El nuevo Govern catal¨¢n se estrena con medidas sociales poscovid
El ¡®president¡¯ Aragon¨¨s encargar¨¢ un plan de choque de salud mental
El nuevo Govern se estrena este mi¨¦rcoles con la toma de posesi¨®n de los 14 consejeros y la primera reuni¨®n del Consell Executiu. Tras el simbolismo de la ceremonia del lunes, donde el protagonismo recay¨® en los trabajadores de servicios esenciales (representados en un grupo de m¨¦dicas y enfermeras, entre otras), el martes el president Pere Aragon¨¨s visit¨® el Hospital Parc Taul¨ª de Sabadell y anunci¨® la puesta en marcha de un plan de salud mental, un ¨¢rea que arrastra carencias hist¨®ricas y cuya demanda ha crecido por la pandemia. Sobre la mesa tambi¨¦n est¨¢ ¡°el rescate social¡± pactado con Junts y que tiene 700 millones de euros de presupuesto.
El primer d¨ªa h¨¢bil del president recogi¨® todos los retos y dificultades a los que el nuevo Ejecutivo se tendr¨¢ que enfrentar. Tras los simbolismos de la toma de posesi¨®n y los gui?os feministas, el equipo de Aragon¨¨s quiso transmitir la imagen de que ya est¨¢ manos a la obra. El sitio elegido para su primer acto oficial fue precisamente esa visita al Servicio de Salud Mental para ni?os y j¨®venes del Hospital Parc Taul¨ª. Por la tarde visit¨® a los l¨ªderes independentistas presos por la sentencia del Tribunal Supremo del proc¨¦s.
Las voces de expertos alertando de las secuelas en la salud mental por la pandemia ¡ªy las quejas por el descuido en esa ¨¢rea¡ª han puesto el tema en la agenda y Aragon¨¨s lleg¨® a Sabadell con un anuncio sin muchas concreciones. El primer encargo a los departamentos de Salud, Educaci¨®n y Derechos Sociales ser¨¢ la redacci¨®n de un plan de choque asistencial, enfocado en ¡°los j¨®venes y en los colectivos m¨¢s vulnerables¡±. La dotaci¨®n presupuestaria se conocer¨¢ ¡°en las pr¨®ximas semanas¡±.
El encargo muy posiblemente se debatir¨¢ en la primera reuni¨®n del Consell Executiu. Junts y ERC pactaron entre sus prioridades la puesta en marcha de un programa de rescate social, con una inversi¨®n de 700 millones de euros, y que busca fomentar, entre otros, la ocupaci¨®n en j¨®venes, mayores de 45 a?os y la reducci¨®n de listas de espera en dependencia. Es una idea defendida en campa?a por los republicanos y que en el acuerdo con su socio de gobierno se le a?ade la coletilla de ¡°movilizaci¨®n inmediata de recursos¡±.
Los trabajos est¨¢n muy adelantados y, por tanto, las medidas sociales poscovid tienen n¨²meros para ser las primeras salir adelante. Todo se hab¨ªa cocinado en los departamentos de Econom¨ªa y Asuntos Sociales, que eran de ERC. Ahora ambos est¨¢n bajo el dominio de Junts. Posiblemente una prueba para un Govern obligado a mostrar coordinaci¨®n.
El anuncio del plan de choque en salud mental, aunque gaseoso, es una declaraci¨®n de intenciones en un Ejecutivo que, de momento, parece estar especialmente preocupado por la imagen. Las tradicionales alfombras que se usan en las recepciones del Palau fueron cambiadas, en la toma de posesi¨®n, por una hecha de fibras naturales. El mensaje est¨¢ claro y la inc¨®gnita es la ejecuci¨®n.
El plan de salud mental, sin embargo, qued¨® deslucido por la noticia del desahucio de un piso del llamado Bloque Llavors, uno de los emblemas del movimiento por la vivienda de Barcelona. Seg¨²n los Mossos, el martes hubo un total de 15 diligencias de este tipo en toda Catalu?a. La resistencia vecinal con que se afrontan los desahucios tuvo el componente adicional de la llegada de la ¡°Generalitat republicana¡±.
La actuaci¨®n de la Brigada M¨®vil de los Mossos, siempre en el foco en casos como este, le sirvi¨® de munici¨®n a la CUP para estrenarse en el papel de socio externo exigente. El acuerdo de investidura entre ambos contemplaba excluir a las unidades de orden p¨²blico de los desahucios. En ERC ven injusto que no se haya ni dejado llegar a Joan Ignasi Elena a su nueva silla de consejero de Interior, ni plantear su reforma del protocolo de atenci¨®n de estos casos, para criticarles directamente. El PSC ya anunci¨® que no dar¨¢ los tradicionales 100 d¨ªas de gracia. Aragon¨¨s sabe que le estar¨¢n vigilando muy de cerca por ambos lados.
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