Una jueza investigaba a los atracadores que mataron a la trabajadora del bingo de Tortosa al menos desde agosto

La titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucci¨®n 3 de Tudela (Navarra), Carmen Garc¨ªa Anciso, investigaba al menos desde agosto a la banda de atracadores que supuestamente mat¨® a una empleada de un bingo de Tortosa (Tarragona) el pasado 19 de septiembre e hiri¨® de gravedad a otro cliente. En el auto que confirma la prisi¨®n de otro presunto integrante del grupo, detenido en Navarra el pasado martes, confirma que la Guardia Civil ten¨ªa los tel¨¦fonos pinchados de los delincuentes. La Polic¨ªa Nacional tambi¨¦n segu¨ªa sus pasos, y acab¨® deteniendo a dos de ellos en una operaci¨®n conjunta con los Mossos d¡¯Esquadra.

La Guardia Civil, dirigida por el juzgado, investigaba un atraco cometido el 19 de agosto pasado en el casino y sal¨®n de juegos Avanze, en la localidad de Cintru¨¦nigo (Navarra). Las pesquisas sostienen que los hermanos Ayoub E. y Mohamed E., presuntamente implicados en Tortosa, junto a Daniel Leonardo S. entraron con armas, sin que puedan especificar si eran reales o simuladas, y atracaron la casa de juegos de azar. En el auto de la juez se habla de la supuesta participaci¨®n de una cuarta persona, solo identificada con el nombre de Abdul. En el escrito que ordena el ingreso en prisi¨®n sin fianza de Daniel Leonardo S., la magistrada se?ala que los investigados ten¨ªan los tel¨¦fonos intervenidos y que de ello se obtuvieron pruebas que respaldan su decisi¨®n de encarcelar al arrestado.

Los dos hermanos y una mujer, pareja de uno de ellos, son los tres sospechosos de matar a la mujer del bingo de Tortosa, despu¨¦s de huir de Navarra y ubicarse en la zona de Tarragona. Uno de presuntos autores, el mayor, ha huido y la Guardia Civil lo ubica en Francia, seg¨²n fuentes policiales, despu¨¦s de confirmar que la furgoneta que conduc¨ªa se salt¨® un control policial en la frontera con el Pa¨ªs Vasco. Los Mossos desconoc¨ªan que la banda se encontraba en Catalu?a, lamentan fuentes policiales.

En cuanto el asesinato de la trabajadora del bingo salt¨® a los medios de comunicaci¨®n, el mismo lunes, la Polic¨ªa Nacional acudi¨® a los Mossos d¡¯Esquadra. Fuentes policiales aseguran que les facilitaron todos los datos que ten¨ªan de los sospechosos, que cre¨ªan que pod¨ªan ser los autores del atraco del bingo, y les dieron la matr¨ªcula de un coche, que localizaron. Formaron un equipo conjunto y esperaron a que llegasen los sospechosos para detenerlos. Arrestaron a cinco personas, aunque tres quedaron en libertad al no tener relaci¨®n con los hechos y no pasaron a disposici¨®n judicial. El juzgado de menores s¨ª orden¨® el internamiento de otro de los arrestados y, posteriormente, el juzgado en funciones de guardia de Tortosa dict¨® un auto de prisi¨®n sin fianza para la mujer.

La Guardia Civil tambi¨¦n contact¨® con los Mossos tras conocer el atraco en Tortosa. Pero lo hizo m¨¢s tarde y sin compartir su informaci¨®n, aseguran fuentes de la polic¨ªa catalana. Tiempo antes, el instituto armado y la Polic¨ªa Nacional hab¨ªan informado al Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO, un organismo del Ministerio del Interior encargado de coordinar a los diferentes cuerpos policiales para evitar descoordinaci¨®n entre ellos) de que investigaban a las mismas personas, pero entonces no crearon un equipo conjunto. Fuentes policiales aseguran que la Guardia Civil se neg¨®, alegando que su investigaci¨®n estaba m¨¢s avanzada.

La presunta descoordinaci¨®n policial sobrevuela el atraco de Tortosa que acab¨® con una mujer muerta y un herido grave. Otras fuentes policiales insisten que los sospechosos nunca hab¨ªan empleado tanta violencia, y que era dif¨ªcil de prever que acabasen dando un golpe as¨ª, donde dispararon a sangre fr¨ªa a dos personas. En el caso del atraco a la casa de juego de Cintru¨¦nigo, los tres sospechosos accedieron al local con el rostro cubierto con pasamonta?as y con pistolas ¨Dque la investigaci¨®n no ha podido concretar si eran reales o simuladas¨D, pero no hicieron uso de ellas. Otras fuentes, en cambio, critican que no se informase a la polic¨ªa auton¨®mica o que se esperase para detener a unas personas que ya ten¨ªan bajo el foco.

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