La huelga de cazadores agrava la amenaza por el exceso de jabal¨ªes

Los cazadores de Catalu?a han colgado la escopeta. Ayer, primer d¨ªa del periodo h¨¢bil de caza mayor ¡ªque acaba el 26 de marzo¡ª iniciaron una huelga indefinida. Por primera vez en la historia, el colectivo ha adoptado un paro indefinido para protestar por la obligaci¨®n de comunicar las zonas de las batidas con antelaci¨®n, una exigencia incluida en la actual Orden de Vedas. Ven ¡°inviable¡± cumplirla y se sienten v¨ªctimas pese a que son la ¡°primera l¨ªnea de defensa ante un problema de pa¨ªs¡±, como la superpoblaci¨®n de jabal¨ªes, que no tienen otro depredador. ¡°Se nos exigen m¨¢s deberes que a nadie y se nos pisan derechos en el uso del medio natural, frente a la impunidad de colectivos que van al bosque pensando que es de todos, cuando un 75% es privado¡±, indica el vicepresidente de la Federaci¨®n de Caza de Girona, Joan Espona.

La poblaci¨®n de jabal¨ª no deja de crecer. El sector calcula que, al no salir a cazar ayer, se habr¨¢ dejado de abatir a unos 5.000 ejemplares. La temporada pasada cazaron 66.975 animales. El problema, exponen, es que cada vez hay menos cuadrillas: en 2008 contabilizaron unos 100.000 cazadores activos, por los 60.000 del a?o pasado. De estos, el 55% est¨¢ en edad de jubilaci¨®n.

Las 180 cuadrillas de Girona, las m¨¢s afectadas porque es donde se concentra el 67% de los cerca de 250.000 jabal¨ªes que calculan hay en Catalu?a, mantienen el compromiso ¡°un¨¢nime¡± de dejar las armas en casa y hacer limpieza de caminos y bosques hasta llegar a un acuerdo.

Uni¨® de Pagesos apoya el par¨®n de los cazadores y denuncia una ¡°plaga¡± de jabal¨ªes. El sindicato reclama que se declare la emergencia cineg¨¦tica y que se usen todas las medidas posibles para reducir la densidad de poblaci¨®n de este animal. Entre mayo y julio se han realizado censos de jabal¨ªes en parajes agr¨ªcolas de ?reas Privadas de Caza (APC) de les Gavarres y Rocacorba, donde la conflictividad por da?os es mayor, y se ha analizado la afectaci¨®n en cultivos antes y despu¨¦s de la siega. Han visto m¨¢s animales tras la siega, ya que buscan el grano ca¨ªdo al suelo. En julio se detectaron 614 en dos APC en las Gavarres y 306 en una de Rocacorba. Tambi¨¦n han servido para activar actuaciones cineg¨¦ticas excepcionales. De junio a agosto, los cazadores han hecho unas 500 comunicaciones para cazar en cultivos donde denunciaron da?os.

Las demandas de los cazadores se centran en eliminar el punto 8.3. de la Orden de Vedas de este a?o (comunicaci¨®n anticipada de batida) adem¨¢s del compromiso de que ser¨¢n resueltos los agravios acumulados durante a?os. Tras diversas reuniones, ven la ¡°buena voluntad¡± del Departamento de Acci¨®n Clim¨¢tica de la Generalitat, pero consideran que necesitan ¡°m¨¢s que promesas de actuaciones futuras y que la buena voluntad se concrete en hechos¡±, afirma Espona. La semana pasada se reuni¨® junto con el presidente de la Federaci¨®n de Girona, Josep Blanquera, con la Directora General de Ecosistemas Forestales, Anna Sanitjas, entre otros. No se avanz¨® en el ¡°punto crucial¡± de la negociaci¨®n. Propusieron comunicar la batida solo cuando fuera en terrenos p¨²blicos y no en APC donde tengan acuerdos con los propietarios. El Departament lo consider¨® ¡°insuficiente¡±.

Para Sanitjas, el trabajo que hacen los cazadores ¡°es clave e importante como servicio p¨²blico¡±, pero insiste en que el Departamento necesita saber con antelaci¨®n el lugar de las batidas ¡°para hacer compatible la caza con que la gente vaya al medio natural con seguridad¡±. El objetivo es que, consultando una web, la ciudadan¨ªa pueda saber d¨®nde se realizan. Para reconocer el esfuerzo al colectivo, destinar¨¢n por primera vez en toda Catalu?a 1,05 millones en ayudas, equivalentes a entre 20 y 25 euros por jabal¨ª capturado que se introduzca en la cadena alimentaria, y avanza que trabajan con Interior para ¡°sancionar actuaciones organizadas que pretendan boicotear las batidas¡±.

Poblaci¨®n descontrolada

Las poblaciones de jabal¨ª han crecido este a?o en Catalu?a una media de un 15%, un 37% en el Alt Empord¨¤ con una densidad de 17,5 individuos por kil¨®metro cuadrado. La principal causa es el aumento de fertilidad de las hembras por la excepcional a?ada de bellota de oto?o de 2020 que les facilit¨® mucho alimento. Las m¨¢ximas densidades siguen en el noreste, en la Garrotxa ¡ªdonde una sola cuadrilla caz¨® 1.000 ejemplares¡ª, las Guilleries, el Montseny, y sectores de cordilleras prelitorales, como Montnegre, les Gavarres o Collserola. Son zonas con alta pluviometr¨ªa y grandes superficies de bosques productores de frutos (encinas, robles) y cultivos de regad¨ªo, que les sirven de alimento. En Lleida y Tarragona, con menos bosques y m¨¢s sequ¨ªa, la densidad es menor.

Es necesario bajar la densidad de poblaci¨®n de los jabal¨ªes para reducir los problemas que generan: da?os en cultivos, accidentes, riesgos sanitarios, presencia en zonas urbanas y da?os a la biodiversidad. Seg¨²n la consultora medioambiental Minuartia, las poblaciones ¡°no parecen estar cerca de tocar techo y tienen potencial para crecer m¨¢s¡±. ¡°Su gran expansi¨®n geogr¨¢fica y demogr¨¢fica se debe a su capacidad adaptativa, y a su alta tasa reproductora, excepcional entre los grandes mam¨ªferos¡±, valora. El programa de seguimiento del jabal¨ª exhorta a seguir aplicando medidas para reducir la densidad con la presi¨®n de la caza, aumentando la efectividad de las batidas y aplicando otras medidas donde sea necesario, como por ejemplo la actuaci¨®n de los agentes rurales.

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