Un largo camino de obst¨¢culos para conseguir un contrato
Cinco menores migrantes extutelados por la Generalitat comparten las dificultades para asentarse y encontrar empleo
La pandemia y el cierre de fronteras hizo caer casi a la mitad la llegada de menores migrantes no acompa?ados a Espa?a en 2020. En Catalu?a, desde enero de 2020 hasta junio de 2021, llegaron 1.227 j¨®venes, un 45% menos que en 2019. Estos j¨®venes, tutelados por la Generalitat y acogidos en centros de menores, contin¨²an su carrera de obst¨¢culos justo en el momento de cumplir 18 a?os, cuando tienen que emanciparse, pero no pueden acceder a un empleo por falta de permiso de trabajo. Muchos de ellos se ven abocados a buscar, a contra reloj y con la burocracia y la ley de extranjer¨ªa en contra, una oferta de empleo que obligatoriamente, tal y como marca la normativa, no puede ser de un tiempo inferior a 12 meses a jornada completa. Si no lo consiguen se les caducan los permisos y quedan en una situaci¨®n de exclusi¨®n, ilegalidad, sin recursos y muchas veces, malviviendo en las calles.
Todos sue?an, antes de embarcarse en una patera rumbo a Espa?a, con un porvenir que no siempre llega. EL PA?S ha contactado con cinco j¨®venes extutelados que, gracias al apoyo de entidades sociales han logrado formarse, encontrar un trabajo y vislumbrar un futuro mejor.
Miloud Benazzouz tiene 21 a?os y atraves¨® el Estrecho de Gibraltar a bordo de una moto de agua en 2017. ¡°Mi familia no quer¨ªa que viniera a Espa?a, pero en mi ciudad, Alhucemas (Marruecos), hubo manifestaciones pidiendo una f¨¢brica peque?a para poder trabajar y un instituto donde continuar los estudios. Yo no hab¨ªa hecho nada, pero me detuvieron. Entonces ten¨ªa 17 a?os y mi familia por fin entendi¨® que ten¨ªa que marcharme para buscar un futuro mejor¡±, advierte Benazzouz. Consigui¨® ahorrar 2.000 euros y pagar para cruzar el mar desde T¨¢nger. ¡°?bamos tres en la moto de agua. El conductor, un ni?o de 11 a?os y yo. Estuve sujetando todo el viaje a ese ni?o porque, si nos ca¨ªamos, morir¨ªamos¡±, recuerda.
Como Benazzouz, Youssef Bencherki, Souad Anadah, Hamza El Khal y Zacariae Chaboun son j¨®venes extutelados que desde hace unos meses han conseguido firmar un contrato de trabajo, de 12 meses, en Fundaci¨® Intermedia a trav¨¦s de un programa del Servici¨® de Ocupaci¨®n de Catalu?a (SOC).
Laia Alonso, coordinadora transversal de programas de Intermedia, los acompa?a en su d¨ªa a d¨ªa para que cuando su contrato de un a?o termine, encuentren un nuevo empleo: ¡°Ahora estamos incidiendo para que las futuras empresas donde pidan trabajo valoren no solo su formaci¨®n o las competencias adquiridas, sino tambi¨¦n sus ganas de salir adelante¡±, explica.
Youssef Bencherki tiene 20 a?os y atraves¨® el Estrecho a bordo de una patera con apenas 15 a?os: ¡°Lo hab¨ªa intentado con 14 pero no lo logr¨¦... Mis padres no me dejaban, pero en Marruecos no iba a conseguir vivir¡±. Ahora vive en Barber¨¤ del Vall¨¨s (Vall¨¨s Occidental), trabaja de recepcionista y explica orgulloso que ha podido comprarse un coche, de segunda mano,
Algo similar le pas¨® a Souad Anadah, una chica de 18 a?os y que con 16 convenci¨® a sus padres para que le prestaran 4.000 euros para pagar el viaje en patera y jug¨¢rsela por un porvenir. Anadah vive hoy en Figueres (Alt Empord¨¤), comparte piso y trabaja a tiempo completo como auxiliar administrativa mientras estudia en la escuela de adultos para sacarse la ESO.
Hamza El Khal tiene 19 a?os y atraves¨® el Estrecho de Gibraltar con 16: ¡°T¨² en Marruecos puedes tener t¨ªtulos o haber estudiado, pero si quieres trabajar tienes que tener conocidos o pagar 8.000 ¨® 10.000 euros¡±, dice. El Khal admite que, si hubiera sabido todas las situaciones que le ha tocado vivir estos a?os no se la hubiera jugado atravesando el mar.
Tambi¨¦n en moto de agua atraves¨® Zakariae Chaboun, que ahora tiene 20 a?os y se la jug¨® con 17. De los cinco j¨®venes, ¨¦l es el que estuvo menos tiempo en un centro de menores. La mayor¨ªa de edad le oblig¨® a afrontar la vida de ¡°adulto sin papeles¡±. Aprendi¨® espa?ol pr¨¢cticamente sin la la ayuda de nadie y gracias al programa Formaci¨® i Treball ahora est¨¢ trabajando en el ¨¢rea de inform¨¢tica de Intermedia.
Durante los ¨²ltimos dos a?os, y a pesar de la pandemia, Intermedia ha contactado con 229 empresas para poder encontrar oportunidades laborales para estos j¨®venes. ¡°42 empresas han contratado a 60 j¨®venes que, gracias a estos trabajos, han conseguido regularizar su situaci¨®n¡±, explica Laura Ondo?o, directora de Empresa de Intermedia. ¡°Es muy importante la inserci¨®n laboral de estos j¨®venes porque cuando encuentran trabajo intentan buscarse la vida, se emancipan y liberan plazas en los pisos de acogida¡±, asegura Ondo?o.
¡°Al cumplir los 18 a?os empiezan casi desde cero¡±
Laura Ondo?o, directora del ¨¢rea de Empresa de la Fundaci¨®n Intermedia, explica que las entidades que trabajan con los j¨®venes tutelados y extutelados reivindican una reforma del reglamento de extranjer¨ªa ¡ªcomo hab¨ªa prometido el Gobierno de Pedro S¨¢nchez¡ª que permita que los menores tutelados puedan conseguir el permiso de residencia y trabajo antes de cumplir los 18 a?os, ya que as¨ª saldr¨ªan del sistema de protecci¨®n a la infancia y la adolescencia con posibilidades reales de integraci¨®n social y laboral: ¡°El gran embudo llega cuando los j¨®venes cumplen 18 a?os, entonces deben empezar los tr¨¢mites como adultos y es, pr¨¢cticamente, como empezar de cero¡±, lamenta. ¡°Deben demostrar que tienen un contrato de un a?o a jornada completa o con ingresos superiores al salario m¨ªnimo. Conseguir estos requisitos es pr¨¢cticamente imposible porque la realidad del mercado de trabajo choca frontalmente contra las exigencias legales para contratar estos j¨®venes¡±, dice Ondo?o. ¡°El principal problema es que la tramitaci¨®n es lenta y, por lo tanto, ante la urgencia de cubrir una vacante, a menudo no se est¨¢ a tiempo. Adem¨¢s, la mayor¨ªa de las empresas ofrecen contratos temporales de tres o seis meses y, en caso de querer contratar un joven extutelado tienen que hacer frente a una tasa de m¨¢s de 200 euros¡±, a?ade Ondo?o.
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