Todo se hizo mal en la residencia de Tremp donde murieron 64 ancianos en un mes
La investigaci¨®n de la Fiscal¨ªa revela el descontrol que allan¨® el camino al virus: ancianos sanos mezclados con enfermos desatendidos, y muertos a los que se tomaba la temperatura
Casi la mitad de los ancianos del geri¨¢trico de Tremp (Lleida) fallecieron a causa de la covid-19 en apenas un mes, entre el 22 de noviembre y el 25 de diciembre de 2020. La muerte de 64 de los 142 residentes fue provocada por el virus, pero tambi¨¦n por la m¨¢s absoluta negligencia de la direcci¨®n del centro, que ni estaba preparado para afrontar un brote ¡ªse hab¨ªa saltado los planes de contingencia aprobados por la Generalitat¡ª ni reaccion¨® de forma adecuada cuando el virus traspas¨® sus paredes.
La Fiscal¨ªa ha archivado la mayor¨ªa de las denuncias de familiares por muertes en residencias al constatar que, ante el drama desatado por la pandemia y la falta de medios, hicieron lo que pudieron. Pero el caso de Tremp es tan flagrante que el ministerio p¨²blico ha llevado ante el juez a dos personas ¡ªla directora y la responsable higi¨¦nico-sanitaria¡ª tras un a?o de investigaci¨®n que revela c¨®mo, durante un mes, el centro fue un escenario del horror. Los ancianos sanos eran ¡°obligados a permanecer¡± con los enfermos mientras recib¨ªan un trato inadecuado: llegaron a pasar ¡°hambre, fr¨ªo y sed¡±, y murieron solos mientras afuera sus familiares pensaban que se encontraban bien.
La primera ola del coronavirus, que coincidi¨® con el estado de alarma decretado por el Gobierno (de marzo a junio de 2020) fue una tragedia para residencias de toda Espa?a. Pero, por alguna raz¨®n, pas¨® de largo por la de Tremp, donde hubo una ¡°incidencia nula¡±. Tras ese primer tsunami, las administraciones empezaron a reaccionar. La Generalitat dise?¨® planes de contingencia. En agosto, la directora de la residencia leridana se reuni¨® con un responsable del Departamento de Salud. Pero incumpli¨® todas las directrices del plan: no inform¨® a la plantilla, no reparti¨® el trabajo ni cre¨® una bolsa de sustitutos, no dise?¨® la sectorizaci¨®n en tres zonas (roja, naranja y verde) ni fij¨® circuitos para la comida, la ropa y los residuos. Tampoco form¨® al personal sobre el uso de los equipos de protecci¨®n individual (los EPI) ni informaba a diario sobre la situaci¨®n en el centro al Departamento de Asuntos Sociales, contra lo que se le hab¨ªa pedido.
Cuando, el 19 de noviembre, un trabajador dio positivo por coronavirus, la residencia de Tremp estaba totalmente expuesta. La directora y la responsable higi¨¦nico-sanitaria (las dos denunciadas) dieron positivo, lo mismo que un n¨²mero creciente de empleados y residentes. Lo que sigui¨® fue el caos m¨¢s absoluto: la dejaci¨®n de funciones de la direcci¨®n, con una total ¡°falta de previsi¨®n, control y supervisi¨®n¡±, fue clave en la r¨¢pida transmisi¨®n del virus, lo que ¡°unido a la descoordinaci¨®n sanitaria y falta de respuesta inmediata produjo el fatal desenlace¡±, seg¨²n la denuncia presentada por la Fiscal¨ªa. Ese desenlace fue que, en un mes, el 42,95% de los residentes perdieron la vida.
La pesadilla la vivi¨® en primera persona un t¨¦cnico de Salud que, tras declararse el brote, acudi¨® al centro. Primero, a dar instrucciones. Y despu¨¦s, el d¨ªa 23 de noviembre, a constatar que no se hab¨ªa cumplido ninguna de ellas. La plantilla no solo no hab¨ªa sectorizado la residencia sino que, como no dispon¨ªa de un control actualizado de la lista de residentes ni de su ubicaci¨®n, permiti¨® que muchos de ellos ¡°compartieran espacios comunes como el jard¨ªn o la biblioteca¡±, lo que increment¨® el riesgo de contagio. La comida, la ropa y los residuos segu¨ªan circulando fuera de circuitos reglamentados. Y hab¨ªa una ¡°mala praxis¡± en el manejo de los EPI: nadie hab¨ªa formado a los trabajadores, que a¨²n llevaban ¡°sus propias mascarillas de tela o quir¨²rgicas¡±.
El 28 de noviembre, el departamento de Salud intervino la residencia de Tremp. Como no recib¨ªa ¡°informaci¨®n fidedigna¡± a trav¨¦s de los canales establecidos, la Generalitat no pudo hacer ¡°una adecuada valoraci¨®n de la gravedad de la crisis epidemiol¨®gica¡± ni anticiparse, seg¨²n la Fiscal¨ªa. Dos d¨ªas despu¨¦s, Asuntos Sociales abri¨® un expediente sancionador. Cuando la Generalitat hizo p¨²blicas algunas de las deficiencias halladas, en diciembre de 2020, la Fiscal¨ªa emprendi¨® una investigaci¨®n que se ha prolongado durante un a?o, y que ha culminado con una denuncia que ahora est¨¢ en manos de los juzgados de Tremp.
¡°No hubo una asistencia sanitaria real¡±
La Fiscal¨ªa acusa a las dos responsables de homicidio por imprudencia grave, y tambi¨¦n de trato degradante. ¡°Era tal la descoordinaci¨®n¡±, dice el ministerio p¨²blico, que constan registros de toma de temperatura a personas que ya hab¨ªan fallecido. Es el caso de A.M.F., que muri¨® un d¨ªa 28 y, seg¨²n la documentaci¨®n, recibi¨® tratamiento en los tres d¨ªas posteriores. O de R.G.P., que pese a haber muerto el 3 de diciembre recibi¨® medicaci¨®n al d¨ªa siguiente. Un desfase que ¡°pone de manifiesto que no hubo una asistencia sanitaria real¡±.
Los ancianos no recibieron atenci¨®n m¨¦dica adecuada porque no se activ¨® ¡°ning¨²n mecanismo de coordinaci¨®n con los centros m¨¦dicos¡±. La residencia no se desinfect¨® hasta el d¨ªa 29 (una vez que ya hab¨ªa sido intervenida) y uno de los d¨ªas no se ofreci¨® cena a los residentes hasta pasada la medianoche; muchos de ellos ¡°pasaron fr¨ªo y sed¡±. Hab¨ªa ¡°familiares con ciertos privilegios¡± que pod¨ªan hacer visitas, mientras que a otros se les vetaba el acceso. Esos familiares, adem¨¢s, pasaron ¡°d¨ªas sin tener noticia¡± de sus seres queridos. A algunos de ellos se les inform¨® de que sus padres o madres estaban en buen estado de salud cuando la realidad era que ¡°ya hab¨ªan fallecido¡±. Otros supieron de la muerte de sus seres queridos por la funeraria, por conocidos de Tremp o por voluntarios. Y a otro grupo de familiares no les qued¨® m¨¢s remedio que entrar a la residencia y buscar a sus parientes ¡°en las habitaciones¡±, donde en muchos casos ¡°los encontraron muertos¡±.
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