¡°Catalu?a podr¨ªa tener energ¨ªa suficiente con la e¨®lica marina¡±
Climent Molins, vicerrector de la UPC, alerta de que hay que apostar por los molinos flotantes para cumplir con la reducci¨®n de emisiones contaminantes
El Gobierno cree que ha llegado el momento de la energ¨ªa e¨®lica marina. Para 2030, seg¨²n el objetivo aprobado el pasado diciembre por el Consejo de Ministros, Espa?a debe alcanzar una potencia instalada con molinos en el mar de entre 1 y 3 gigavatios (GW) ¡ªequivalente a 1.000 y 3.000 megavatios (MW). Actualmente, el pa¨ªs solo cuenta con un aerogenerador, en Gran Canaria, con 5 MW de potencia. ¡°El objetivo es posible, aunque no s¨¦ si es realista. Para conseguirlo, deber¨ªamos ponernos ya¡±, opina Climent Molins (Barcelona, 1965), vicerrector de la Universitat Polit¨¨cnica de Catalunya (UPC) y uno de los acad¨¦micos de referencia en Espa?a de esta tecnolog¨ªa. La clave la tiene Catalu?a, dice Molins, porque es en su costa donde est¨¢ la mejor capacidad de viento de la Pen¨ªnsula Ib¨¦rica.
Con 28 GW, Espa?a es el quinto pa¨ªs del mundo con m¨¢s potencia e¨®lica instalada, y es solo terrestre. Catalu?a, sin embargo, est¨¢ a la cola y ¨²nicamente tiene 1,2 GW instalados. El impacto que suponen los molinos en el territorio es la principal raz¨®n de la Generalitat y los municipios para rechazar muchos proyectos. El mar, sin embargo, tiene mejor viento, m¨¢s espacio libre y menos obst¨¢culos. Pero la tecnolog¨ªa para instalar molinos marinos es el doble de cara, calcula Molins. En una mesa de expertos del pasado febrero organizada por una asociaci¨®n de municipios catalanes, Joaquim Coello, exdecano del Colegio Oficial de Ingenieros Navales y Oce¨¢nicos, estim¨® en cinco veces superior el coste de mantenimiento de un aerogenerador marino.
Desde el boom de la e¨®lica marina en el Norte de Europa hace veinte a?os, la tecnolog¨ªa ha avanzado y reducido los costes de instalaci¨®n. La hoja de ruta del Gobierno, el informe de objetivos aprobado en diciembre, estima que los costes de instalaci¨®n podr¨ªan rebajarse a m¨¢s de la mitad en 2030. Hay dos zonas en la costa de Espa?a que permitir¨ªan una amortizaci¨®n m¨¢s r¨¢pida de las inversiones: la de la Costa Brava entre el Cap de Creus y el golfo de Roses, y en la l¨ªnea de mar cercana al delta del Ebro. ¡°Estas zonas tienen un factor de capacidad cercano al 50%, es decir, unas 4.300 horas que pueden funcionar con su potencia nominal al a?o. En una zona terrestre con mucho viento en Catalu?a, esta capacidad est¨¢ un poco por encima del 30%¡±, explica Molins.
El 80% de la energ¨ªa e¨®lica marina instalada en Europa es de cimentaci¨®n fija. Esto es as¨ª porque en el Norte de Europa hay profundidades menos abruptas que en la costa de Espa?a y en el Mediterr¨¢neo en particular. Los molinos con estructuras que llegan al fondo no superan los 40 metros. A m¨¢s profundidad, los molinos deben levantarse sobre plataformas flotantes que, a su vez, est¨¢n sujetas al fondo mediante cadenas.
Cuanta menos profundidad y menos distancia de la costa, m¨¢s econ¨®mico es el proyecto, indica el Gobierno. En Inglaterra hay m¨¢s molinos en el mar que en tierra, indica el vicerrector de Transferencia, Innovaci¨®n y Emprendimiento de la UPC. ¡°All¨ª incluso los ponen en la playa, pero entiendo que aqu¨ª no lo hagamos porque nuestras playas est¨¢n m¨¢s concurridas¡±. Para los parques e¨®licos flotantes, las profundidades actuales medias son de 200 metros, pero este experto recuerda que es un ¨¢mbito todav¨ªa incipiente y contempla que en 10 a?os los molinos podr¨ªan instalarse en zonas de hasta 1.500 metros de profundidad.
A Molins le gustar¨ªa que Catalu?a fuera pionera en este campo como lo fue en la energ¨ªa hidroel¨¦ctrica hace m¨¢s de un siglo. De momento, la situaci¨®n es poco halag¨¹e?a. Hace una d¨¦cada se enterr¨® el proyecto Z¨¨fir. Encabezado por el Instituto de Investigaci¨®n en Energ¨ªa de Catalu?a (IREC), hubiera sido un parque marino precursor en el Sur de Europa. ¡°Fue una p¨¦rdida muy grande, se perdi¨® una oportunidad de oro¡±, lamenta Molins. El Z¨¨fir deb¨ªa levantarse por fases frente a L¡¯Ametlla de Mar (Tarragona). Fue recibido con la oposici¨®n de la ciudadan¨ªa, de los partidos pol¨ªticos locales y de las cofrad¨ªas de pescadores. Cuando empezaba a superarse la oposici¨®n local, la Generalitat, acuciada por la crisis econ¨®mica, acab¨® olvid¨¢ndose del proyecto.
Molins cree que hoy hay mayor concienciaci¨®n sobre la urgencia clim¨¢tica, por lo que conf¨ªa en que no vuelva a desperdiciarse una oportunidad como el Z¨¨fir. Para Catalu?a y para Espa?a, seg¨²n ¨¦l, es imprescindible desarrollar la e¨®lica flotante en el golfo de Roses. Una alianza formada por la compa?¨ªa vasca Sener y la estadounidense BlueFloat Energy, uno de los l¨ªderes del sector, present¨® este 2021 los detalles del megaparque e¨®lico del golfo de Roses, el Parque Tramuntana. El proyecto, que Molins recuerda que requerir¨ªa una inversi¨®n m¨ªnima de 3.000 millones de euros, contemplaba inicialmente dos fases de expansi¨®n hasta alcanzar una potencia instalada de 1 GW con 80 aerogeneradores. El proyecto suscit¨® un un¨¢nime rechazo en la provincia de Girona y sus promotores frenaron sus expectativas para proponer una fase de pruebas con tres molinos.
El vicerrector de la UPC considera que los promotores del Parc Tramuntana deber¨ªan haber empezado planteando la fase de pruebas, para ir convenciendo a la opini¨®n p¨²blica. Una de las cr¨ªticas m¨¢s importantes que ha recibido el parque es que desvirtuar¨ªa el paisaje de la Costa Brava. Molins subraya que el impacto visual ser¨ªa m¨ªnimo: los aerogeneradores se ubican a unos 20 kil¨®metros de la costa. La ubicaci¨®n propuesta por el parque esquivar¨ªa, adem¨¢s, corredores de cet¨¢ceos, zonas de pesca y de especial protecci¨®n de aves. Pese a ello, las entidades ecologistas han exigido m¨¢s estudios que garanticen que no habr¨ªa efectos negativos en el ecosistema. ¡°Esto lo han analizado por delante y detr¨¢s en Dinamarca, B¨¦lgica, Holanda, Alemania, Inglaterra, Suecia¡±, afirma Molins, ¡°no hagamos un problema de algo que no es un problema¡±.
Canarias, por delante
Molins lidera el equipo de la UPC que ha dise?ado Windcrete, un prototipo de aerogenerador flotante de hormig¨®n equilibrado con un tentempi¨¦ y sujeto al fondo marino mediante tres cadenas. Windcrete est¨¢ pendiente de conseguir financiaci¨®n europea. Cuando se pueda probar en el mar, su director tecnol¨®gico sabe a d¨®nde tiene que ir: a Gran Canaria. All¨ª se ubica el Plocan, una zona de ensayos marinos gestionada por un consorcio p¨²blico. El Plocan se ha consolidado como una referencia en el sector: ¡°Tienes los permisos sin problemas, te ponen el cable a tierra, te almacenan todos los datos. En Catalu?a esto no es posible¡±.
En Catalu?a hay una elevada sensibilidad medioambiental, reconoce Molins, pero parece que la gente olvide que la mayor¨ªa de electricidad consumida en Catalu?a es de origen nuclear, procedente de Vandell¨°s, Asc¨® y tambi¨¦n de la electricidad que se adquiere de Francia. ¡°Hay d¨ªas en Dinamarca en los que con la energ¨ªa e¨®lica cubren la demanda interna y les da incluso para exportar electricidad. Decimos que queremos ser como Dinamarca, pues con la energ¨ªa tambi¨¦n lo deber¨ªamos ser¡±.
Molins cree que Catalu?a no se puede permitir perder esta oportunidad si quiere cumplir con los compromisos de la Uni¨®n Europea de reducci¨®n de emisiones contaminantes. ¡°Y si quisi¨¦ramos prescindir de la e¨®lica marina, deber¨ªamos empezar por llenar el pa¨ªs de placas fotovoltaicas¡±. Preguntado por el potencial de las renovables en el mar, el vicerrector de la UPC lo tiene claro: ¡°?Catalu?a podr¨ªa tener energ¨ªa suficiente con la e¨®lica marina? S¨ª. Los recursos posibles desde el l¨ªmite del Golfo de Le¨®n hacia el sur [Costa Brava] son de 10 GW, seguro¡±. La potencia total de generaci¨®n el¨¦ctrica instalada en Catalu?a en 2020 era de 11,8 GW, seg¨²n Red El¨¦ctrica de Espa?a.
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