, tirando a caf¨¦ cuando llega arena del Sahara. Pero ni siquiera el disco obtenido en los Pirineos es blanco. ¡°El hombre ha colonizado todo el aire¡± asegura Subir¨®s. Flanquean un pasillo central, por donde los visitantes han de deambular, tres proyecciones sobre la situaci¨®n de Barcelona y otras tres sobre las ciudades m¨¢s contaminadas de Europa.
Ha pasado un a?o desde la presentaci¨®n de la web del proyecto que se ha ido modificando, as¨ª como los textos del monogr¨¢fico de Quaderns de Arquitectura i Urbanisme, que a partir de esta edici¨®n se encargar¨¢ de la difusi¨®n cient¨ªfica del pabell¨®n.
¡°La covid nos permiti¨® comparar la calidad del aire antes y durante el confinamiento, establecer relaciones entre la incidencia del virus y las zonas m¨¢s contaminadas y pobres. Las epidemias siempre han sido una oportunidad para acelerar medidas de planificaci¨®n urbana destinadas a mejorar la salud de la gente. Tenemos derecho a un aire limpio¡±, concluye Subir¨®s.
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