La mesa de di¨¢logo Gobierno-Generalitat se reunir¨¢ este mi¨¦rcoles, en plena tormenta sobre el futuro de Laura Borr¨¤s
Aragon¨¨s designa a dos consejeros republicanos para ocupar los sitios que Junts no ha querido aceptar
Este mi¨¦rcoles, en Madrid, se celebrar¨¢ la esperada reuni¨®n de la mesa de di¨¢logo entre el Gobierno central y el de la Generalitat. Ambas partes han hecho p¨²blica la fecha en la tarde de este martes, despu¨¦s que finalmente consiguieran cerrar los ¨²ltimos detalles de los acuerdos que esperan presentar. Se ha trabajado a contrarreloj pues hace dos semanas, tambi¨¦n en la capital, el compromiso adquirido tras la reuni¨®n entre los presidentes Pedro S¨¢nchez y Pere Aragon¨¨s (ERC) era que la nueva sesi¨®n de la mesa fuera durante esta semana y hubiera resultados concretos. Los republicanos se han dedicado los ¨²ltimos d¨ªas a presionar a La Moncloa para que se produzcan anuncios sobre la ¡°desjudicializaci¨®n¡±, si bien no ha trascendido el orden del d¨ªa de la reuni¨®n.
Al encuentro asistir¨¢n, en representaci¨®n del Ejecutivo central, la vicepresidenta Yolanda D¨ªaz; y los ministros de la Presidencia, F¨¦lix Bola?os; Pol¨ªtica Territorial, Isabel Rodr¨ªguez y Cultura, Miquel Iceta. La Generalitat estar¨¢ representada solo por miembros de ERC, pues Junts insiste en rechazar las condiciones con que funciona ese ¨®rgano, que busca poner fin al conflicto pol¨ªtico entre el Govern y el Estado. Acudir¨¢n la consejera de la Presidencia, Laura Vilagr¨¤; el de Empresa, Roger Torrent; la de Cultura, Nat¨¤lia Garriga y el de Interior, Joan Ignasi Elena. La reuni¨®n se celebrar¨¢ en un momento muy tenso entre los socios del Ejecutivo catal¨¢n, ante la decisi¨®n del Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a de abrirle juicio oral a la presidenta del Parlament, Laura Borr¨¤s, por supuestos delitos de corrupci¨®n. ERC tiene que decidir si, con su voto, se le retira el esca?o.
La puesta en marcha de la mesa, que se reuni¨® por primera vez en septiembre del a?o pasado en Barcelona, fue uno de los acuerdos a los que llegaron S¨¢nchez y Aragon¨¨s en su cita del pasado d¨ªa 15 en La Moncloa. Desde entonces, la celebraci¨®n de un nuevo encuentro se hab¨ªa ido posponiendo (ten¨ªa que ser en enero de este a?o), entre otras cosas porque ambas partes no lograban cerrar alg¨²n acuerdo con calado para presentar.
La filosof¨ªa inicial de la mesa, que pactaron PSOE y ERC a cambio de facilitar la investidura de Pedro S¨¢nchez, era solo comparecer ante la opini¨®n p¨²blica cuando hubiera adelantos. Ante esa falta de contenido, la nueva fecha se iba arrastrando y las pol¨¦micas como el esc¨¢ndalo del caso Pegasus o la certificaci¨®n de la poca ejecuci¨®n presupuestaria del Gobierno en Catalu?a terminaron por minar a¨²n m¨¢s la confianza.
Tanto La Moncloa como el Govern dejaron claro que exist¨ªan acuerdos maduros que se podr¨ªan presentar en esta mesa, de ah¨ª que no se entienda tanto secretismo para finalmente ponerle fecha hasta el ¨²ltimo minuto. Que a¨²n quedaban aspectos por cerrar lo demuestra la presi¨®n p¨²blica de los ¨²ltimos d¨ªas de los republicanos, especialmente en lo referente a acuerdos en el frente judicial. Oriol Junqueras, entre otras primeras espadas del partido, han acusado al Ejecutivo de no querer reformar el C¨®digo Penal, mostrando as¨ª el inter¨¦s porque los avances lleguen en ese campo. Rodr¨ªguez, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, ha recordado que el Ejecutivo ve importante hacer cambios penales, pero que lamentablemente no se cuenta con las mayor¨ªas necesarias. Los republicanos consideran que ese argumento es una excusa y recuerdan la suma que permiti¨® la investidura.
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